“Un buen ejemplo”, El Amigo, marzo de 2024, pág. 32.
De amigo a amigo
Un buen ejemplo
Tomado de una entrevista con Haley Yancey.
Yo no era miembro de la Iglesia cuando era niño. No fui bautizado hasta que me convertí en adulto y hombre de negocios.
Mi padre también era un hombre de negocios y estaba muy preocupado cuando me uní a la Iglesia. Me dijo: “Ya no bebes alcohol. Eso será difícil en las reuniones donde todos beban juntos”.
Sin embargo, yo no estaba preocupado. Decidí que cuando alguien me ofreciera alcohol, diría: “No, gracias”, y luego pediría otra cosa.
Pasaron los años y así lo hice muchas veces. Después de un tiempo, mis compañeros de trabajo lo notaron. Si se me ofrecía alcohol, decían: “Mathias no bebe. Tráigale otra cosa”. Cada vez más de ellos dejaron de pedir alcohol también. “Yo tampoco quiero alcohol”, decían.
Una vez, unos invitados acudieron a una reunión y eran los únicos que bebían alcohol.
Me preguntaron: “¿Por qué nadie bebe alcohol? ¿Son todos miembros de su Iglesia?”.
“No”, les dije.
No les prediqué a mis compañeros de trabajo sobre la Palabra de Sabiduría, simplemente me mantuve firme en mis creencias y ellos se fijaron en mi ejemplo.
Tú también puedes ser un buen ejemplo y otras personas se fijarán cuando escojas lo correcto. Puedes ayudarlas tan solo viviendo el Evangelio.
Ilustraciones por Matt Smith