Somos discípulos de Jesucristo

Estimados padres:

El Señor ama a sus hijos y quiere que puedan escucharlo a Él. Los artículos de este ejemplar pueden guiarlos cuando enseñen a sus hijos cómo recibir y reconocer la revelación personal. Pueden utilizar estas ideas para ayudar a sus hijos a cultivar una relación más estrecha con el Padre Celestial y el Salvador.

Conversaciones sobre el Evangelio

¿Cómo logramos la unidad?

El artículo del presidente Nelson de la página 2 describe siete principios que nos ayudarán a cumplir el mandamiento del Señor de “se[r] uno” (Doctrina y Convenios 38:27). ¿Cuáles de estos principios podrían analizar con sus hijos? Por ejemplo, ¿de qué manera el hacer y guardar convenios crea unidad con otras personas?

Tomar Su nombre sobre nosotros mediante la ministración

El artículo del élder Villar, en la página 8, enseña cómo ministró el Salvador durante Su tiempo en la tierra. Como familia, podrían orar para saber quién necesita ayuda y cómo necesita que se le ministre. Analicen con sus hijos cómo se sienten después de la oración. Ayúdenlos a reconocer las respuestas que recibieron.

El Señor quiere hablarles

Utilicen el artículo “A causa de tu fe has visto” (página 20) para enseñar a sus hijos acerca de cómo recibir revelación. El autor menciona cómo el Señor puede darnos guía para nuestra misión en la vida por medio de la bendición patriarcal. Podrían explicar el modo en que a ustedes los ha guiado su bendición patriarcal.

Diversión en familia con Ven, sígueme

3 Nefi 12:6; 21:2; 28:11

Jesucristo enseñó que necesitamos la guía del Espíritu Santo en nuestra vida. Esta actividad de figuras hechas con sombras de las manos ayuda a los niños a visualizar este principio.

En tiras de papel diferentes escriban o dibujen figuras que se puedan hacer, tales como figuras hechas con sombras de las manos (por ejemplo, un pájaro, un lobo, una serpiente, etc.).
Pidan a cada niño que tome un trozo de papel. Apaguen las luces del lugar donde se encuentren y pidan a una persona que ilumine la pared con una linterna, para simbolizar la Luz de Cristo.
Pidan a los niños que se turnen para colocar las manos frente a la luz a fin de que la sombra de sus manos forme la figura que se indica en el papel. Permitan que traten de hacerlo sin su ayuda.
Como símbolo de la voz guiadora del Espíritu, ofrézcanse para ayudar a enseñar a sus hijos, paso a paso, a saber cómo colocar las manos para hacer las figuras hechas con sombras de las manos.
Una vez que cada niño haya tenido su turno, lean algún pasaje de las Escrituras sobre el Espíritu Santo, tal como 3 Nefi 12:6. Pregunten a los niños si fue más fácil formar la figura con la ayuda de ustedes o sin ella. Ayúdenles a ver los paralelismos entre esta actividad y la guía del Espíritu Santo.

Análisis: ¿Cómo podemos mejorar nuestra capacidad para reconocer cuando el Espíritu nos habla?