“Lección 26 — Material de preparación para la clase: Después de la prueba de vuestra fe”, Enseñanzas y doctrina del Libro de Mormón: Material para el maestro, 2021
“Lección 26 — Material de preparación para la clase”, Enseñanzas y doctrina del Libro de Mormón: Material para el maestro
Lección 26 — Material de preparación para la clase
Después de la prueba de vuestra fe
¿Alguna vez has orado por un milagro? ¿Buscas un testimonio espiritual más profundo de Jesucristo y de Su evangelio? ¿Hay algo que esperas recibir del Señor en tu vida en este momento? Piensa en esos deseos y esperanzas mientras estudias más acerca de la fe y de cómo el Libro de Mormón nos enseña a ejercerla.
Sección 1
¿Cómo el ejercer la fe en Jesucristo puede ayudarme a aprender y a crecer al afrontar pruebas?
En el libro de Éter, Moroni registró que mientras las guerras, la rebelión y la maldad abrumaban a la sociedad jaredita, el Señor envió al profeta Éter para declarar la fe, el arrepentimiento y la esperanza al pueblo.
Debido a que el Señor nos ama y quiere que progresemos, nos da oportunidades para probar nuestra fe en Él. El élder Richard G. Scott, del Cuórum de los Doce Apóstoles, dijo:
Cada vez que pruebes tu fe —o sea, actúes con dignidad según una impresión— recibirás la evidencia confirmadora del Espíritu. Al caminar hacia el límite de tu entendimiento, internarte en las penumbras de la incertidumbre y ejercer la fe, serás guiado a encontrar soluciones que de otra forma no hallarías (“El poder transformador de la fe y del carácter”, Liahona, noviembre de 2010, pág. 44)
Piensa en los momentos de tu vida en los que has actuado con fe en el Señor y luego has recibido un testimonio espiritual. El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó una vez cómo el permanecer fiel durante una prueba le ayudó a crecer espiritualmente:
A pesar de que sufrí en ese entonces, ahora, al mirar hacia atrás, estoy agradecido de que no se me presentó una solución rápida al problema. El hecho de verme obligado a recurrir a la ayuda de Dios casi a diario durante un periodo de muchos años me enseñó realmente a orar y a recibir respuestas a la oración; y me enseñó de una manera muy práctica a tener fe en Dios. Llegué a conocer a mi Salvador y a mi Padre Celestial de una forma y a tal grado que no podría haber ocurrido de otra manera, o me hubiera llevado más tiempo lograrlo […]. Aprendí a confiar en el Señor con todo mi corazón. Aprendí a caminar con Él día a día (“Acudir a Dios cada día”, Liahona, febrero de 2015, pág. 50)
Sección 2
¿De qué maneras puedo ser bendecido y recibir poder al ejercer fe en Jesucristo?
Como se registra en Éter 12:7–22, Moroni citó ejemplos de personas que ejercieron la fe y fueron bendecidas con milagros, revelaciones, liberación, conversión y promesas. Al comentar sobre el hermano de Jared, quien movió el monte de Zerín mediante el poder del Señor, Moroni concluyó: “Y si él no hubiera tenido fe, el monte no se habría movido; por tanto, [el Señor obra] después que los hombres tienen fe” (Éter 12:30).
El presidente Russell M. Nelson enseñó:
La fe en Jesucristo nos impulsa a hacer cosas que de otro modo no haríamos. La fe que nos motiva a actuar, nos da más acceso a Su poder (véase “Cómo obtener el poder de Jesucristo en nuestra vida”, Liahona, mayo de 2017, pág. 41).
El élder L. Whitney Clayton, de la Presidencia de los Setenta, enseñó lo siguiente acerca de vivir por la fe:
Dios nos pide que persistamos a Su lado, que confiemos en Él y le sigamos. Nos ruega: “[N]o contendáis porque no veis”. Nos advierte que no debemos esperar respuestas fáciles o soluciones rápidas de los cielos. Las cosas funcionan cuando nos mantenemos firmes durante la “prueba de [nuestra] fe”, por muy dura que sea esa prueba de soportar o lenta que sea la respuesta en llegar [véase Éter 12:6]. No estoy hablando de “obediencia ciega” [véase Boyd K. Packer, “El libre albedrío y el autocontrol”, Liahona, julio de 1983, págs. 98–100], sino de una confianza meditada en el amor perfecto y en el tiempo perfecto del Señor (“Haced todo lo que Él os diga”, Liahona, mayo de 2017, pág. 99)
Medita a fin de prepararte para la clase
¿Qué puede estar pidiéndote el Señor que requiera que actúes con fe? ¿Cómo puedes demostrar tu confianza en Él mientras avanzas?
Sección 3
¿Qué necesito hacer para recibir o fortalecer mi testimonio personal del Libro de Mormón?
Después de la destrucción de la civilización nefita, Moroni quedó solo para completar el Libro de Mormón. Antes de sellar el registro, ofreció unas palabras de consejo y ánimo. Instó a los futuros lectores a acudir al Libro de Mormón con fe para poder recibir un testimonio personal del Espíritu Santo de que es verdadero.
Estudia a fin de prepararte para la clase
Lee la invitación de Moroni en Moroni 10:3–5 y marca cómo podemos ejercer fe en Jesucristo y llegar a saber que el Libro de Mormón es verdadero.
Mientras servía como miembro del Cuórum de los Setenta, el élder Gene R. Cook explicó cómo el aceptar la invitación de Moroni es un acto de fe:
Observa la manera especial en la que recibimos respuestas de Dios: debemos “pedi[r] con un corazón sincero, con verdadera intención, teniendo fe en Cristo” [Moroni 10:4]. Considera de nuevo las palabras “teniendo fe en Cristo”. Esto significa una importante condición mental. Tener fe en Cristo significa que aceptamos que existe un Dios; aceptamos que, a través del poder de Su Hijo Jesucristo, Dios puede responder a nuestra oración; y creemos que Dios puede manifestarnos la verdad. Salimos de nuestra posición neutral al ejercer así la fe en Cristo. ¡Nosotros actuamos! Aunque nuestra fe sea pequeña, hacemos como Alma enseñó: nosotros “ejercit[amos] un poco de fe, sí, aunque no sea más que un deseo de creer [que Dios puede ayudarnos], deja[ndo] que este deseo obre en [nosotros]” (Alma 32:27) (“Moroni’s Promise”, Ensign, abril de 1994, pág. 14)
Anota tus ideas
Piensa cómo la invitación y la promesa de Moroni siguen el patrón de recibir un testimonio después de ejercer fe (véase Éter 12:6). ¿Cuál ha sido tu experiencia al recibir un testimonio de la veracidad del Libro de Mormón? ¿Qué podrías hacer para obtener tu propio testimonio del Libro de Mormón o para profundizar el que ya tienes?