Manuales de la Primaria y del Tiempo para compartir
Podemos demostrar nuestra fe siendo obedientes


Lección 16

Podemos demostrar nuestra fe siendo obedientes

Objetivo

Que cada uno de los niños comprenda que puede poner de manifiesto su fe en nuestro Padre Celestial y en Jesucristo al obedecer los mandamientos.

Preparación

  1. Con espíritu de oración, estudie el relato de Lehi y su familia, el cual se encuentra en 1 Nefi 1–2.

  2. Junte artículos o figuras de objetos que representen las pertenencias que la familia de Lehi tenía, entre las que tuvieron que escoger cuáles llevar consigo cuando se preparaban para ir al desierto.

  3. Prepárese para cantar o repetir con los niños la letra de la canción “La fe” (Canciones para los niños, pág. 50).

  4. Materiales necesarios:

    1. Un ejemplar del Libro de Mormón.

    2. La lámina 3–39, Lehi profetiza al pueblo de Jerusalén (62517 002; Las bellas artes del evangelio 300); la lámina 3–40, La familia de Lehi sale de Jerusalén (62238 002; Las bellas artes del evangelio 301), y una lámina del profeta actual.

    3. El escudo y el anillo HLJ.

  5. Haga los arreglos necesarios para las Actividades complementarias que desee llevar a cabo.

Sugerencias para el desarrollo de la lección

Pida a un niño que ofrezca la primera oración.

Si en la clase anterior les dio una asignación, verifique si la hicieron.

El ser obediente es una forma de demostrar nuestra fe

Actividad para despertar el interés

Canten o digan la letra de la canción “La fe”. Para las clases de niños más pequeños, podría incluir los movimientos que se incluyen más abajo.

Fe es saber que saldrá el sol (los brazos forman un semicírculo sobre la cabeza), y alumbrará mi faz (dejar caer los brazos lentamente al nivel de los hombros). La fe es saber que Dios oirá (poner las manos cerradas detrás de los oídos) mi oración veraz (las manos juntas en señal de oración). Cual semillita es la fe (con la mano derecha, simular plantar una semilla en la mano izquierda):Sembrada crecerá (mover la mano derecha imitando el crecimiento de una planta que brota de la mano izquierda). Tranquilidad en mi corazón (poner las manos sobre el corazón) si es justa (señalar hacia arriba con el dedo índice derecho) mi decisión (tocar la cabeza con el dedo índice derecho).

Un mandamiento es lo que nuestro Padre Celestial y Jesucristo desean que hagamos. Cuando obedecemos los mandamientos, demostramos que tenemos confianza en nuestro Padre Celestial y Jesucristo; sabemos que nos aman y que nunca nos pedirán que hagamos algo que nos perjudique. Cuando obedecemos, demostramos la fe que tenemos en ellos.

Recuerde a los niños que creer en nuestro Padre Celestial y en Jesucristo significa tener fe; que si bien no les veamos durante nuestra vida terrenal, tenemos fe en los testimonios que de ellos han dado otras personas que sí los vieron. También creemos que el Espíritu Santo es real y que si bien no tiene un cuerpo de carne y hueso, es un personaje de espíritu en forma de hombre.

Artículo de Fe

Ayude a los niños a memorizar el Artículo de Fe 1. Los niños más pequeños podrían repetirlo con usted y quizás memorizar una parte.

Lehi demostró su fe siendo obediente

Relato de las Escrituras y lámina

Explique que somos hijos de nuestro Padre Celestial y que nos es posible demostrar que tenemos fe en Él y en Jesucristo. En el Libro de Mormón, se habla de un profeta llamado Lehi que mediante su obediencia demostró su fe en nuestro Padre Celestial y en Jesús.

Cuente el siguiente relato de las Escrituras con sus propias palabras:

Hace mucho tiempo, seiscientos años antes del nacimiento de Jesús, vivía en Jerusalén, con su familia, un profeta llamado Lehi. Su esposa se llamaba Saríah, y tenían cuatro hijos cuyos nombres eran Lamán, Lemuel, Sam y Nefi.

Lehi era un hombre rico, por lo que él y su familia vivían con comodidad. Lehi amaba a nuestro Padre Celestial y a Jesús, y se esforzaba por enseñar a su familia a amarlos y obedecer Sus mandamientos.

Muestre la lámina 3–9, Lehi profetiza al pueblo de Jerusalén.

En aquella época, las personas que vivían en Jerusalén eran muy inicuas, por lo que Lehi trató de enseñarles acerca de nuestro Padre Celestial y Jesús, así como de los mandamientos, pero no quisieron escucharle.

Un día, mientras Lehi estaba orando, tuvo una visión: vio cosas maravillosas y también vio que la ciudad de Jerusalén sería destruida si sus habitantes no se arrepentían. Lehi alabó al Padre Celestial porque sabía que Él deseaba advertir a los habitantes de Jerusalén. El Padre le dijo que fuera y les dijera lo que había visto. Lehi hizo lo que le fue mandado: fue y dijo al pueblo que Jerusalén sería destruida si no se arrepentían.

• ¿Qué vio Lehi en la visión? (Muchas cosas, incluso la destrucción de Jerusalén. Véase 1 Nefi 1:13.)

• ¿Cómo se sintió Lehi después de haber tenido la visión? (Alabó al Padre Celestial; estaba feliz. Véase 1 Nefi 1:14–15.)

