Preguntas y respuestas
“Soy el menor de mis hermanos y hermanas, con muchos años de diferencia. Siempre me he sentido excluido de las actividades y conversaciones de mis hermanos. ¿Qué puedo hacer para mejorar nuestra relación?”
Este desafío puede convertirse en una oportunidad para que les digas a tus hermanos y hermanas que te gustaría formar parte más activa de su vida. Quizá no sepan que te sientes excluido. También podrías hablar con tus padres al respecto; seguramente tendrán algunas buenas ideas.
Sugiere a tus hermanos algunas actividades que podrías realizar con ellos, y piensa en temas de los que puedan hablar. Ten en cuenta sus horarios e intereses a la hora de hacer planes para pasar tiempo con ellos. El escucharles y mostrar interés en las actividades que llevan a cabo no sólo mejorará tu relación con ellos, sino que te servirá para aprender. Ellos están pasando por cosas que quizá tú tengas que afrontar dentro de unos años.
Recuerda cuán importante es la familia en el plan de nuestro Padre Celestial. Si oras para pedir Su ayuda, Él te inspirará con ideas para mejorar la relación que llevas con tus hermanos y hermanas. Ten la valentía para actuar de acuerdo con las impresiones que recibas.
Habla con ellos
En mi familia yo también soy la menor, con muchos años de diferencia, pero me he dado cuenta de que mis hermanos y hermanas desean llegar a conocerme al igual que yo deseo llegar a conocerlos a ellos. Tus hermanos y hermanas probablemente estarían encantados si les llamaras por teléfono para conversar o los invitaras a salir a comer juntos. Cuéntales lo que está sucediendo en tu vida; significará mucho para ellos el ver que te sientes a gusto al compartir tus pensamientos y sentimientos con ellos. Háblales también de cuestiones espirituales; eso no sólo te ayudará a acercarte más a ellos, sino también a tu Padre Celestial.
Kelsey H., 16 años, Alberta, Canadá
Sé un buen ejemplo
Yo también he experimentado esta difícil situación. Creo que lo mejor que podemos hacer es ser un ejemplo para nuestros hermanos y hermanas mayores. De este modo, el amor y la paz morarán entre nosotros. Debemos decirles cuánto los amamos, e intentar estar unidos como familia. Tarde o temprano se darán cuenta de cuánto los queremos. Sé que estas cosas darán resultado, paso a paso.
Ádám B., 16 años, Gyor-Moson-Sopron, Hungría
Pasen tiempo juntos
A veces resulta difícil pasar tiempo con hermanos y hermanas mayores debido a la escuela y a otras actividades cotidianas. No obstante, cuando puedas hacerlo, simplemente ve y habla con ellos; cuéntales las cosas que has hecho durante el día y averigua cómo están. Si estás teniendo algún tipo de problema, puedes pedirles su opinión para que sepan que valoras sus ideas. Trátalos de la manera en que desearías que ellos te trataran; puedes jugar con ellos y pasar tiempo juntos, lo cual ayuda mucho. También debes decirles lo mucho que los amas. Por encima de todo, ora; nuestro Padre Celestial te ayudará siempre.
Katherine M., 14 años, Idaho, EE. UU.
Trátalos con amabilidad
Por ser el menor de la familia, a veces me siento excluido de las actividades y conversaciones de mis hermanos y hermanas, y me duele. No obstante, cuando pienso en Jesucristo, me doy cuenta de que al compartir valores comunes con mi familia podemos fortalecernos y ayudarnos los unos a los otros. Trata a todos con amabilidad y dignidad; muestra tu interés por ellos, y hazles saber que te preocupas por ellos.
Joseph M., 16 años, Leyte, Filipinas
Disfruten de cada momento juntos
A veces me siento olvidado, ya que mis hermanas tienen sus propias actividades, al igual que mis padres. A medida que ha pasado el tiempo, he llegado a comprender que todos me quieren, y que no se trata de que no deseen pasar tiempo conmigo, sino de que hay un tiempo para cada cosa. Es importante disfrutar de cada momento que estés con ellos, reír, ser amable y cariñoso y, por encima de todo, mostrarles tu amor. Es importante que ores y que le pidas a nuestro Padre que te ayude a estar más unido con tus hermanos y hermanas. Él te escuchará y ayudará.
Roberto S., 18 años, Santiago, Chile
Dedica tiempo a conversar con ellos
Soy la menor de siete hijos. Cuando era más pequeña, me sentía excluida, pero también me di cuenta de que en verdad me aman, incluso más de lo que yo pensaba. Quizá no logres identificarte con ellos ahora mismo, pero los mejores momentos que yo he pasado con mis hermanos y hermanas fueron cuando conversamos juntos. Me di cuenta de que confiaban mucho en mí, y siguen haciéndolo. Para hablar con ellos, procuraba ayudarles en sus responsabilidades, ser amable con ellos, evitar enfadarme con ellos, y trabajar en equipo con ellos para que me ayudaran. Todo eso me ayudó a sentirme integrada y amada.
María H., 19 años, Ciudad de México, México