Unidad 21: Día 1
Alma 45–49
Introducción
Después de que Alma dio sus instrucciones finales a su hijo Helamán, partió del pueblo de Nefi y nunca más se supo de él. Durante las épocas difíciles que siguieron para los nefitas, Helamán y el capitán Moroni se convirtieron en sus líderes espirituales y militares. El líder lamanita Amalickíah actuó egoístamente para lograr sus deseos inicuos por medio de tácticas que se asemejaban a las del diablo. El capitán Moroni preparó a su pueblo para que fuera fiel a Dios durante aquellos tiempos peligrosos.
Alma 45
Helamán cree las palabras de su padre, Alma, e inicia su ministerio
Trata de recordar una entrevista que hayas tenido con uno de tus padres o un líder del sacerdocio. Piensa en el tipo de preguntas que te hizo. Antes de partir de la tierra, Alma le hizo tres preguntas importantes a Helamán. Lee Alma 45:2–7 para encontrar y marcar esas preguntas. (Las “palabras” a las que Alma se estaba refiriendo en el versículo 2 se encuentran en Alma 37:1.) Piensa en cómo responderías las preguntas de Alma: ¿Crees en las Escrituras? ¿Crees en Jesucristo? ¿Guardarás los mandamientos?
Después de que Alma expresó su testimonio, Alma le habló acerca del futuro de los nefitas: profetizó concerniente a su destrucción y la destrucción de cualquier otro pueblo que degenerara en la iniquidad sobre esa tierra escogida. Lee Alma 45:16 y considera esta verdad que encontramos en ese versículo: El Señor no puede considerar el pecado con el más mínimo grado de tolerancia.
A fin de ayudarte a entender este principio, recuerda que, por medio de la Expiación, el Salvador pagó el precio de todos nuestros pecados, siempre y cuando nos arrepintamos y busquemos Su perdón. Dios no puede tolerar el pecado, independientemente de su gravedad. Sin embargo, dado que el Salvador estuvo dispuesto a sufrir por nosotros, no tenemos que sufrir por nuestros pecados si nos arrepentimos.
Lee Doctrina y Convenios 1:31–33. Sería bueno que anotaras estos versículos como pasajes correlacionados cerca de Alma 45:16.
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Responde la siguiente pregunta en el diario de estudio de las Escrituras: ¿Qué sientes por el Salvador cuando piensas en que estuvo dispuesto a pagar el precio de tus pecados?
Según consta en Alma 45:20–24, Helamán comenzó su ministerio como profeta del Señor y líder de la Iglesia. Él y otros líderes de la Iglesia nombraron sacerdotes y maestros en todas las congregaciones, pero debido a la contención y al orgullo que iba en aumento, el pueblo se negó a escuchar a sus líderes.
Alma 46
El capitán Moroni congrega a los rectos para que defiendan sus derechos y su religión
Según consta en Alma 46:1–7, algunas personas que estaban enojadas con Helamán y sus hermanos decidieron dejar la Iglesia y seguir a un hombre malvado llamado Amalickíah, que deseaba ser rey. Lee Alma 46:8–10 y busca las lecciones que Mormón deseaba que aprendiéramos de esta peligrosa situación.
Para ayudar a defender la libertad del pueblo, Moroni, que era el capitán en jefe de los ejércitos nefitas, rasgó su túnica y usó parte de ella para hacer un “estandarte de la libertad” para reunir al pueblo en defensa de la libertad.
Lee Alma 46:12–13 y marca lo que Moroni escribió en el estandarte de la libertad. Fíjate en cómo se preparó para presentarle el estandarte de la libertad al pueblo. Medita en qué te enseñan estos versículos acerca del carácter de Moroni. Además, lee Alma 48:11–13, 17–18 para comprender mejor el carácter del capitán Moroni. Quizá sea bueno que marques las características de Moroni que desearías cultivar más seriamente en tu propia vida.
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Escribe en el diario de estudio de las Escrituras acerca de una o más de una de las características de Moroni que se mencionan en Alma 46:12–13 y Alma 48:11–13, 17–18. Explica por qué te gustaría tener esas cualidades y qué puedes hacer para desarrollarlas.
