“Cuando trabajar en las metas se vuelve difícil”, Para la Fortaleza de la Juventud, febrero de 2023.
Cuando trabajar en las metas se vuelve difícil
Si fijas metas y luego no las logras, este artículo es para ti.
¿Te has fijado alguna vez una meta al comenzar el nuevo año y te has sentido muy motivado para lograrla… durante solo un día? Y entonces llega el 3 de enero y no pasa nada, tu meta se ha esfumado. Es mejor esperar hasta el próximo año y empezar de nuevo. [Nota al margen: No te preocupes. Todos hemos pasado por eso]. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a cumplir tus metas.
Guía para fijar metas
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Ora para saber en qué centrarte. El Padre Celestial sabe de qué manera debes mejorar. ¡Acude a Él! Piensa en lo que Él querría para ti y presta atención a los pensamientos o impresiones que te vengan a la mente.
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Elige metas que te interesen. Trabaja en algo que ya te guste o prueba algo nuevo. De cualquier forma, ¡escoge algo que te parezca emocionante!
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Fija metas específicas.
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Una meta no muy buena: Mejorar en el baloncesto.
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Una meta buenísima: Practicar 1000 tiros libres antes de que acabe el mes.
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Haz un plan.
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Ejemplo: Voy a lanzar tiros libres durante 30 minutos los lunes, miércoles y viernes después de la escuela. [Nota al margen: Escoger un momento es mucho mejor que simplemente “cuando tenga tiempo”, porque, seamos realistas, tal vez no te tomes el tiempo a menos que apartes tiempo].
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Crecer espiritual, social, física e intelectualmente. Echa un vistazo a las ideas de metas que se encuentran en la guía para los jóvenes o en NiñosyJóvenes.LaIglesiadeJesucristo.org.
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Averigua tu porqué. [Nota al margen: “Porque mi madre me dijo que lo hiciera” tal vez no te mantenga muy motivado]. ¿Por qué quieres trabajar en esta meta? ¿Te ayudará a ser más semejante al Salvador? ¿Te ayudará a llegar a ser la persona que quieres ser?
¿Estás demasiado ocupado?
Tal vez ya lo estés haciendo, pero debes ser más constante: Ya estás trabajando en muchas cosas cada día. Ahora, escribe una de esas cosas y cómo vas a mejorar. ¡Ahora es oficialmente una meta!
Piensa en algo pequeño: Trabajar en metas no tiene por qué tomar mucho tiempo. Empieza por reservar 5 minutos al día para trabajar en algo. [Nota al margen: Confía en mí. Será mucho más probable que lo hagas].
¿Son tus metas demasiado difíciles?
Ten paciencia contigo mismo. Intentarlo, fracasar y volver a intentarlo es parte de la vida. Si fallas un día, inténtalo de nuevo mañana. ¡Puedes hacerlo!
¡Ora para pedir ayuda! El Padre Celestial sabe lo que tienes que hacer para poder alcanzar tu meta. Confía en Él.
Replantea tu meta: Si te has puesto una meta que es demasiado difícil, trata de establecer una serie de metas pequeñas que te ayuden a llegar a ella. [Nota al margen: Si quieres practicar el ukelele todos los días, tal vez puedas comenzar con 15 minutos en lugar de una hora].
Trucos para las metas
Ideas para ayudarte a alcanzar tus metas
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Utiliza el teléfono. Haz un seguimiento de tus metas utilizando una aplicación en tu teléfono, como la aplicación Vivir el Evangelio. También podrías tratar de cambiar el salvapantallas o la contraseña de tu teléfono al nombre de tu meta para ayudarte a recordarla.
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Utiliza el espejo. Pega tus metas en el espejo del baño para ayudarte a recordarlas cada vez que te cepilles los dientes.
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Usa un frasco. Cuando estés trabajando en una meta difícil, escribe pequeños “triunfos” en trozos de papel o en palitos de helado y mételos en un frasco. Cuando te desanimes, lee acerca de las cosas que han salido bien.
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Comparte tu meta. Cuéntale a alguien en qué estás trabajando. ¡Pídele que te ayude a asumir tu responsabilidad!