Unidad 22: Día 3
Helamán 5
Introducción
La iniquidad de los nefitas aumentó, al punto que la mayoría de ellos escogió el mal en vez de la rectitud. Inspirados por las palabras de su padre, Nefi y Lehi se dedicaron a predicar del Evangelio. Su padre Helamán les había enseñado acerca de la importancia de edificar su vida sobre el fundamento del Salvador. Tras enseñarles a los nefitas, Lehi y Nefi les predicaron a los lamanitas y fueron echados en prisión. Después de que el Señor libró milagrosamente a Nefi y Lehi de la prisión, la mayoría de los lamanitas se convirtieron al Evangelio.
Helamán 5:1–13
Helamán les enseñó a sus hijos Nefi y Lehi que debían recordar los mandamientos de Dios y el poder de Jesucristo para ayudarlos
Lee las siguientes seis palabras y frases. A fin de ayudarte a completar la actividad que sigue a continuación, trata de recordar cada una de ellas. Se te pedirá que escribas de memoria las siguientes frases en el diario de estudio de las Escrituras: familia, padres, la expiación de Jesucristo, profetas, el arrepentimiento conduce a la salvación, guardar los mandamientos.
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Cierra el manual y, recurriendo sólo a tu memoria, anota esas seis palabras o frases en el diario de estudio de las Escrituras.
Verifica tus respuestas. Piensa por un momento si fue fácil o difícil recordar las frases. ¿Piensas que influyó el hecho de que se te avisara que se te iba a pedir que las escribieras de memoria?
Lee la siguiente cita del presidente Spencer W. Kimball y piensa por qué recordar es una palabra tan importante al tratar de vivir el Evangelio: “Cuando en el diccionario buscan la palabra más importante, ¿saben ustedes cuál es? Puede que sea recordar. Dado que todos ustedes han hecho convenios, bien saben lo que tenemos que hacer y cómo hacerlo; nuestra mayor necesidad es la de recordar” (citado en Deberes y bendiciones del sacerdocio, Parte B, pág. 284).
Hoy estudiarás acerca de dos personas que influyeron en la vida de miles de personas porque recordaban las verdades que habían aprendido de su padre. Durante el curso de la lección de hoy, medita en lo que tú piensas que el Señor desea que recuerdes.
Como se explica en Helamán 5:1–4, Nefi renunció al asiento judicial porque el pueblo se había vuelto muy inicuo. Él y su hermano Lehi deseaban dedicar todo su tiempo a predicar la palabra de Dios. Al comenzar su ministerio, recordaron las enseñanzas de su padre Helamán. Lee los versículos que siguen a continuación y, en los espacios que se proporcionan, haz un resumen de lo que Helamán les pidió a sus hijos que recordaran. Sería bueno que resaltaras cada ocasión en que aparezca el verbo recordar en alguna de sus formas en esos versículos.
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A fin de ayudarte a entender mejor lo que acabas de leer, contesta estas preguntas en el diario de estudio de las Escrituras:
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¿De qué modo el recordar los ejemplos rectos de otras personas nos ayuda a decidir hacer “lo que es bueno”? (Helamán 5:7).
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¿Qué hacen ustedes para recordar la expiación de Jesucristo?
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Vuelve a leer Helamán 5:12 y busca las frases que respalden este principio: Si establecemos nuestro fundamento sobre Jesucristo, Satanás no tendrá poder sobre nosotros. (Helamán 5:12 es un pasaje de dominio de las Escrituras. Podrías marcarlo de una forma distintiva para que lo puedas ubicar fácilmente en el futuro.)
Imagina que te han pedido que diseñes un edificio que nunca fuera a caerse. Piensa en las respuestas a las siguientes preguntas:
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¿Qué tipo de bases o fundamento tendría que tener un edificio de ese tipo?
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¿Por qué un fundamento firme le permite a un edificio soportar el clima, lo desastres naturales u otras fuerzas destructivas?
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¿Qué palabras o frases de Helamán 5:12 dan a entender que, si bien el edificar sobre el fundamento de Jesucristo no evitará los ataques del adversario, sí te dará fortaleza para superarlos?
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Responde las siguientes preguntas en el diario de estudio de las Escrituras:
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¿Qué crees que quiere decir establecer el fundamento de tu vida en la roca de Jesucristo? ¿En qué forma te estás esforzando por hacerlo?
