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Lección 18: Cómo nutrir la relación matrimonial


Lección 18

Cómo nutrir la relación matrimonial

Introducción

“El esposo y la esposa tienen la solemne responsabilidad de amarse y cuidarse el uno al otro” (“La Familia: Una Proclamación para el Mundo”, Liahona, noviembre de 2010, pág. 129). Al incluir a nuestro Padre Celestial y Jesucristo en su relación y al vivir de forma unida los principios del evangelio de Jesucristo, los esposos y las esposas pueden lograr la máxima felicidad, que es el objeto del plan de Dios.

Lectura preparatoria

Sugerencias para la enseñanza

Mateo 19:3–8; Efesios 5:25, 28–31; Doctrina y Convenios 25:5, 13–15; 42:22

Cómo edificar un matrimonio de éxito

Muestre la siguiente declaración del élder Russell M. Nelson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, e invite a un alumno a leerla en voz alta:

Elder Russell M. Nelson

“El matrimonio proporciona mayores posibilidades de obtener felicidad que cualquier otro tipo de relación humana; aún así, algunos matrimonios no desarrollan plenamente el potencial que tienen… permiten que su romance se eche a perder, dejan de valorarse el uno al otro y permiten que otros intereses o que los nubarrones del abandono oscurezcan la visión de lo que su matrimonio podría llegar a ser en realidad. Los matrimonios serían más felices si se nutrieran con mayor esmero” (“Nutrir el matrimonio”, Liahona, mayo de 2006, pág. 36).

  • ¿Qué hábitos o actitudes creen que podrían causar que un matrimonio “se eche a perder”?

Explique que las parejas que permiten que su matrimonio se eche a perder a veces optan por poner fin a su matrimonio a través del divorcio. Diga a los alumnos que durante el ministerio terrenal del Salvador, algunos fariseos alegaban que el divorcio estaba justificado incluso por motivos triviales y trataron de implicar a Jesús en la controversia al pedirle Su opinión sobre el divorcio. Pida a un alumno que lea Mateo 19:3–8, e invite a los alumnos que busquen el contraste que hay entre la actitud del Salvador y la de los fariseos hacia el matrimonio. Si es necesario, explique que una carta de divorcio era un documento legal que un hombre debía entregar a su esposa antes de despedirla.

  • ¿Qué palabras del versículo 3 ilustran la actitud de los fariseos hacia el matrimonio y el divorcio? (Era lícito “repudiar”, o divorciarse, “por cualquier causa”).

  • ¿Qué enseñó Jesús en el versículo 8 que rechazó esa forma de pensar y afirmó la naturaleza solemne del matrimonio? (Desde los tiempos de Adán y Eva, Dios quiso que los matrimonios duraran eternamente. Para reforzar esa doctrina, podría pedir a los alumnos que correlacionen el versículo 8 con Eclesiastés 3:14 y Moisés 4:18).

Comparta las siguientes palabras del élder Dallin H. Oaks, del Cuórum de los Doce Apóstoles:

Elder Dallin H. Oaks

“El tipo de matrimonio que se requiere para la exaltación, de duración eterna y de calidad divina, no considera el divorcio. En los templos del Señor, las parejas se casan por toda la eternidad; pero algunos matrimonios no progresan hacia ese ideal. A causa de ‘la dureza de [nuestros] corazones’ [Mateo 19:8], el Señor actualmente no hace valer las consecuencias de la norma celestial. Permite que las personas divorciadas se vuelvan a casar sin la mancha de inmoralidad especificada en la ley superior” (“El divorcio”, Liahona, mayo de 2007, pág. 70).

Para ayudar a los alumnos a comprender lo que los esposos y las esposas pueden hacer para lograr el tipo de matrimonio necesario para la exaltación, pida a los alumnos que lean la primera oración del párrafo seis de la proclamación sobre la familia.

  • ¿Qué obligación tienen el esposo y la esposa el uno para con el otro? (A medida que los alumnos responden, escriba en la pizarra esta frase de la proclamación sobre la familia: “El esposo y la esposa tienen la solemne responsabilidad de amarse y cuidarse el uno al otro”).

  • ¿Qué significa para ustedes que las parejas casadas tienen la “solemne responsabilidad de amarse y cuidarse el uno al otro”?

Para ayudar a los alumnos a comprender mejor esa responsabilidad, invite a la mitad de la clase a leer Doctrina y Convenios 25:5, 13–15 y a la otra mitad a leer Doctrina y Convenios 42:22 y Efesios 5:25, 28–31. Pida a los alumnos que busquen principios que enseñan cómo nutrir un matrimonio y luego escriba en la pizarra lo que encuentren. Después de concederles tiempo suficiente, pídales que seleccionen uno de los elementos escritos en la pizarra y que expliquen lo que significa para ellos.

