Voces de los miembros
“No podía leer, pero ahora sí puedo”
Jovensky Valcin, de Ouanaminthe, Haití, es miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y participó en una actividad para niños de escasos recursos que ofrecía una clínica oftalmológica local. Era evidente que era un niño inteligente, pero le costaba leer.
La lectura siempre había sido un problema para Jovinsky, era humillante y decepcionante para él. Leer las notas de la pizarra en clase era casi imposible. Para poder leer un libro, tenía que acercarlo a la cara para poder ver las palabras.
Cuando se le preguntó cómo se sentía al estudiar sus apuntes o al mirar la pizarra en la escuela, respondió: “Me siento incómodo y me desanimo fácilmente”.
Cuando se le preguntó a su padre si sabía que su hijo, que era tan inteligente, tenía un grave problema de visión, respondió valientemente: “Me di cuenta de eso. Es solo que tenemos que esperar un poco más, pero estamos trabajando en ello”. Era obvio que Jovensky y su familia necesitaban ayuda para conseguirle lentes.
Cuando la clínica supo del problema, le pidieron a Jovensky y a su padre que visitaran su clínica en Ouanaminthe. La clínica realizó todos los exámenes de la vista para saber qué ocurría desde el punto de vista médico y luego envió una receta de anteojos al laboratorio.
Le entregaron los lentes recientemente. Fue uno de los días más hermosos que la clínica había experimentado jamás. Antes de que se entregaran los lentes, la clínica pidió a la familia que pagara 100 gourdes haitianos (unos 0,75 dólares estadounidenses). Jovensky no podía creer lo que escuchó, entonces preguntó suavemente: “¿Acaba de decir 100 gourdes?”. Cuando se dio cuenta de que lo que creía haber oído era correcto, la respuesta hizo que se le dibujara una sonrisa transformadora.
Jovensky dice: “No podía leer, pero ahora sí puedo”. Reconoce que el Señor le envió ángeles con el milagro de la vista. Agradece a todos los que fueron tan serviciales y generosos con él. Ahora, disfruta de poder trabajar en sus tareas. La clínica y sus nuevos amigos siguen en contacto con él y le desean todo lo mejor.