Buscar antepasados y hallar la verdad
Yuri Siqueira Zanini
Río de Janeiro, Brasil
Me interesaba saber más de mis antepasados italianos, así que, hace unos años, comencé a investigar mi genealogía. No pasaba ni un día sin que investigara para encontrarlos. Con el tiempo, hallé el certificado de nacimiento de mi tercer bisabuelo de Italia. Encontrar su registro me conmovió de tal manera que sentí que debía seguir buscando a mis antepasados.
Al hacerlo, encontré a muchos antepasados de los que ni siquiera había escuchado. Además, por medio de las redes sociales, conocí a una joven llamada Ingrid Zanini. Suponíamos que podríamos estar emparentados de algún modo porque teníamos el mismo apellido. Durante nuestra conversación, Ingrid me dijo que era miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días; me habló de la Iglesia, y dijo que me enviaría un ejemplar del Libro de Mormón. Apenas llegó el libro, lo comencé a leer.
Un día, en el trabajo, una joven llamada Erika se dio cuenta de que yo tenía el Libro de Mormón. Jamás olvidaré la expresión en su rostro; estaba muy feliz y emocionada. Me preguntó si estaba disfrutando el libro y si me gustaría ir a la Iglesia con ella y su hermano. Dos semanas después de recibir el Libro de Mormón, asistí a la Iglesia por primera vez.
La lección de ese día en la Escuela Dominical fue acerca de los bautismos por los muertos y la importancia de la historia familiar. Yo estaba muy interesado; conocí a los misioneros, y esa tarde asistí a una reunión sobre historia familiar en el centro de estaca. Al investigar la Iglesia, pude sentir la presencia de mis antepasados, y me sentí alentado a aprender más.
Cuando los misioneros me invitaron a ser bautizado, me detuve a pensar en todo lo que había ocurrido desde que comencé a hacer mi historia familiar. El haber conocido el Evangelio y aprender en cuanto a la importancia eterna de la historia familiar no podía haber sido tan solo una coincidencia. Acepté la invitación de los misioneros de ser bautizado.
Todavía hago historia familiar, y estoy agradecido de saber que mis esfuerzos por buscar a mis antepasados ahora puede darles bendiciones eternas porque hallé el evangelio de Jesucristo.