Unidad 2: Día 2
1 Nefi 2
Introducción
Las personas reaccionan de maneras diversas a las revelaciones de Dios. El Señor mandó a Lehi en un sueño que llevara a su familia al desierto. Lamán y Lemuel murmuraron contra los mandamientos de Dios, mientras que Nefi buscó un testimonio de confirmación. El comparar sus distintas reacciones, te servirá para decidir cómo utilizar tu albedrío para responder a las indicaciones del Señor.
1 Nefi 2:1–7
Dios manda a Lehi a salir al desierto
Imagínate que eres Lehi, y que el Señor te manda que, junto con tu familia, abandones tu casa y todas tus posesiones. Tendrán que caminar muchos días y sólo pueden llevar provisiones para cubrir las necesidades de tu familia. Piensa en cuál sería tu reacción a tal petición.
Lee 1 Nefi 2:1–6, y reconoce las circunstancias que llevaron a Lehi y a su familia a partir para el desierto.
¿Por qué “trata[ron] de quitar[le] la vida” a Lehi? (Véase 1 Nefi 2:1.)
¿Qué mandó el Señor que hiciera Lehi? (Véase 1 Nefi 2:2.)
Lehi es un ejemplo del principio del Evangelio, según el cual, cuando somos fieles y obedientes, el Señor nos ayuda en nuestros momentos de pruebas.
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En tu diario de estudio de las Escrituras, responde la siguiente pregunta sobre 1 Nefi 2:4: ¿Qué enseñanza te deja cuando lees sobre lo que Lehi escogió llevar consigo y lo que dejó atrás?
Para que puedas comprender mejor la geografía de la zona por la que viajó Lehi, consulta el mapa al final de la lección.
Lee 1 Nefi 2:7, y observa lo que hizo Lehi después de partir con su familia para el desierto. ¿Cuál palabra podrías utilizar para describir un importante rasgo de carácter que tenía Lehi?
1 Nefi 2:8–14
Lamán y Lemuel murmuran contra su Padre
Los cuatro hijos varones de Lehi hicieron el mismo recorrido, pero tenían diferentes actitudes hacia los mandamientos de Dios.
Estudia 1 Nefi 2:8–10, y encierra en un círculo las palabras río y valle.
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En tu diario de estudio de las Escrituras, escribe tus reflexiones acerca de la siguiente pregunta: ¿Qué crees tú que Lehi quería enseñarles a Lamán y Lemuel al compararlos con un río y un valle?
Lee 1 Nefi 2:11–14, y encuentra los motivos por los que Lamán y Lemuel murmuraron en contra de su padre. (Nota: La expresión dureza de cerviz significa terquedad y orgullo.)
Uno de los motivos por los que Satanás induce a las personas a murmurar es para evitar que sigan a los profetas vivientes, a los líderes inspirados y a los padres. El élder H. Ross Workman, de los Setenta, habló acerca de la murmuración. Él dijo que: “La murmuración consiste en tres etapas, cada una derivando en la siguiente, en un camino descendiente a la desobediencia”.
Primero, cuando las personas murmuran, hacen sus propios juicios y comienzan a cuestionar las enseñanzas de los profetas vivientes. “Primero se [cuestionan] en su propia mente y después [plantan] ese cuestionamiento en la mente de los demás”.
Segundo, quienes murmuran comienzan a “racionalizar y a justificarse para no hacer lo que se les había mandado hacer… De ese modo, justifican su desobediencia”.
“El tercer paso [sigue] inevitablemente: pereza en seguir el mandamiento del Maestro [véase D. y C. 58:29]…
“Les invito a centrarse en los mandamientos de los profetas vivientes que les incomoden más. ¿Cuestionan si el mandamiento se aplica a ustedes o no? ¿Encuentran ‘excusas’ convenientes de por qué no pueden cumplir con ese mandamiento ahora? ¿Se sienten frustrados o irritados con los que les recuerdan esos mandamientos? ¿Son perezosos en cumplirlos? Cuídense de los engaños del adversario. Cuídense de la murmuración” (“Cuídense de murmurar”, Liahona, enero de 2002, págs. 98–100).
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Responde la siguiente pregunta en tu diario de estudio de las Escrituras: ¿Qué puedes hacer si te descubres murmurando (quejándote) acerca de un mandamiento o una norma de la Iglesia?
1 Nefi 2:16–19
Nefi busca conocimiento del Señor
Lee 1 Nefi 2:16, 19, y marca lo que deseaba Nefi y lo que él hizo que le llevó a aceptar los mandamientos del Señor dados por medio de su padre. Aunque Nefi no murmuró, considera que lo que él escribió en 1 Nefi 2:16 en cuanto a que el Señor enterneció su corazón, indica que el partir de Jerusalén pudo haber resultado difícil para él también.
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En tu diario de estudio de las Escrituras, comparte un ejemplo de alguna ocasión en que, al igual que Nefi, oraste al Padre Celestial y Él enterneció tu corazón mediante Su Espíritu, o de alguna vez en que recibiste un testimonio de algo que el Señor dijo.
La experiencia de Nefi nos enseña el siguiente principio del Evangelio: Cuando clamamos a Dios, Él puede enternecer nuestro corazón para creer en Sus palabras.
Lee 1 Nefi 2:17–18, y encuentra los deseos y las acciones de Nefi después de que el Señor suavizara su corazón. Piensa en lo que puedes aprender de las distintas reacciones de Nefi, Sam, Lamán y Lemuel. Lo que sigue es una verdad importante: Cuando compartimos lo que hemos aprendido por el Santo Espíritu, otras personas pueden creer en nuestras palabras.
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Escribe en tu diario de estudio de las Escrituras sobre alguna ocasión en que las palabras de alguien te llevaron a creer en la palabra de Dios, al igual que Sam le creyó a Nefi.
Piensa en alguien con quien podrías compartir algo que el Espíritu te ha ayudado a aprender y a sentir que es verdad. Puede ser un amigo, un familiar, un líder de la Iglesia o un maestro. Tómate tiempo esta semana para hablar con esa persona y comparte ese testimonio.
1 Nefi 2:20–24
El Señor le asegura a Nefi que él prosperará de acuerdo con su obediencia
Identifica y marca la promesa que se halla en 1 Nefi 2:20–21. Esta promesa se repite 34 veces en el Libro de Mormón. Durante tu estudio del Libro de Mormón verás cómo se cumplieron plenamente las palabras del Salvador a Nefi. Finaliza la lección de hoy leyendo 1 Nefi 2:22–24.
Dios bendice a los que son obedientes y fieles. Reflexiona sobre tu nivel de obediencia al guardar los mandamientos de Dios. ¿De qué modo puedes ser más obediente? Sigue las impresiones que recibas del Espíritu.
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Escribe lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras, al final de las asignaciones de hoy:
He estudiado 1 Nefi 2 y he terminado esta lección el (fecha).
Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con mi maestro: