“Lección 15 — Material de preparación para la clase: Prepararnos para la venida de Jesucristo”, Enseñanzas y doctrina del Libro de Mormón: Material para el maestro, 2021
“Lección 15 — Material de preparación para la clase”, Enseñanzas y doctrina del Libro de Mormón: Material para el maestro
Lección 15 — Material de preparación para la clase
Prepararnos para la venida de Jesucristo
Esta unidad se centrará en la aparición de Jesucristo y Su ministración al “pueblo de Nefi” (3 Nefi 11:1). Este grupo abarcaba tanto a los nefitas rectos como a los lamanitas que se habían convertido al Señor (véase 3 Nefi 10:18–19). Al reflexionar en las experiencias de ellos con el Salvador, procura aumentar tu propio testimonio de Su carácter, Sus atributos y Su misión divina.
Un aspecto muy esperado de la misión divina del Señor es Su segunda venida. El presidente Ezra Taft Benson enseñó que “en el Libro de Mormón encontramos un modelo para prepararnos para la Segunda Venida” (véase Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Ezra Taft Benson, 2014, pág. 152). En esta lección, tendrás la oportunidad de considerar de qué manera el hecho de estudiar las profecías y los acontecimientos que precedieron a la aparición del Salvador entre este pueblo te puede ayudar a prepararte para Su segunda venida.
Sección 1
¿Cuán preparado estoy para la segunda venida de Jesucristo?
Por el espacio de muchas generaciones, los profetas del Libro de Mormón predijeron la venida de Jesucristo a la tierra. Seis años antes de que Cristo naciera cerca de Jerusalén, el Señor envió a Samuel el Lamanita para que preparara a los nefitas inicuos para la venida de Cristo. Samuel profetizó acerca de varias señales y prodigios que acompañarían al nacimiento y a la muerte de Jesucristo (véase Helamán 13–15).
El élder Robert D. Hales, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó que los profetas nos pueden ayudar a prepararnos para la venida del Señor:
Antes de esa sagrada noche en Belén, los sucesos de la historia y las palabras de los profetas de todas las dispensaciones prepararon el camino para la primera venida del Señor y Su expiación […]. ¿Tenemos ojos para ver que los sucesos y las profecías de nuestra época están preparándonos para la segunda venida del Salvador? (véase “Preparativos para la Restauración y la Segunda Venida: ‘Te cubriré con mi mano’”, Liahona, noviembre de 2005, págs. 91–92).
Sección 2
¿Qué puedo hacer para mantenerme fiel cuando oigo mensajes que ponen en duda la divinidad de Jesucristo y la realidad de Su segunda venida?
Algunos nefitas creyeron las palabras de Samuel; otros rechazaron su mensaje y trataron de matarlo con piedras y flechas. Como no pudieron herirlo, muchos más creyeron su mensaje y fueron a Nefi para ser bautizados. Más tarde, cuando las señales y los prodigios relacionados con el nacimiento de Cristo empezaron a cumplirse, los creyentes experimentaron gozo y los incrédulos endurecieron su corazón (véase Helamán 16:1–15).
La presidenta Bonnie L. Oscarson, quien fue Presidenta General de las Mujeres Jóvenes, dijo esto en cuanto a cómo abordar las voces de la duda:
Solo tenemos que seguir deleitándonos [en el fruto del árbol de la vida] y no hacer caso a aquellos que se ríen de nuestras creencias o a aquellos que se deleitan en crear dudas o a aquellos que encuentran fallas en los líderes y en la doctrina de la Iglesia. Es una decisión que tomamos a diario: elegir la fe por encima de la duda (véase “¿Creo?”, Liahona, mayo de 2016, pág. 89).
El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó lo siguiente acerca de permanecer firmes en nuestra fe en Cristo:
Permanecer firmes e inmutables en la fe de Cristo requiere que el evangelio de Jesucristo penetre el corazón y el alma, lo que significa que el Evangelio se convierta no solo en una de las muchas influencias en la vida de una persona, sino en la orientación determinante de su vida y su carácter […].
Siempre recuerden la promesa de las cosas buenas que vendrán, tanto ahora como en el más allá, para aquellos que son firmes e inmutables en la fe de Cristo (“Firmes e inmutables en la fe de Cristo”, Liahona, noviembre de 2018, págs. 31, 33).