1 Pedro 1–2
Jesucristo, el Redentor preordenado
Antes de Su crucifixión, el Salvador dijo a Pedro: “…tú, una vez vuelto [convertido], confirma a tus hermanos (Lucas 22:32). Cuando leas 1 Pedro 1–2, busca el testimonio que da Pedro de Jesucristo y fíjate en la forma en que anima y fortalece a los santos, cumpliendo así con el mandamiento que le dio el Señor. Además, pregúntate: “¿Cómo pueden fortalecerme esas enseñanzas al prepararme yo para la segunda venida de Jesucristo?”.
La comprensión de las Escrituras
1 Pedro 1
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Elegidos (vers. 2)—Escogidos por Dios por motivo de la fe y la obediencia.
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Santificación (vers. 2)—Proceso de llegar a ser limpios y puros por medio de la Expiación.
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Gracia (vers. 2, 10, 13)—Ayuda o fortaleza divinas que se otorgan mediante la misericordia y el amor de Dios.
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Herencia incorruptible, incontaminada (vers. 4)—La salvación eterna.
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Ceñid los lomos de (vers. 13)—Preparaos.
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Destinado (vers. 20)—Preordenado, preparado en la existencia preterrenal para cumplir con un llamamiento en la vida terrenal.
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No fingido (vers. 22)—Sincero.
1 Pedro 2
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Malicia (vers. 1)—Deseos de hacer daño.
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Abofeteados (vers. 20)—Maltratados.
1 Pedro 2:2—“Desead… la leche espiritual no adulterada”
Los niños recién nacidos digieren con facilidad la leche con la cual crecen debidamente. Del mismo modo, los principios básicos del Evangelio ayudan a los que son jóvenes en la fe a crecer en el Evangelio. La analogía de Pedro es similar a la de Pablo, que se encuentra en 1 Corintios 3:2.
1 Pedro 2:4–8—¿A qué se refieren las “piedras”?
Pedro compara la Iglesia de Jesucristo a una “casa espiritual” (1 Pedro 2:5). Jesucristo, la “piedra viva” (vers. 4), fue hecho “la principal piedra del ángulo” (vers. 6) de esa casa espiritual. Él es también la “piedra que los edificadores desecharon” (vers. 7), lo cual se refiere a que los judíos rechazaron a Jesucristo. Pedro testifica que, a pesar de ese rechazo, Jesucristo ha venido a ser “la cabeza del ángulo” (vers. 7). Él es la “roca” sobre la cual debemos edificar (véase Helamán 5:12).
El estudio de las Escrituras
Al estudiar 1 Pedro 1–2, realiza dos de las actividades siguientes (A–C).
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Redacta la descripción de un puesto de trabajo
En 1 Pedro 1:1–16, Pedro insta a los miembros de la Iglesia a comprender quiénes son y a cumplir con las responsabilidades que aceptaron en la existencia preterrenal. Lee los versículos 2–5, 6–9 y 13–16, y, en seguida, redacta una descripción de un puesto de trabajo en la que indiques lo que Dios espera de los santos en esta vida. En una descripción de un puesto de trabajo, se explica con palabras sencillas lo que la persona debe hacer a fin de realizar el trabajo designado.
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Escribe una entrada de palabras de las Escrituras para un diccionario
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Lee 1 Pedro 2:9–10 y escribe, para un Diccionario Bíblico, la definición de cada una de las frases siguientes: linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios. Procura redactar las definiciones como las que figuran en los diccionarios de verdad.
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El presidente Joseph Fielding Smith enseñó: “Los santos son peculiares, diferentes. Esto es verdad tanto en relación a sus costumbres como a sus creencias religiosas. Si ellos quieren ser leales a su fe, no pueden evitar ser diferentes al resto de sus semejantes. Su religión así lo requiere” (Doctrina de Salvación, tomo I, pág. 223). Describe una situación en la que se evidencie que esa declaración es verdad.
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Haz una lista
Pedro pide a los santos de su época que crean en Jesucristo y que sigan “[S]us pisadas” (1 Pedro 2:21). Lee 1 Pedro 2:11–13, 21–25 y enumera los pasos necesarios para seguir al Salvador. Piensa en cuáles de ellos serían más indispensables en tu vida.