Lección 12 — Material para el maestro

Encontrar la verdad pura en las enseñanzas de Jesucristo

El presidente Russell M. Nelson dijo: “La doctrina pura de Cristo es poderosa; cambia la vida de todo aquel que la entiende y procura implementarla en su vida” (“Verdad pura, doctrina pura y revelación pura”, Liahona, noviembre de 2021, pág. 6). En esta lección, los alumnos tendrán la oportunidad de compartir cómo han influido en su vida las enseñanzas de Jesucristo. También analizarán el significado del Evangelio y se los invitará a considerar lo que pueden hacer para estar más centrados en vivirlo.

Sugerencias para la enseñanza

Jesucristo enseña verdades que cambian vidas

Podría mostrar la imagen adjunta, u otra que elija en la que Jesucristo aparezca enseñando, e invitar a los alumnos a compartir posibles razones por las que “[Jesucristo] es el mayor maestro que haya vivido, vive o vivirá” (Jeffrey R. Holland, “Enseñando, predicando, sanando”, Liahona, enero de 2003, pág. 13).

Para fomentar un análisis significativo, podría hacer algunas de las preguntas siguientes:

• ¿Qué impacto tuvieron las enseñanzas del Salvador en aquellos que lo escucharon enseñar? (Podría repasar los ejemplos que se encuentran en la sección 1 del material de preparación). ¿Qué impacto han tenido Sus enseñanzas en la vida de ustedes?

• ¿Qué debemos hacer si deseamos que las enseñanzas de Jesucristo tengan una influencia profunda y duradera en nuestra vida? (Si lo desea, podría repasar Juan 3:21; 7:17; 13:17 y la declaración del élder Holland que se encuentra en la sección 1 del material de preparación. Luego podría invitar a los alumnos a reconocer un principio similar al siguiente: Al actuar de acuerdo con las enseñanzas del Señor, podemos conocer su veracidad, aumentar en luz y experimentar felicidad).

Recuerde a los alumnos que en la sección 1 del material de preparación se los invitó a seleccionar una enseñanza del Salvador que haya influido en su vida. También podrían haber buscado una enseñanza que les parezca relevante para su vida. Conceda a los alumnos unos minutos para que repasen el pasaje y las tres preguntas correspondientes de la sección 1 del material de preparación. Anime a los alumnos que aún no hayan hecho la actividad a buscar una enseñanza del Salvador que puedan compartir.

Invite a los alumnos a compartir la enseñanza de Jesucristo que eligieron y su respuesta a, por lo menos, una de las tres preguntas del material de preparación. Podrían realizar esta actividad como clase o dividir a los alumnos en grupos pequeños y pedirles que se turnen para compartir.

Jesucristo enseña a los nefitas el significado de Su evangelio

Lean juntos el ejemplo siguiente:

Amelia ha regresado recientemente a la actividad en la Iglesia después de años de ausencia. Aunque la gente ha sido amable con ella, a menudo se siente perdida y desanimada durante los discursos y las lecciones. Frustrada, un día les dice: “El otro día escuché a alguien decir que el Evangelio significa ‘buenas nuevas’. A mí no me parece que sea así; el Evangelio parece complicado y hay muchas expectativas; parece más una carga que una bendición”.

• ¿Qué puede suceder durante los discursos, las lecciones o los análisis del Evangelio que pueda hacer que alguien se sienta como Amelia?

• ¿Qué posibles malentendidos podría tener Amelia en cuanto al significado y propósito del Evangelio?

Cómo mejorar la enseñanza y el aprendizaje

Aprenda con los alumnos. Después de experimentar las terribles consecuencias de la superchería sacerdotal, los miembros de la Iglesia de la época de Alma que permanecieron fieles fueron “firmes e inamovibles” (Alma 1:25) en sus creencias y reconocieron que “el predicador no era de más estima que el oyente, ni el maestro era mejor que el discípulo; y así todos eran iguales” (Alma 1:26). Al tratar a los alumnos como sus iguales, usted estará más dispuesto a aprender con ellos y de ellos. Medite acerca de cómo podrían sentirse sus alumnos si usted muestra un interés genuino en lo que piensan y sienten.

Invite a los alumnos a repasar 3 Nefi 27:13–14, 19–21 y a buscar los elementos fundamentales del Evangelio tal como los enseñó el Salvador.

Para fomentar un análisis significativo, luego podría hacerles preguntas similares a las siguientes:

• Según el Salvador, ¿cuáles son los elementos fundamentales y la bendición suprema de vivir Su evangelio? (Ayude a los alumnos a reconocer esta verdad: Al ejercer fe en Jesucristo, arrepentirnos, bautizarnos, recibir el Espíritu Santo y perseverar hasta el fin, podemos comparecer sin mancha ante Dios en el último día).

• ¿De qué manera el hecho de colocar a Jesucristo en el centro del Evangelio podría cambiar la forma en que Amelia lo ve y se siente al respecto? ¿Cómo ha influido el hecho de centrarse en el Salvador en lo que piensan del Evangelio y en la manera en que lo viven?

• ¿Qué desafíos podemos afrontar cuando dejamos de centrarnos en Jesucristo y en los elementos fundamentales de Su evangelio? (Si lo desea, podrían repasar la declaración del hermano Daniel K. Judd que se encuentra en la sección 2 del material de preparación). ¿Qué cosas les han hecho perder el enfoque en los principios fundamentales del Evangelio? ¿Qué es lo que más los ha ayudado a mantenerse centrados en los principios fundamentales?

Invite a los alumnos a repasar la declaración del presidente Dieter F. Uchtdorf que se encuentra en la sección 2 del material de preparación y a anotar lo que pueden hacer para centrarse mejor en los principios básicos y en las aplicaciones del Evangelio.

También podría preguntar si algunos alumnos están dispuestos a compartir lo que pueden hacer para centrarse en las cosas más importantes a medida que se esfuerzan por vivir el Evangelio.

Para concluir, usted o un alumno podrían testificar de la belleza y del poder de vivir el evangelio sempiterno de Jesucristo.

Para la próxima clase

Podría mandar el mensaje siguiente a los alumnos durante la semana: Piensa en lo que puedes aprender acerca de la ministración con el material de preparación para la lección 13.