¿Cómo puede ayudarme el Espíritu a ser un mejor discípulo? Liahona, junio de 2023
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¿Cómo puede ayudarme el Espíritu a ser un mejor discípulo?
En Juan 14–16, Jesucristo le dice repetidas veces a Sus apóstoles que recibirán al Consolador después de que Él se haya ido. A menudo pensamos en el Consolador como el que nos da paz cuando estamos estresados o temerosos. Pero el don del Espíritu Santo hace mucho más por nosotros, incluso nos ayuda a cumplir con nuestro propósito como discípulos de Jesucristo.
¿Cuál es nuestro propósito? Llegar a ser como nuestro Maestro
“Un discípulo es alguien que ha sido bautizado y está dispuesto a tomar sobre sí el nombre del Salvador y seguirle. Un discípulo aspira a llegar a ser como Él, guardando Sus mandamientos en la vida terrenal, tal como un, o una, aprendiz procura llegar a ser como su maestro” (Robert D. Hales, “Llegar a ser un discípulo de nuestro Señor Jesucristo”, Liahona, mayo de 2017, pág. 46).
Después de la muerte del Salvador, Sus discípulos utilizaron el don del Consolador para continuar volviéndose más semejantes a su Maestro. En los siguientes pasajes de las Escrituras, ¿de qué modo les ayuda el Consolador?
¿De qué manera ayuda el Espíritu a los discípulos a predicar el Evangelio? | |
¿De qué modo ayuda el Espíritu a Pedro y a Juan a ser testigos de Cristo? | |
¿De qué manera ayuda el Espíritu a Esteban a obrar milagros? | |
¿De qué modo ayuda el Espíritu a Felipe, Pedro y Juan a amar y sacrificar a sus vecinos? | |
¿De qué manera ayuda el Espíritu a los líderes de la Iglesia a conocer la voluntad de Dios y actuar de acuerdo con ella? |