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¿En qué ocasión pudiste resistir tentaciones o pruebas debido a que el fundamento de tu vida era Jesucristo?
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¿Qué puedes hacer para poner más empeño en tu esfuerzo para que el Salvador sea el fundamento de tu vida?
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Helamán 5:14–52
El Señor protege a Nefi y a Lehi en la prisión y disipa las tinieblas de sus captores cuando claman a Él y se arrepienten
Como se encuentra registrado en Helamán 5:14–19, Nefi y Lehi predicaron el Evangelio con gran poder en la tierra de Zarahemla y bautizaron a miles de personas allí. Más adelante, viajaron a la tierra de Nefi, que era la tierra de los lamanitas. La siguiente actividad tiene por objeto ayudarte a entender las experiencias extraordinarias de Nefi y Lehi entre los lamanitas.
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Copia el cuadro que aparece a continuación en una página entera del diario de estudio de las Escrituras; lee los versículos que aparecen en cada casilla y haz un dibujo sencillo o escribe un resumen breve de lo que cada grupo de versículos describe.
Nefi y Lehi entre los lamanitas
En esa experiencia, la nube de obscuridad podría representar el pecado, mientras que el pilar de fuego que envolvía a cada persona podría representar el Espíritu Santo.
Repasa los versículos 28 y 34 y escribe cómo se sentían las personas cuando se hallaban en la nube de obscuridad:
Repasa los versículos 43 y 44 y escribe cómo se sentían las personas cuando se hallaban envueltas por el pilar de fuego:
Repasa los versículos 41 y 42 y escribe qué fue lo que hicieron las personas para disipar la nube de obscuridad o, en otras palabras, para arrepentirse de sus pecados:
Lee Helamán 5:45–47 y medita en qué verdades puedes aprender acerca del arrepentimiento gracias a esta experiencia. Un principio es: Cuando ejercemos la fe en Jesucristo y nos arrepentimos de nuestros pecados, el Espíritu Santo nos llena el corazón de paz y gozo.
En Helamán 5:48–52 aprendemos que aproximadamente trescientos lamanitas participaron de este milagro y se convirtieron completamente al Evangelio. Salieron y ministraron a su pueblo hasta que “la mayor parte de los lamanitas” también se hubo convertido (Helamán 5:50). Esos conversos luego “dejaron sus armas de guerra” (Helamán 5:51) y “entregaron a los nefitas las tierras de sus posesiones” (Helamán 5:52). En la mayoría de los casos del Libro de Mormón, los pueblos recuperaban sus tierras mediante la guerra; sin embargo, en este caso los nefitas las recuperaron gracias a que sus enemigos se arrepintieron y aceptaron el Evangelio.
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Considera si tienes paz y gozo en este momento de tu vida. Piensa en las nubes de obscuridad que quizá haya en tu vida, como pecados de los que no te has arrepentido, contención con integrantes de tu familia o amigos, o simplemente el hecho de no estar haciendo ciertas cosas, como leer las Escrituras y orar regularmente. Anota una o varias de esas cosas en el diario de estudio de las Escrituras. Medita en qué puedes hacer a fin de seguir el ejemplo de los lamanitas, de quienes se habla en Helamán 5, y escribe acerca de lo que puedes hacer para invitar al Salvador a que disipe las nubes de obscuridad que podría haber sobre ti. ¿Por qué el arrepentimiento podría ser parte de la solución que estás buscando? ¿Cómo te ayudará el arrepentimiento a edificar sobre el fundamento de Jesucristo?
Dominio de las Escrituras: Helamán 5:12
Lee Helamán 5:12 y busca palabras que te sugieran imágenes visuales (por ejemplo: roca, fundamento, vientos, granizo, tormenta). Con el objeto de ayudarte a memorizar este versículo, toma un trozo de papel y escribe en él la primera letra de cada palabra del versículo, a excepción de las palabras que te hacen pensar en imágenes. En lugar de una letra, haz un dibujo sencillo que represente la palabra. Practica recitar el versículo usando sólo la hoja en la que hayas escrito. Coloca el papel en algún lugar donde lo veas a menudo para ayudarte a recordar las verdades de ese versículo.
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Escribe lo siguiente en el diario de estudio de las Escrituras, al final de las asignaciones de hoy:
He estudiado Helamán 5 y he terminado esta lección el (fecha).
Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con mi maestro: