Solo para versión digital
El gozo y el don del arrepentimiento: Mensajes recientes de profetas y apóstoles
Mira lo que los profetas vivientes han enseñado recientemente en las redes sociales acerca del arrepentimiento.
En la Conferencia General de abril de 2022, el presidente Russell M. Nelson nos invitó a “[d]escubr[ir] el gozo del arrepentimiento diario”1. Y agregó:
“… El arrepentimiento es la clave del progreso; la fe pura hace que sigamos avanzando por la senda de los convenios.
“Por favor, no teman ni demoren el arrepentimiento. Satanás se deleita en la desdicha de ustedes. Acaben con eso. ¡Expulsen de su vida la influencia de Satanás! y empiecen hoy mismo a experimentar el gozo de despojarse del hombre natural. El Salvador nos ama siempre, pero especialmente cuando nos arrepentimos”2.
Los miembros de la Primera Presidencia y del Cuórum de los Doce Apóstoles han hablado en la conferencia general acerca del gozo del arrepentimiento. También han compartido mensajes sobre este tema en las redes sociales, entre los que se encuentran los siguientes:
El arrepentimiento y el consuelo por medio de Cristo
“Dios no carece de emociones. Él nos cuida con todo el tierno sentimiento de un padre amoroso. Me imagino el gozo que sintió al saber que [Su Hijo Amado] finalmente obtendría un glorioso triunfo sobre el pecado y la muerte, lo cual abriría las puertas de las posibilidades celestiales para que ustedes y yo pudiéramos algún día volver a vivir con nuestros seres queridos.
“Sin embargo, también creo que Su gozo se vio mitigado por el conocimiento perfecto de lo que esperaba a Su Hijo Amado […]. [E]se mismo Hijo sufriría como nadie jamás había sufrido ni podría sufrir.
“No obstante, debido a que nuestro Padre Celestial nos ama tanto, permitió que esos acontecimientos gozosos y dolorosos tomaran su debido curso. Ya que el mundo necesitaba salvación, y puesto que ustedes y yo necesitamos salvación, Él nos envió un Salvador.
“… [A]ceptemos la perfecta y preciada dádiva de Dios. Pongamos nuestras cargas y pecados a los pies del Salvador y experimentemos el gozo que proviene del arrepentimiento y del cambio. Sigamos a Jesucristo y emulemos Su vida”.
Presidente Russell M. Nelson, Facebook, 24 de diciembre de 2021, facebook.com/russell.m.nelson.
Cómo se siente Dios cuando cometemos errores
“Una vez, un joven me preguntó: ‘Presidente Ballard, ¿cómo se siente Dios con respecto a mí cuando cometo errores?’. Tal vez ustedes también se hayan preguntado esto.
“Dios ama a todos Sus hijos y comprende que la vida es algo por lo que todos nosotros debemos pasar. No somos perfectos. Cometeremos errores. Él nos ha dado a Su Hijo Jesucristo para ayudarnos a cambiar y velar por nosotros en la vida terrenal.
“En definitiva, debemos aprender a vivir de la manera en la que Él desea que vivamos, pero sin importar la velocidad a la que cambiemos y progresemos, Su amor por nosotros es inmutable porque somos Sus hijos.
“El Señor Jesucristo puede ayudarnos a arreglar cualquier cosa en nuestra vida por medio de Su sacrificio expiatorio”.
Presidente M. Russell Ballard, Facebook, 16 de septiembre de 2021, facebook.com/mrussell.ballard.
Milagros del arrepentimiento y del perdón
“… [D]ebemos tratar de beneficiarnos al contemplar lo que ha ocurrido antes. Les pido que recuerden que el pasado es para aprender de él, no para vivir en él. Miramos atrás con el deseo de reclamar las brasas de las experiencias radiantes, pero no las cenizas.
“Y una vez que hayamos aprendido lo que tengamos que aprender y que guardemos con nosotros lo mejor de lo que hayamos experimentado, entonces debemos mirar adelante y recordar que la fe siempre señala hacia el futuro. La fe está siempre relacionada con bendiciones, verdades y acontecimientos del futuro que tendrán efecto positivo en nuestra vida.
“Algunos de ustedes tal vez se pregunten —en particular al vivir entre el tumulto diario del mundo que nos rodea en la actualidad— ‘¿Hay un futuro para mí? ¿Qué me deparará un año nuevo? ¿Estaré seguro? ¿Será segura mi vida? ¿Puedo confiar en el Señor y en el futuro?’.
“Por favor, recuerden esto: la fe confía en que Dios tiene grandes cosas reservadas para cada uno de nosotros y en que Cristo es en verdad el ‘sumo sacerdote de las cosas buenas por venir’ (Hebreos 9:11).
“Mantengan los ojos puestos en sus sueños, por muy distantes y fuera de su alcance que parezcan. Vivan para ver los milagros del arrepentimiento y del perdón, de la confianza y del amor divino que transformarán su vida hoy, mañana y para siempre. Esa es la resolución de Año Nuevo que les ruego que guarden”.
Élder Jeffrey R. Holland, Facebook, 9 de enero de 2022, facebook.com/jeffreyr.holland.
Un don purificador
“La expiación infinita del Salvador cambia por completo la forma en que podríamos ver nuestras transgresiones e imperfecciones. En lugar de insistir en ellas y sentirnos irredimibles o sin esperanzas, podemos aprender de ellas y sentirnos esperanzados. El don purificador del arrepentimiento nos permite dejar atrás nuestros pecados y emerger como una nueva criatura”.
Élder Dieter F. Uchtdorf, Facebook, 5 de junio de 2021, facebook.com/dieterf.uchtdorf.
Un cambio de corazón
“Nuestro corazón cambia por las verdades que aprendemos en el templo acerca de Dios y Jesucristo, y por las promesas que hacemos de amar y servir. Nos centramos menos en lo que queremos y más en alinear nuestra voluntad con la de Dios […]. La función principal de la Casa del Señor es que seamos transformados y lleguemos a ser nuevas criaturas en Cristo.
“A menudo en el mundo se intenta llevar a cabo los cambios desde afuera hacia dentro. Muchos creen que cambiar las circunstancias de una persona es el mejor medio para cambiar a una persona.
Sin embargo, Dios por lo general trabaja desde adentro hacia afuera. Si lo dejamos, Dios puede cambiar nuestro corazón, y entonces somos bendecidos con la capacidad y fortaleza para cambiar nuestras circunstancias.
“En los santos templos, lo que aprendemos y prometemos hacer nos cambia de adentro hacia afuera, permitiéndonos llegar a ser discípulos más devotos de Jesucristo”.
Élder David A. Bednar, Facebook, 19 de abril de 2022, facebook.com/davida.bednar.
Llegar a conocer al Señor
“Es posible que algunos de ustedes crean que Jesucristo es el Hijo de Dios y que Él ofreció un sacrificio expiatorio infinito y eterno. No obstante, también pueden creer que Su expiación funciona para todos los demás, excepto para ustedes. Ejercen fe en el Salvador, pero tal vez no creen que todas Sus bendiciones prometidas estén disponibles para ustedes ni que puedan aplicar en su vida. Los invito a que no solo podamos saber acerca del Señor, sino también llegar a conocerlo.
“El Salvador nos ha exhortado a llegar a ser como Él. Llegamos a conocer al Señor cuando procuramos ser como Él mediante el poder de Su expiación. Llegamos a conocer al Señor cuando le servimos y trabajamos en Su reino. Llegamos a conocer más plenamente al Señor cuando no solo creemos en Él, sino que también creemos lo que ha dicho y Sus promesas.
“Creerle —aceptar como verdaderos Su poder y Sus promesas— trae perspectiva, paz y gozo a nuestra vida. Su expiación es individual; es personal, y es para cada uno de nosotros”.
Élder David A. Bednar, Facebook, 14 de marzo de 2021, facebook.com/davida.bednar.
La responsabilidad personal
“El Salvador, al pagar el castigo por nuestros pecados, no nos eximió de la responsabilidad personal por cómo vivimos nuestra vida. El valor del trabajo, la laboriosidad, el trabajar con todas nuestras fuerzas, mejorar nuestros talentos y proveer para la familia se han declarado universalmente en las Escrituras desde el principio.
“Mi desafío para ustedes es que examinen sus metas y decidan cuáles les permitirán cumplir con sus obligaciones familiares, los mantendrán en la senda de los convenios y les permitirán tener el gozo que el Señor desea para ustedes. Recuerden, el tener una meta les permite ahorrar tiempo y esfuerzo al planificar para el futuro y no pasar por alto importantes prerrequisitos y fechas límites.
“Ustedes no deben temer, a pesar de los peligros y desafíos a los que se enfrentarán. Serán bendecidos y protegidos cuando procuren metas justas y dignas; planificar y trabajar con determinación y valor; y confiar y centrarse en la fe, el arrepentimiento, las ordenanzas salvadoras y el sacrificio expiatorio del Salvador al perseverar hasta el fin. El centrarse en el templo les ayudará a lograr esos objetivos.
“Doy testimonio solemne de la divinidad de Jesucristo. Gracias a Él, no necesitamos temer, pues en Él nuestro gozo es cabal”.
