2020
Lini Uilaau — Savai’i, Samoa
Junio de 2020


Retratos de fe

Lini Uilaau

Savai’i, Samoa

Lini

Lini una vez luchó contra sentimientos de ira e impaciencia. No obstante, cuando su esposo y ella se unieron a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Lini sintió que esos sentimientos desaparecían al vivir el Evangelio.

Leslie Nilsson, fotógrafo

Comencé a estudiar el Evangelio y aprendí a través de las enseñanzas de la Iglesia lo mucho que Jesús amaba a los niños. Siempre fue muy amable con ellos.

Empecé a intentar ser más como Jesús. Ahora trato de amar mejor a todos los miembros de mi familia. Dedico más tiempo a estar con ellos y a averiguar sus necesidades. Leemos las Escrituras en familia y oramos juntos todas las noches.

Mi corazón es ahora mucho más tierno. Siento más amor, paz y felicidad en nuestro hogar al seguir las enseñanzas de Jesucristo. Estoy agradecida por la forma en que el Evangelio me ayuda a aprender a ser una mejor esposa, madre y abuela.

Algunos de nuestros hijos mayores pertenecen a diferentes religiones, pero aún tenemos la esperanza de que un día todos se unan a la Iglesia verdadera. Mi esposo y yo nos hemos puesto la meta de ir al templo el año que viene, pero esa es solo nuestro primer objetivo. Deseamos que toda nuestra familia pueda ir al templo y sellarse juntos.

El Evangelio puede cambiar nuestra vida. Además de tener mal genio, también solía experimentar dificultades con algunas partes de la Palabra de Sabiduría, pero ahora eso ya no es un problema para mí. Si el Evangelio me puede ayudar a ser una mejor persona, sé que puede hacer lo mismo por toda mi familia.

Lini and Ioane with their family

Lini y su esposo, Ioane, han disfrutado las bendiciones de una mayor unidad familiar al abrazar el evangelio de Jesucristo.

Lini with her grandchildren

En cada oportunidad, Lini se mantiene cerca de sus nietos. Lini y su esposo tienen la mira puesta en ver a toda su familia sellada en el templo algún día.

family sitting together outside

Más amor y paz en el hogar es solo una de las bendiciones que Lini ha percibido desde que se unió a la Iglesia y vive los principios que ha aprendido.