“Prepararse para su entrevista con el Señor”, Liahona, febrero de 2023.
Envejecer fielmente
Prepararse para su entrevista con el Señor
Las entrevistas del sacerdocio que tenemos hoy pueden ayudar a prepararnos para la entrevista que algún día tendremos con el Señor.
Poco después de haber sido bautizado como converso, se me llamó a ser consejero de la presidencia del cuórum de élderes. En mi primera reunión con nuestro presidente de cuórum, él dijo que durante la semana siguiente estaríamos programando entrevistas.
Cuando pregunté a quiénes entrevistaríamos y cuál sería el propósito de las entrevistas, me dijo: “Nuestras entrevistas incluirán algunas preguntas rutinarias, y hablaremos sobre las necesidades del cuórum y de las familias. Pero me agrada pensar que el propósito de nuestras entrevistas es ayudar a los miembros de nuestro cuórum a estar preparados para la entrevista que algún día tendrán con el Señor”.
Fue una impresión espiritual que todavía recuerdo, a pesar de que la escuché hace veintitrés años.
Lo que cuenta es cómo servimos
En un plazo de seis meses, los límites de nuestra estaca y de nuestro barrio cambiaron. Se me llamó como presidente del cuórum de élderes de nuestro nuevo barrio, a pesar de que tenía programado mudarme del estado en tres meses. Cuando el presidente de estaca me apartó, dijo: “Hermano Neubauer, al Señor no le importa cuánto tiempo sirvamos; a Él le importa cómo servimos”. Así que, en el tiempo que tuve, entrevisté a tantos miembros del cuórum como me fue posible.
Más adelante, a los setenta años, se me llamó a ser presidente del cuórum de élderes otra vez. Ocurrió justo después de que la Primera Presidencia y el Cuórum de los Doce Apóstoles anunciaran que en cada barrio o rama los sumos sacerdotes y los élderes se combinarían en un solo cuórum. Pensé en aquella reflexión que mi primer presidente del cuórum de élderes había compartido conmigo hacía tantos años: “El propósito de nuestras entrevistas es ayudar a los miembros de nuestro cuórum a estar preparados para la entrevista que algún día tendrán con el Señor”.
Entonces, ¿cómo ayuda el líder al miembro del cuórum a prepararse para la entrevista con el Señor? En las entrevistas de ministración y en los análisis de cuórum, he preguntado a sus miembros: “Si supieran que en seis meses van a estar en la presencia del Señor, ¿qué cambiarían en su vida en preparación para ese momento?”. En la mayoría de los casos, he dejado que las personas solo piensen en la respuesta, pero en ocasiones alguien ha compartido ideas personales sobre cómo cree que será ese momento con el Señor.
¿Qué montes se deben mover?
También he compartido con los miembros del cuórum estas declaraciones del presidente Russell M. Nelson: “El Señor utiliza lo improbable para lograr lo imposible”1. “Con fe en Él, podemos mover los montes de nuestra vida”.2 Y luego he hecho otra pregunta: “¿Qué es lo que más les gustaría estar haciendo cuando el Señor venga de nuevo?”. Les he pedido que mediten qué montes de su vida deben mover para que estén haciendo lo que quieran estar haciendo cuando el Señor venga de nuevo; lo que deben hacer a fin de estar listos para hablar con Él cara a cara.
Las Escrituras nos dicen que algún día estaremos en la presencia del Señor para ser juzgados: “Y acontecerá que cuando todos los hombres hayan pasado de esta primera muerte a vida, de modo que hayan llegado a ser inmortales, deben comparecer ante el tribunal del Santo de Israel; y entonces viene el juicio, y luego deben ser juzgados según el santo juicio de Dios” (2 Nefi 9:15).
Ruego que al pensar con anticipación en lo que queremos decir y ser en ese gran día, cada uno de nosotros sea capaz de mover cualquier monte que haya que mover a fin de que estemos preparados para nuestra entrevista con el Señor.
El autor vive en Utah, EE. UU.