Élder Quentin L. Cook, Facebook, 10 de diciembre de 2021, facebook.com/quentin.lcook.
Oraciones personales honestas y sinceras
“He descubierto en mi vida que si un ser amado o un amigo sugiere cosas que debo cambiar, aunque sean verdad, el hombre natural que está dentro de mí, a veces salta y dice: ‘No lo estás viendo desde mi punto de vista’. O, ‘¿quién eres tú para juzgar?’, o puedo llegar a pensar: ‘Tal vez deberías ocuparte de ti mismo’. Pero cuando me arrodillo con humildad ante mi Padre Celestial y pregunto con suma sinceridad: ‘Padre, ¿qué necesito cambiar? ¿De qué necesito arrepentirme? ¿Dónde estoy fallando?’, viene a mí un sentimiento de calma, y en el momento apropiado, lo escucho a Él. Y Su verdad, Su eterna verdad, penetra mi corazón.
“La oración honesta, sincera y personal en momentos tranquilos abre las puertas a la revelación de nuestro Padre Celestial. Lo escuchamos. Él nos habla. “Me parece que tratar de escuchar las silenciosas impresiones del Espíritu, prometiendo a mi Padre Celestial que estaré más atento a esas cosas en las que puedo mejorar, me confiere una mayor capacidad para escucharlo.
“El verdadero cambio no ocurre en un día, al menos no para mí. Pero con el tiempo, llegamos a ser mucho más de lo que éramos. Él derrama Su Espíritu y Su aprobación sobre nosotros, al escucharlo y actuar de acuerdo con la guía espiritual que recibimos de Él. No hay nada mejor que sentir Su aprobación, sentir Su Espíritu. El Espíritu Santo confirma que nuestro Padre Celestial nos ama, y sé que, en mi caso, me asegura que mis pequeños pasos de progreso me están ayudando a acercarme a Él”.
Véase Élder Neil L. Andersen, “Cómo lo escucho”, 27 de diciembre de 2021, facebook.com/neill.andersen.
Con verdadera intención
“Hace poco un misionero me preguntó: ‘¿Somos hipócritas si no guardamos todos los mandamientos que enseñamos a las personas?’. ¡Esa es una gran pregunta! Pensé en compartir mi respuesta aquí. Sé que no tengo que ser perfecto para que me llamen a ser miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles. Sé mejor que nadie que no soy perfecto. Entonces, ¿tenemos que ser perfectos para servir al Señor? Claro que no. No se trata de eso.
“Hay una gran diferencia entre la rebelión y la debilidad. Por lo tanto, hipocresía es enseñar un mandamiento que uno no tiene la intención de guardar. Eso sería ser hipócrita; pero enseñar los mandamientos y luego tropezar y arrepentirte no es ser hipócrita, porque tienes la intención de guardar el mandamiento. Cuando hacemos las cosas con verdadera intención, significa que tenemos la intención de guardar el mandamiento. Por lo tanto, no hay nada de hipocresía en cuanto a enseñar sobre la senda de los convenios o los mandamientos de Dios cuando efectivamente tienes la intención de guardarlos todos. Sabes y puedes testificar que guardar esos mandamientos traerá bendiciones.
“El Libro de Mormón, en Moroni 6:8 nos dice: ‘Mas cuantas veces se arrepentían y pedían perdón, con verdadera intención, se les perdonaba’. La parte hipócrita se presenta si cometemos un error y no nos arrepentimos, ni tenemos la intención de arrepentirnos. La integridad consiste en que nuestras acciones y creencias estén en completa armonía; es de esa forma que tratamos de vivir nuestra vida. Pero ¿es ser hipócrita si no podemos hacerlo siempre? No, para eso es justamente el arrepentimiento, ¿verdad? Podemos arrepentirnos de aquellas cosas que, a pesar de nuestros buenos esfuerzos, no logramos hacer. Gracias a la expiación de Jesucristo, el perdón es real”.
Élder Dale G. Renlund, Facebook, 15 de febrero de 2022, facebook.com/DaleGRenlund.
La bondad y el incomparable poder de Dios
“Mis queridos amigos, les testifico que cuando nos arrepentimos sinceramente de nuestros pecados, permitimos que el sacrificio expiatorio de Cristo surta efecto plenamente en nuestra vida. El don del arrepentimiento es una expresión de la bondad de Dios para con Sus hijos y es una demostración del incomparable poder que Él tiene para ayudarnos a superar los pecados que cometemos”.
Élder Ulisses Soares, Facebook, 2 de junio de 2021, facebook.com/soares.u.