1. Te damos, Señor, nuestras gracias
que mandas de nuevo venir
profetas con tu Evangelio,
guiándonos cómo vivir.
Y gracias por todos los dones
vertidos por tu gran amor.
Tenemos placer en servirte
a ti, nuestro gran Bienhechor.
2. Al sobrevenirnos peligros
que amenazan quitarnos la paz,
tenemos en Dios gran confianza;
vencido será Satanás.
De Dios no dudamos en nada;
probamos ya bien Su bondad.
Los que a Sión se opongan,
al fin sentirán su maldad.
3. De Dios cantaremos la gracia,
bondad, compasión y amor.
Gozamos de Su Evangelio,
alegres de ver su fulgor.
Así, a la dicha eterna,
los justos y fieles irán,
mas los que el mensaje rechacen,
tal gozo con Él no tendrán.
Letra: William Fowler, 1830–1865.
Música: Caroline Sheridan Norton, 1808–apr. 1877.