Retratos de fe
Darren y Stacey Rea
Sídney, Australia
Darren y Stacey vendieron todo para que él consiguiera el empleo de sus sueños haciendo animaciones para un estudio cinematográfico en Londres, Inglaterra. Sin embargo, cuando supieron que, después de intentarlo por años, iban a tener un bebé, se dieron cuenta de que no podían vivir allí solo con los ingresos de él.
Christina Smith, fotógrafa.
Stacey: Empezamos a hablar de regresar a Australia. En Brisbane no había ningún estudio cinematográfico. Darren básicamente tendría que abandonar su carrera.
Darren: Estábamos entrando en terreno desconocido; no sabíamos lo que nos deparaba el futuro.
Stacey: Cuando estaba embarazada de cinco meses, me dieron una asignación de último momento para discursar en la reunión sacramental. El tema era tener fe en Jesucristo en nuestras adversidades. Hasta ese momento, todavía no habíamos decidido cuál sería el nombre de nuestra hija. Mientras preparaba el discurso, leí sobre el término “fe” en la Guía para el Estudio de las Escrituras. Veía la palabra fe, fe, fe una y otra vez, y supe sin ninguna duda qué nombre debíamos darle a nuestra hija. Miré a Darren y le dije: “Faith [fe, en español]: ese será su nombre; ese es el nombre que quiero darle a nuestra hija”.
Darren: Los dos nos sentimos muy bien en cuanto al nombre Faith. Parecía englobar cada una de las experiencias que estábamos pasando.
Stacey: Tuvimos que tener mucha fe para abandonar la carrera de Darren, regresar a un lugar donde no teníamos nada y volver a comenzar sin expectativas de empleo.
Darren: Teníamos que seguir adelante con fe y creer que todo saldría bien. Regresamos a nuestro país y conseguí un empleo en una universidad como profesor en un área de estudio afín a la animación. Luego me lastimé la espalda y tuve que renunciar a ese puesto.
Stacey: Nos mudamos a casa de mis padres; no teníamos dinero ni auto.
Darren: Sentí que había tocado fondo. Mi esposa estaba embarazada, pero yo no tenía trabajo y no podíamos pagar un lugar para vivir.
Stacey: Hubo un momento, en la lavandería de la casa de mis padres, en el que nos arrodillamos y oramos.
Darren: No solo oramos, sino que suplicamos ayuda para superar esto y poder volver a valernos por nosotros mismos.
Stacey: Probablemente fue la oración más ferviente que hemos hecho juntos. Al día siguiente, mi abuela llamó y nos dijo que iba a comprar un auto nuevo y que quería darnos el que tenía.
Darren: Eso nos dejó boquiabiertos.
Stacey: Sentimos que era una respuesta directa a nuestra oración.
Darren: Entonces nos enteramos de que un nuevo estudio abriría sus puertas en Brisbane. Conseguí algunos contratos de trabajo en animación.
Stacey: ¡No creíamos que él haría animaciones en Brisbane!
Darren: Luego mi hermano nos visitó inesperadamente y nos trajo algunos juguetes de bebé.
Stacey: Nuestros amigos y familiares nos regalaron muchas cosas para nuestra hija.
Luego nació Faith y —ni siquiera sé cómo describirlo— ella es lo mejor que nos ha pasado. Ahora tiene más de dos años, y nos hemos mudado a Sídney. Darren todavía hace animaciones para películas, lo cual no creíamos que sucedería. Definitivamente nos sentimos bendecidos. Nuestra fe nos ha traído hasta aquí.
Darren: Sin duda podemos ver la mano de Dios en nuestra vida. Espero que nuestra pequeña Faith haya absorbido algo de nuestra fe mientras atravesábamos nuestras pruebas. ¡Ella es una fuente de esperanza, fe y alegría!
Stacey: Hemos aprendido que no importa lo que pasemos, lo más importante que podemos tener es fe en el Padre Celestial y Jesucristo.
Cada vez que hemos acudido a Jesucristo y hemos tenido fe en Él, todo parece manejable. Se siente una gran paz y felicidad al seguir a Jesús y hacer lo correcto. El Evangelio lo tiene todo; nos permite ser felices en esta vida. Soy verdaderamente feliz y sé que es porque he acudido al Señor, he confiado en el Evangelio y he tenido fe.
Darren: He aprendido que Dios nos da mandamientos y leyes para que nuestra vida sea más feliz, ya que Él puede ver la visión completa. Cuando no podemos ver lo que nos espera más adelante, necesitamos confiar en Él, guardar Sus mandamientos y acudir a Él en oración. Él nos guiará en nuestras pruebas y nos ayudará a mejorar nuestra vida.