Comparta la siguiente declaración del élder L. Whitney Clayton, de la Presidencia de los Setenta, y pida a la clase que preste atención a las ideas específicas acerca de las palabras allegarse y dejar:

Elder L. Whitney Clayton

“Los matrimonios más felices que he visto irradian la obediencia a uno de los mandamientos más felices: ‘Viviréis juntos en amor’ [D. y C. 42:45]. Dirigiéndose a los esposos, el Señor mandó: ‘Amarás a tu esposa con todo tu corazón, y te allegarás a ella y a ninguna otra’ [D. y C. 42:22]. Un manual de la Iglesia enseña: ‘La palabra allegarse significa ser completamente dedicado y fiel a alguien. Las parejas casadas se allegan a Dios y entre sí al servirse y amarse mutuamente, y al guardar convenios con absoluta fidelidad el uno para con el otro y para con Dios…’ Tanto el esposo como la esposa ‘dejan atrás su vida de solteros y establecen su matrimonio como [su] prioridad principal… No permiten que ninguna otra persona ni ningún interés tenga mayor prioridad… que el guardar los convenios que han hecho con Dios y entre sí’ [Manual 2: Administración de la Iglesia, 2010, 1.3.1]. Observen y aprendan: las parejas exitosas se aman el uno al otro con completa devoción” (“El matrimonio: Observen y aprendan”, Liahona, mayo de 2013, págs. 84–85).

  • ¿Cuáles son algunas de las cosas que los esposos o las esposas deben “dejar atrás” para poder “allegarse” el uno al otro?

  • Las parejas casadas que ustedes conocen, ¿cómo muestran amor y cuidado el uno por el otro?

  • ¿Qué están haciendo ahora que les ayudará a prepararse para amar y cuidar desinteresadamente a su futuro cónyuge?

Abraham 5:15–18

Llegar a ser uno en el matrimonio

Invite a un alumno a leer Abraham 5:15–18 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio y que presten atención a lo que enseñan esos versículos acerca de la relación entre los esposos.

  • Según esos versículos, ¿para lograr qué objetivo deben trabajar el esposo y la esposa? (Para llegar a ser “una sola carne”).

Trace el siguiente diagrama en la pizarra:

marriage triangle

Entregue a cada alumno una copia de la siguiente declaración del élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, y pida a un alumno que lea el primer párrafo en voz alta mientras la clase intenta descubrir lo que representa el diagrama:

Elder David A. Bednar

“El Señor Jesucristo es el punto principal en la relación del convenio del matrimonio. Tomen nota de cómo el Salvador está ubicado en la cúspide de este triángulo, y en la base figura una mujer en una esquina y un hombre en la otra. Consideren, ahora, lo que ocurre en la relación entre el hombre y la mujer a medida que cada uno, gradualmente, ‘[viene] a Cristo’ y se esfuerza por ser perfeccionado en Él (Moroni 10:32). A causa del Redentor, y por medio de Él, el hombre y la mujer se acercan más el uno al otro.

“A medida que el marido y su esposa son atraídos hacia el Señor (véase 3 Nefi 27:14), a medida que aprenden a servirse y a atesorarse mutuamente, a medida que comparten las experiencias de la vida, progresan juntos y llegan a ser uno, y a medida que son bendecidos mediante la unión de sus naturalezas características, se empiezan a dar cuenta de la plenitud que nuestro Padre Celestial desea para Sus hijos. La máxima felicidad, que es el objeto mismo del plan del Padre, se recibe al efectuar los convenios del matrimonio eterno y al honrarlos” (“El matrimonio es esencial para Su plan eterno”, Liahona, junio de 2006, pág. 54).

  • Según el élder Bednar, ¿qué hace posible que el esposo y la esposa se acerquen más el uno al otro? (A medida que los alumnos responden, haga hincapié en el siguiente principio: Cuando el esposo y la esposa se esfuerzan por venir a Cristo, pueden llegar a ser uno en su matrimonio).

  • ¿En qué forma piensan que venir a Cristo ayuda al esposo y a la esposa a acercarse más?

Pida a un alumno que lea en voz alta el segundo párrafo de la declaración del élder David A. Bednar, y luego pregunte:

  • Según el élder Bednar, ¿qué deben hacer las parejas para recibir la “máxima felicidad” que Dios desea para ellos?

  • ¿Qué tipo de cosas han visto que hacen las parejas para lograr la unidad y el gozo en el matrimonio?

Lea y luego testifique acerca de la veracidad de la siguiente declaración del presidente Ezra Taft Benson (1899–1994):

President Ezra Taft Benson

“El matrimonio en sí se debe considerar como un convenio sagrado ante Dios. Una pareja casada no solamente tiene una obligación mutua, sino que también la tiene con Dios, quien ha prometido grandes bendiciones para aquellos que honran ese convenio” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Ezra Taft Benson, 2014, pág. 200).

  • ¿En qué sentido podrían los cónyuges actuar de manera diferente si consideraran el matrimonio como un convenio sagrado realizado no solamente entre ellos sino también con Dios?

  • ¿Qué pueden hacer ahora para prepararse para el matrimonio en el templo?

Desafíe a los alumnos a escribir en sus diarios personales acerca de lo que están haciendo ahora y lo que podrían hacer en el futuro para prepararse para el matrimonio eterno.

Material de lectura para el alumno