De amigo a amigo
Tam Hoi Hoon de Hong Kong, China
Cuando era pequeño, a Tam Hoi Hoon le encantaba escalar. ¡Se subía a las farolas de las calles y a las palmeras empleando las manos! Su clase preferida de preescolar era la de gimnasia. En aquel entonces la familia Tam vivía en Hawai, donde el padre estudiaba en la universidad.
Cuando la familia regresó a Hong Kong, Hoi Hoon se unió a la Asociación de Gimnasia Amateur y después de pasar a formar parte del equipo, ganó la Competición de Gimnasia de Hong Kong 2001. Ahora tiene 10 años y es miembro del Barrio Aberdeen, Estaca Hong Kong Island, y debido a la gimnasia y a sus creencias está siendo un ejemplo.
Aunque para Hoi Hoon la gimnasia es algo divertido, también resulta una actividad dura. Los martes, miércoles, jueves y sábados, sus padres lo llevan hora y media en tren para ir a entrenar, y luego otra hora y media para regresar a casa. Los entrenamientos suelen durar entre dos y tres horas, y aprender un nuevo movimiento puede llevarle cerca de un mes o dos porque tiene que practicarlo más de 500 veces antes de que salga perfecto. A Hoi Hoon le gustan los niños con los que trabaja y le gusta actuar ante el público; los aplausos y los gritos de júbilo del público le hacen muy feliz.
Su movimiento preferido de gimnasia es el salto mortal hacia atrás. ¡Hasta puede hacer un doble mortal antes de tocar el suelo! Hay que ser muy valiente para realizar algunos de sus movimientos.
En la cultura china los padres dan a sus hijos nombres con significados especiales, lo cual sucede con el nombre Hoi Hoon. Hoi significa “el mar”, y Hoon “amplio y espacioso”. Se le dio ese nombre especial porque su padre quería que fuera una persona comprensiva que tuviera una capacidad para cuidar y perdonar a los demás tan ancha y profunda como el mar.
Hoi Hoon trabaja bien con otras personas, por lo que el nombre resulta muy adecuado. Volviendo a la gimnasia, él trabaja con otros tres chicos, decisión que tomó su entrenador porque esa forma de trabajar requiere saber cooperar con gimnastas de edades diferentes.
Hoi Hoon es el segundo de los tres hijos de la familia Tam. A su hermano, Kwan Lam, de 12 años, le gusta mucho tocar el piano, cantar y nadar; su hermanita, Hiu Yau, de 4 años, prefiere bailar y leer cuentos. “Estamos agradecidos por tener tres hijos sanos y encantadores”, dice la hermana Tam. “Cada uno de ellos es especial”.
Los hijos de los Tam son buenos estudiantes y toda la familia está atareada entre semana con las tareas escolares; sin embargo, cuando disponen de tiempo para tomarse un descanso, les gusta jugar en el patio y montar en bicicleta cerca de la casa.
A Hoi Hoon le gusta la Primaria y trata de cumplir con los que aprende en su clase. Su canción preferida es “Soy un hijo de Dios”, y al ser un hijo de nuestro Padre Celestial, Hoi Hoon cree en ser un buen ejemplo y en guardar los mandamientos.
En julio de 2001, el gobierno de Hong Kong le invitó a participar junto a otros gimnastas prominentes en la Exhibición China de Medallistas de Oro en Gimnasia. Tenía 8 años de edad, siendo el participante más joven.
Se pidió a todos los gimnastas que participaran en un ensayo final el domingo previo a la exhibición, pero la familia Tam sabe que es importante guardar el día de reposo, así que el hermano Tam dijo al entrenador de Hoi que su hijo asistiría a cualquier otro ensayo, pero no en domingo. Los entrenadores y los funcionarios se molestaron y pensaron en reemplazar a Hoi por otro muchacho. Los Tam no iban a cambiar de opinión, pero oraron cada noche durante la oración familiar para que Hoi Hoon pudiera participar. Al final, los funcionarios le dejaron tomar parte en la exhibición y aun sin el entrenamiento extra, Hoi Hoon realizó cada movimiento con precisión. “Sé que es muy importante obedecer al Señor”, dice Hoi Hoon.
Su entrenador, Chen Yu Tien, dice que hay varias cosas que le convierten en un buen gimnasta: “Está dispuesto a entrenar fuerte y a perseverar. Tiene brazos fuertes y poderosos y rebosa de entusiasmo”. Pero dice que más que nada, lo que hace que Hoi Hoon tenga tanto éxito en la gimnasia y en todo lo que hace es el amor y el apoyo de su familia.
Hoi Hoon está de acuerdo. “Sé que papá y mamá me aman muchísimo y que oran por mí”, dice. Con este conocimiento es casi imposible no hacer honor a su nombre en la familia, en el deporte y en la vida.
Emily Chien es miembro del Barrio Taipei 2, Estaca Taipei Centro, Taiwán. Tiffany E. Lewis es miembro del Barrio Miami Shores, Estaca Fort Lauderdale, Florida.