“Acudir a Dios en busca de propósito y dirección”, Liahona, septiembre de 2023.
Para los padres
Acudir a Dios en busca de propósito y guía
Estimados padres:
Nuestro Padre Celestial no nos envió a la tierra sin una guía. Por medio de los dones divinos de las Escrituras, la oración, los profetas vivientes, las personas a nuestro alrededor y otros más, podemos acudir a Dios en busca de propósito y dirección. A medida que lean este ejemplar de la revista Liahona, mediten en fuentes de ayuda que Él nos ha dado para ayudarnos a que esta vida sea significativa y a regresar a Él en la vida venidera.
Conversaciones sobre el Evangelio
Nuestra función unificada en el plan de Dios
Como familia, podrían leer 1 Corintios 11:11 y analizar lo que significa. Compartan algunas declaraciones del artículo del élder Gerrit W. Gong (página 4), que explican la función combinada que los hombres y las mujeres tienen en el Plan de Salvación. ¿De qué modo pueden unirnos nuestras diferencias en lugar de dividirnos?
El poder sanador de la fe
Lean juntos Mateo 15:21–28 , que habla acerca de la mujer cananea. ¿Por qué creen que su fe condujo a la sanación de su hija? Lean pasajes del artículo de la presidenta Camille N. Johnson, en la página 8, para entender mejor la función de la mansedumbre y la fe a fin de acceder al poder del Señor.
Recordatorios diarios de Jesucristo
Pregunten a la familia: ¿De qué manera recuerdan al Salvador en su vida? Lean las partes clave del artículo de la página 38 sobre la importancia de recordar. Si lo desean, coloquen a la vista en la casa alguna lámina o cita que les recuerde a Cristo.
Diversión en familia con Ven, sígueme
Recordar las bendiciones de Cristo cada día
Pablo les enseñó a los Santos de Corinto “[q]ue Cristo murió por nuestros pecados […] y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día” (1 Corintios 15:3–4). Los animó a “reten[er]” en la memoria (1 Corintios 15:2) el Evangelio que les había predicado. Inviten a la familia a participar de este juego de memorización:
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Conceda tiempo a todos para escribir una respuesta breve a la siguiente pregunta: ¿Qué bendición del Evangelio disfrutas gracias a la expiación del Salvador? (Para obtener algunas ideas, véase 1 Corintios 15:19–29).
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Túrnense para compartir lo que hayan escrito y repitan de memoria lo que escribió la persona anterior.
Análisis: ¿Cómo podemos recordar mejor las bendiciones que Cristo nos ha dado? Consideren trazar un plan familiar para pensar en una manera en que Cristo haya bendecido su vida cada día.