2008
Mary N. Cook
Mayo de 2008


Mary N. Cook

Primera Consejera de la Presidencia General de las Mujeres Jóvenes

Mary N. Cook

Al repetir el lema de las Mujeres Jóvenes con jovencitas alrededor del mundo, Mary Nielsen Cook, primera consejera de la Presidencia General de las Mujeres Jóvenes, se siente agradecida de saber que ella es una hija de Dios.

“Mi padre falleció en noviembre de 2007, y sé que el Señor ha estado dispuesto a sostenerme en este tiempo difícil”, dice la hermana Cook. “Les enseñamos a las jovencitas que todas somos hijas de Dios; esa experiencia sagrada me volvió a confirmar que Él me conoce y que me ama personalmente”.

La hermana Cook, que es hija de Kenneth Nielsen y Fern Swan Nielsen, nació el 8 de junio de 1951 y se crió en Midvale, Utah, E.U.A. Ella comparte sus experiencias como ejemplo para las jovencitas que enfrentan momentos de incertidumbre en la vida.

“No me casé hasta los 37 años, y sé de las muchas dudas y temores a los que las mujeres se enfrentan”, dice la hermana Cook. “Deben tener la fe y el valor de seguir adelante, a pesar de la incertidumbre”.

Se casó con Richard E. Cook el 16 de julio de 1988, en el Templo de Salt Lake y es madrastra de 4 hijos y abuelastra de 17 nietos.

“El tener una educación ha sido de gran ayuda en mi vida”, dice la hermana Cook, que recibió una licenciatura y una maestría en Fonoaudiología y también una licenciatura de Especialista en Educación de la Universidad Brigham Young. “Me ha preparado mejor para servir como madre y en la Iglesia”.

La hermana Cook prestó servicio como misionera de tiempo completo en Mongolia junto con su esposo, a quien ella llama su mejor amigo. Previamente había servido como segunda consejera de la Presidencia General de las Mujeres Jóvenes y en la mesa general de las Mujeres Jóvenes.

La hermana Cook piensa que es importante centrarse en la persona en particular. “Queremos enseñar a cada jovencita a ser testigo de Cristo”, dice la hermana Cook. “Esas no son sólo palabras; tenemos que ayudarle a obtener la voluntad y la confianza para ser una hija recta de Dios”.