2019
Jóvenes
Marzo de 2019


Jóvenes

Lucas

¡Me encanta la historia familiar! No siempre aprecié la obra de historia familiar. Eso cambió cuando me bauticé por uno de mis antepasados en el Templo de Santiago, Chile.

Yo era diácono la primera vez que fui al templo. Cuando estaba por entrar en la pila bautismal, sentí la presencia de alguien que entraba en la habitación. Levanté la vista y vi a un anciano vestido con ropa antigua. Sentí su amor y gratitud por mí porque estaba haciendo la obra vicaria por él. Después de que me bauticé por él y salí del agua, busqué a mi alrededor, pero él ya no estaba.

Solía pensar que el templo proporcionaba los nombres para la obra del templo, por lo que no estaba interesado en hacer investigación de historia familiar; pero esa experiencia me entusiasmó para buscar mis propios nombres de familiares.

Un día me senté en mi computadora y vi que había recibido un correo electrónico de la Iglesia con el nombre de un familiar. Sentí que debía buscar más nombres, así que le pregunté a mi madre cómo podía buscar nombres de manera eficaz y recopilar más información acerca de mis antepasados.

Hasta ahora, he encontrado 11 nombres de familiares, y sé que puedo encontrar todavía más. Esas personas nunca tuvieron la oportunidad de bautizarse mientras estaban en la tierra, y han esperado mucho tiempo para que se realice la obra en el templo por ellos. Me alegra poder ayudarles por medio de la obra del templo y de historia familiar.

Lucas,16, Santiago, Chile