1 Corintios 15–16
La doctrina de la Resurrección
¿Ha muerto alguien a quien hayas querido mucho? ¿Qué sentiste cuando esa persona falleció? Jesucristo venció a la muerte por medio de Su sacrificio expiatorio. Por motivo de esa dádiva de Él, la muerte es temporaria. Todo el género humano resucitará y tendrá la inmortalidad.
En la época de Pablo, había algunos que ponían en tela de juicio la realidad de la resurrección de Cristo. Cuando leas 1 Corintios 15–16, busca el poderoso testimonio de Pablo de la realidad de la Resurrección, y busca también las verdades doctrinales acerca de los tres grados de gloria y la obra de las ordenanzas que se efectúa en los templos por los que han muerto.
La comprensión de las Escrituras
1 Corintios 15
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En vano (vers. 2, 14, 17)—Inútilmente, sin logro ni efecto.
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Duermen (vers. 6)—Han muerto.
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Primicias (vers. 20, 23)—El primero que resucitó.
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Vivifica (vers. 36)—Da vida.
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Espíritu vivificante (vers. 45)—Persona inmortal con un cuerpo glorificado y perfecto.
1 Corintios 15:29—El bautismo por los muertos
Pablo explica que no habría habido razón para que los santos se bautizaran por los muertos si no hubiese resurrección. En seguida testifica que la Resurrección es una realidad y que la obra de las ordenanzas por los muertos les proporciona grandes bendiciones tanto a éstos como a los que efectúan las ordenanzas.
El profeta José Smith enseñó: “Los santos tienen el privilegio de bautizarse por sus parientes muertos… quienes ya lo habrán recibido [el Evangelio] en el espíritu, por conducto de aquellos que fueron comisionados para predicarles…” (Enseñanzas del Profeta José Smith, pág. 214). También enseñó: “Los miembros de la Iglesia que desatienden este deber en bien de sus parientes muertos, ponen en peligro su propia salvación” (Enseñanzas del Profeta José Smith, pág. 232; véase también D. y C. 128:15–18).
1 Corintios 15:40–42—Cuerpos celestiales, terrestres y telestiales
Todas las personas resucitarán, pero no se levantarán de entre los muertos en el mismo momento ni con la misma gloria. Los más rectos resucitarán primero y servirán con Jesucristo durante Su reinado milenario. La gráfica que aparece a continuación te servirá para comprender mejor el orden de la Resurrección (véase también D. y C. 88:98–102):
1 Corintios 15:42–54—“Corrupción… incorrupción”
Pablo emplea varias veces la palabra corrupción para referirse a la muerte y la palabra incorrupción para referirse a la inmortalidad (véase 1 Corintios 15:42–54). Aun cuando en la Resurrección recibiremos nuestro mismo cuerpo, éste no estará sujeto a las enfermedades, a la descomposición ni a la imperfección, sino que será glorificado, perfeccionado e inmortal (véase Alma 11:42–45).
El estudio de las Escrituras
Al estudiar 1 Corintios 15, realiza dos de las actividades siguientes (A–C).
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Dominio de las Escrituras— 1 Corintios 15:20–22
Relaciona pasajes por escrito que comiencen en 1 Corintios 15:20–22. Utiliza la Guía para el Estudio de las Escrituras para buscar por lo menos cinco pasajes adicionales de las Escrituras en los que se explique que todas las personas resucitarán. Si lo deseas, puedes anotar esos pasajes correlacionados al margen de tus ejemplares de las Escrituras.
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Dominio de las Escrituras— 1 Corintios 15:29
Entrevista a alguien que haya ido al templo a efectuar bautismos por los muertos. (Si tú has tenido esa oportunidad, escribe acerca de tu propia experiencia.) Escribe la respuesta a las siguientes preguntas:
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¿De qué disfrutaste más al efectuar bautismos por los muertos?
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¿De qué manera beneficiará a los muertos el servicio que has prestado?
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¿Por qué consideras que el bautismo por los muertos es una doctrina tan importante?
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Dominio de las Escrituras— 1 Corintios 15:40–42
Escribe tres preguntas que supongas que una persona que no sea miembro de la Iglesia podría hacer a un misionero acerca de la Resurrección o de los tres grados de gloria. En seguida, escribe la respuesta a cada una de las preguntas, utilizando en las respuestas los versículos de 1 Corintios 15.