Tu centro de historia familiar: el aliado que necesitas

¿Quieres trabajar en historia familiar pero no sabes por dónde empezar? ¿Te gustaría tener acceso a más recursos en la búsqueda de tus antepasados? Una visita a los centros de historia familiar de la Iglesia podría ser la respuesta.

Casi cada estaca en México tiene un centro de historia familiar, con consultores para ayudar a los usuarios con su investigación genealógica. “Todos los que deseen aprender más sobre sus antepasados son bienvenidos a unirse a nosotros en el centro de historia familiar”, comenta Linda Thomas, quien, junto con su esposo Tom, trabaja como directora del centro de historia familiar adyacente al Templo de la Ciudad de México.

Este centro tiene trece computadoras, lo que lo convierte en el centro de historia familiar más grande de México; pero todos los centros de historia familiar tienen computadoras disponibles para que los visitantes las usen. En las computadoras, los usuarios pueden acceder a FamilySearch.com, Ancestry.com y MyHeritage.com, los tres sitios web genealógicos más grandes del mundo.

Además de las computadoras, el centro también tiene impresoras donde las personas pueden imprimir tarjetas para las ordenanzas en el templo. “Muchas personas no tienen impresoras en sus hogares”, menciona la hermana Thomas, “por lo que este es un servicio muy importante que ofrece el centro”.

Muchos de los primeros registros en México fueron creados por la Iglesia Católica, que mantuvo registros muy completos y detallados. En 2007, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días lanzó un proyecto para indexar registros en México y otros países de América Latina. Esto hizo que esos registros fueran fácilmente accesibles en línea.

Los hermanos Thomas cuentan la anécdota de un joven que llegó al centro de historia familiar únicamente con el nombre de su bisabuelo y de dónde era originario. En pocos minutos, pudo localizar un registro de bautizo para este antepasado, que también daba información sobre sus padres y abuelos. Con ese único registro, ¡pudo obtener información de tres generaciones de su familia!