El Apocalipsis de San Juan el Divino
¿De qué trata esta revelación?
Cuando piensan en el libro del Apocalipsis, muchas personas ven de inmediato en la mente profecías acerca de los últimos días, bestias y otros misterios que están allí descritos en lenguaje simbólico. El Apocalipsis contiene todo eso, pero, como el apóstol Juan lo indica en los primeros versículos, es la revelación de Jesucristo dada a Su siervo, que había de dar fe de lo que vio y de su testimonio de Jesucristo (véase Apocalipsis 1:1–2). En otras palabras, el mensaje principal del libro del Apocalipsis es como el de la mayoría de los demás libros de las Escrituras: revela o enseña acerca de Jesucristo y nos invita a venir a Él.
Cuando leas el libro del Apocalipsis, descubre las enseñanzas que contiene acerca de Jesucristo. Al principio, el lenguaje simbólico y las imágenes que contiene podrán parecer difíciles de entender, pero hallarás que profundizarán tu entendimiento de la misión de Cristo y de Su poder.
Antecedentes históricos
Juan recibió y escribió esta revelación mientras se hallaba prisionero en la isla de Patmos, en el Mar Egeo. En esa época, el gobierno de Roma perseguía a los cristianos y la mayoría de los Apóstoles de Jesús habían sido martirizados por su fe. A muchos otros miembros de la Iglesia los trataban cruelmente tanto en Roma como en otros lugares del imperio romano.
El dar la vida por el Salvador era para los santos de aquella época una posibilidad muy real. En medio de tiempos tan difíciles, no cuesta trabajo imaginar que los miembros de la Iglesia se preguntaran por qué pasaban tales tribulaciones y qué haría el Señor ante tal maldad que había sobre la tierra: sobre todo la maldad dirigida expresamente a los del pueblo del Señor. Esta revelación del Señor a Juan da a conocer el más grande o más grandioso cuadro del plan de Dios y sirvió a los santos de aquella época para comprender con mayor claridad las persecuciones y las aparentes victorias del mal sobre el bien que ocurren en esta vida. Los santos de nuestra época que también se preguntan acerca de la lucha entre el bien y el mal y el poder aparente del diablo sobre la tierra también hallarán ánimo y esperanza en el mensaje que contiene el libro del Apocalipsis.
Puedes leer más de los antecedentes y del contenido de este libro en la Guía para el Estudio de las Escrituras bajo la entrada “Revelación de Juan”, pág. 177, y bajo la entrada “Apocalipsis, El”, pág. 16).
Para nuestra época
Los primeros tres capítulos del Apocalipsis contienen consejos para siete ramas de la Iglesia de los tiempos de Juan, pero esos consejos también se aplican a nuestra época. La mayor parte de lo que Juan vio en la visión representa acontecimientos que tendrán lugar en los últimos días, antes de la segunda venida de Jesucristo, y durante el Milenio (véase 1 Nefi 14:14–28). Por consiguiente, los santos de nuestra época deben tener un interés particular en el mensaje que este libro contiene.
El desafío de Juan
Antes de que Juan explique lo que vio en visión y antes de dar consejos a las iglesias de su tiempo, dice que seremos bienaventurados si leemos y “[oímos] las palabras de esta profecía y guard[amos] [obedecemos] las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca” (Apocalipsis 1:3). Cuando leas el libro del Apocalipsis debes reflexionar seriamente en ese desafío que hace Juan de oír y obedecer. Vives en una época en la que los acontecimientos escritos en este libro están “cerca”: se han verificado en nuestra época o todavía tendrán que ocurrir.