Lee Alma 46:18–22 y fíjate cómo responde el pueblo a la invitación de Moroni de luchar por la libertad. El convenio que se describe en el versículo 20 es una promesa especial que ese grupo de nefitas hizo con Dios.
Según Alma 46:20, ¿por qué Moroni deseaba que los nefitas concertaran un convenio con Dios de que defenderían sus derechos y su religión?
Según consta en Alma 46:28–37, los nefitas que se unieron al capitán Moroni capturaron el ejército de Amalickíah. A pesar de eso, Amalickíah y unos pocos más huyeron y se unieron a los lamanitas. Muchos de los seguidores de Amalickíah que fueron capturados hicieron convenio de defender la libertad; quienes no quisieron fueron ejecutados. De la experiencia de los nefitas podemos aprender este principio: Si somos valientes en guardar los mandamientos, tal como el capitán Moroni, Dios nos fortalecerá y bendecirá.
Tras la batalla, el capitán Moroni hizo que se enarbolara el estandarte de la libertad sobre todas las torres nefitas, como una “norma” o recordatorio de aquello por lo que lucharían y lo que protegerían, según el convenio que habían hecho (véase Alma 46:36).
En el folleto Para la Fortaleza de la Juventud, la Primera Presidencia dijo: “Nuestros estimados hombres y mujeres jóvenes, tenemos gran confianza en ustedes. Ustedes son amados hijos e hijas de Dios y Él los tiene presentes; han venido a la tierra en una época de grandes oportunidades y también de grandes desafíos. Las normas de este folleto les ayudarán con las decisiones importantes que están tomando ahora y las que tomarán en el futuro. Les prometemos que, si guardan los convenios que han hecho y estas normas, serán bendecidos con la compañía del Espíritu Santo, su fe y testimonio serán más firmes y disfrutarán de mayor felicidad” (2011, pág. II).
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Según lo que has aprendido del mensaje de la Primera Presidencia, contesta las siguientes preguntas en el diario de estudio de las Escrituras:
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¿Cuáles son las promesas que se te hacen si guardas los convenios del Evangelio que has hecho y cumples las normas que se encuentran en el folleto Para la Fortaleza de la Juventud?
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Échale un vistazo al índice de temas del folleto Para la Fortaleza de la Juventud y elige una de las normas. ¿Cómo te ha bendecido, y cómo puede llegar a bendecirte en el futuro, el cumplir con esa norma?
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Alma 47
Amalickíah se convierte en rey de los lamanitas mediante la traición y el engaño
¿Qué harías si estuvieras en guerra y alguien te mostrara un libro que revelara lo que el enemigo había planeado hacer para destruirte a ti y destruir a tu familia? Alma 47 puede ayudarte a entender un poco más los planes de nuestro enemigo: el diablo.
En Alma 47 se registraron muchos de los engaños que Amalickíah usó para convertirse en rey de los lamanitas y así llevar al ejército lamanita a la guerra contra los nefitas. Su deseo principal era conducir a todos los nefitas al cautiverio, con él como su rey.
Amalickíah y sus seguidores primero fueron a la tierra de Nefi, donde vivían los lamanitas. El rey de los lamanitas deseaba ir a la batalla contra los nefitas, pero muchos de los del pueblo tenían temor. Por esa razón, el rey le pidió a Amalickíah que obligara a los lamanitas que tenían miedo a unirse a la batalla. Amalickíah marchó hacia el refugio de la montaña al que habían huido esas personas; sin embargo, su deseo no era el de ayudar al rey, sino que deseaba convertirse en el líder de los lamanitas temerosos engañando a su líder, Lehonti, para que descendiera del refugio de la montaña. Amalickíah tenía la intención de envenenar a Lehonti una vez que descendiera.
Estudia Alma 47:10–12. ¿Cuántas veces tentó Amalickíah a Lehonti para que abandonara su lugar seguro? Lee también Alma 47:17–19. ¿Cómo mató Amalickíah a Lehonti una vez que hubo bajado de la montaña?
El élder Robert D. Hales, del Quórum de los Doce Apóstoles, enseñó que algunas personas quizá traten de destruir nuestra fe y nuestro testimonio en la actualidad tentándonos a abandonar nuestros lugares de seguridad espiritual para adentrarnos en el territorio del diablo: “En el Libro de Mormón leemos que Lehonti y sus hombres acamparon en un monte. El traidor Amalickíah instó a Lehonti a ‘que bajara’ y se reuniese con él en el valle, pero cuando Lehonti descendió del lugar elevado, fue envenenado ‘poco a poco’ hasta que murió y su ejército quedó bajo el mando de Amalickíah (véase Alma 47). Algunas personas se valen de argumentos y acusaciones para incitarnos a dejar el lugar alto, que es donde está la luz… es el lugar [seguro]; es verdadero y es donde está el conocimiento” (véase “Valor cristiano: El precio del discipulado”, Liahona, noviembre de 2008, pág. 74).
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Responde las siguientes preguntas en el diario de estudio de las Escrituras:
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¿Cuáles son algunas de las maneras en que Satanás procura que “bajemos” del terreno espiritual elevado?
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¿Crees que Satanás intenta engañar a los jóvenes para que bajen sus normas “poco a poco”? ¿Qué ejemplo se te ocurre de cómo él intenta hacer esto?
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¿Qué cosas puedes hacer para permanecer en terreno espiritual elevado? ¿Con respecto a qué norma del Evangelio debes seguir esforzándote para no rebajar esa norma “poco a poco”?
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Al igual que hizo con Amalickíah, Satanás procura destruirnos y engañarnos poco a poco para que rebajemos nuestras normas.
Alma 48–49
El capitán Moroni inspira a los nefitas para que se fortifiquen física y espiritualmente
Mientras Amalickíah intentaba obtener poder por medio “del fraude y del engaño” (Alma 48:7) sobre los lamanitas y los nefitas, Moroni actuaba de modo muy diferente. Lee Alma 48:7–10 y fíjate en qué hizo Moroni cuando se enteró de que Amalickíah en poco tiempo conduciría a los ejércitos lamanitas en contra de los nefitas. Sería bueno que marcaras estas ideas: (1) Preparó a los del pueblo para que fueran fieles a Dios durante los tiempos de dificultad (véase el versículo 7). (2) Ayudó al pueblo a fortificar las áreas donde estaban débiles (véanse los versículos 8–9). (3) Preparó a los del pueblo para que apoyaran y defendieran la “causa de los cristianos” o la Iglesia (véase el versículo 10).
Así como Moroni ayudó a su pueblo a prepararse para las épocas difíciles y resistirlas, los líderes de la Iglesia de nuestra época nos ayudan a prepararnos para los tiempos de dificultades. Considera la posibilidad de anotar la siguiente verdad en tu ejemplar de las Escrituras, cerca de Alma 48:7–10: Estaremos preparados para las dificultades de la vida si seguimos el consejo de los siervos del Señor.
En un principio, los lamanitas planeaban atacar la ciudad de Ammoníah y luego la ciudad de Noé, que solían ser las ciudades nefitas débiles. Lee Alma 49:4–5 para ver cuál fue la reacción de los lamanitas cuando vieron la preparación de los nefitas en la ciudad de Ammoníah. Los lamanitas decidieron no atacar la ciudad debido a que estaba tan bien preparada contra los ataques. Lee Alma 49:12–14 para ver cómo actuaron los lamanitas cuando intentaron atacar la ciudad de Noé.
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Tómate algunos minutos para repasar varios discursos de la conferencia general más reciente (en la revista Liahona). Resume en el diario de estudio de las Escrituras el consejo que dieron uno o más de los oradores. ¿Cómo pueden ayudarte esos consejos a prepararte para las épocas de dificultades que vengan a tu vida? ¿Cómo puedes aplicar ese consejo a tu vida?
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Escribe lo siguiente en el diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:
He estudiado Alma 45–49 y he terminado esta lección el (fecha).
Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con mi maestro: