Albedrío y responsabilidad

Reseña

Anote sus impresiones

¿Qué es el albedrío?

El albedrío es la capacidad y el privilegio que Dios nos da de escoger y actuar por nosotros mismos. El albedrío es esencial en el Plan de Salvación; sin él no podríamos aprender, ni progresar, ni seguir al Salvador. Con él somos “libres para escoger la libertad y la vida eterna, por medio del gran Mediador de todos los hombres, o escoger la cautividad y la muerte, según la cautividad y el poder del diablo” (2 Nefi 2:27).

En la vida preterrenal poseíamos el albedrío moral. Uno de los propósitos de la vida terrenal es mostrar la clase de decisiones que tomaremos (véase 2 Nefi 2:15–16). Si se nos forzara a escoger lo correcto, no podríamos demostrar qué habríamos escogido por nosotros mismos. Además, hacemos las cosas con más gusto cuando tomamos nuestras propias decisiones.

El albedrío fue una de las principales cuestiones que surgieron en el concilio en los cielos y fue una de las causas principales del conflicto entre los espíritus que apoyaban a Cristo y los que seguían a Satanás.

El Señor ha dicho que todos somos responsables de nuestros motivos, actitudes, deseos y hechos. Aunque somos libres de elegir nuestro curso de acción, no somos libres de escoger las consecuencias que conllevan nuestras acciones, las cuales, ya sean buenas o malas, serán el resultado natural de cualquier decisión que tomemos (véanse Gálatas 6:7; Apocalipsis 22:12).