Lehi tuvo que ser muy valiente para llamar a aquella gente al arrepentimiento. No obstante, tuvo fe en que nuestro Padre Celestial le protegería, e hizo lo que se le había mandado. Pero las personas no le escucharon y se burlaron de él; hasta trataron de matarle porque no les gustaba que les dijeran que eran inicuos.

• ¿Qué hizo Lehi para demostrar que tenía fe en nuestro Padre Celestial? (Fue obediente y le dijo a la gente que se arrepintiera de sus pecados. Véase 1 Nefi 1:4, 18.)

• ¿Qué hizo la gente después de que Lehi les dijo que se arrepintieran? (Se burló de él y quería matarlo. Véase 1 Nefi 1:19–20.)

• ¿Cómo creen ustedes que se sintió Lehi cuando vio que la gente no le prestaba atención?

Análisis de pasajes de las Escrituras

Algún tiempo después, nuestro Padre Celestial le habló a Lehi. Pida a los niños que escuchen para ver lo que el Padre le dijo a Lehi que hiciera. Lea 1 Nefi 2:1–2.

• ¿Qué le mandó hacer el Padre Celestial a Lehi? (Que saliera de Jerusalén y se fuera al desierto.)

Explique que, por lo general, un desierto es un lugar donde no vive nadie y donde no hay casas, ni edificios ni caminos. Nuestro Padre Celestial le dijo a Lehi que él y su familia dejaran todo y se fueran a un lugar donde tendrían que vivir por sí mismos.

• ¿Por qué le fue mandado a Lehi marcharse de Jerusalén con su familia? (Hombres malvados intentaban matarlo y el Señor iba a destruir la ciudad.)

Pida a los niños que escuchen con atención para que se enteren de lo que hizo Lehi, y entonces lea 1 Nefi 2:3–4.

• ¿Qué hizo Lehi? (Juntó las provisiones que necesitaba para vivir en el desierto y se fue de Jerusalén con su familia.)

Relato de las Escrituras y lámina

Muestre la lámina 3–40, La familia de Lehi sale de Jerusalén.

Aun cuando Lehi había vivido en Jerusalén por mucho tiempo, obedeció el mandamiento y se fue de la ciudad. Lehi y su familia abandonaron su casa, su tierra, la mayor parte de su ropa, su oro y su plata y demás pertenencias. Sólo llevaron alimentos, algunas prendas de vestir, tiendas y otros artículos necesarios que probablemente cargaron en camellos o en asnos, y así partieron hacia el desierto.

Haga notar que no fue fácil para Lehi dejar todo abandonado y marcharse, pero que él estaba dispuesto a obedecer la instrucción que había recibido.

• ¿Qué hizo Lehi que demostró que tenía fe en nuestro Padre Celestial y Jesucristo? (Fue obediente; advirtió a los inicuos y dejó su casa y todas sus pertenencias y se fue al desierto porque eso fue lo que se le dijo que hiciera.)

Análisis

Pida a los niños que se figuren que son miembros de la familia de Lehi.

Hágales pensar en lo que ellos desearían llevar consigo cuando se marcharan para el desierto, y pídales que le digan qué les gustaría llevar y qué dejarían abandonado. Usted podría mostrarles algunos objetos o recortes de cosas que representen las pertenencias de Lehi y su familia entre las que tuvieron que escoger. Por ejemplo, un anillo para representar las joyas, una moneda para representar el dinero, una manzana para representar alimentos. Diga a los niños que escojan lo que la familia de Lehi necesitaba. Recuérdeles que sólo pueden llevar unas cuantas cosas.

Actividad

Diga a los niños que van a jugar un juego en el que ellos van a escoger lo que llevarían consigo si fueran al desierto con Lehi. El primer niño dice: “Si yo fuera al desierto con Lehi, llevaría __________ ,” (Entonces el niño completa la frase diciendo lo que ha escogido llevar.) El próximo niño repite lo que el primer niño dijo y agrega lo que desee llevar. Los demás niños deben repetir todos los artículos mencionados y agregar otro de su preferencia. Continúe de esta forma hasta que todos los niños (y el maestro) hayan tenido la oportunidad de participar en el juego por lo menos una vez.

• ¿Cómo creen que se sentirían ustedes si supieran que nunca más volverían a ver a sus amigos ni las cosas que les pertenecen?

• ¿Cómo piensan que se sintieron los hijos de Lehi?

Lehi tuvo que tener mucha fe en nuestro Padre Celestial para obedecer y marcharse de Jerusalén. Él y su familia recibieron bendiciones porque fueron obedientes.

Cuando escogemos hacer lo justo somos obedientes

Actividad para dramatizar

Muestre el escudo y el anillo HLJ.

• ¿Qué representan las letras HLJ? (Haz lo justo.)

Diga a los niños que hacer lo justo significa hacer lo que nuestro Padre Celestial y Jesucristo desean que hagamos.

Diga las siguientes situaciones con sus propias palabras, y luego pida a los niños que las dramaticen.

  1. Van camino a casa con algunos amigos y pasan frente al huerto del vecino. Allí hay un árbol repleto de jugosa fruta. Sus amigos quieren que ustedes vayan con ellos a recoger alguna para comer; ellos dicen que hay tanta fruta que nadie se dará cuenta de que falta.

    • ¿Qué desean nuestro Padre Celestial y Jesucristo que ustedes hagan?

    Haga notar a los niños que cuando ellos escogen hacer lo justo, son obedientes y demuestran tener fe en nuestro Padre Celestial y Jesucristo.

  2. Quieren jugar con su juguete favorito, pero su hermano lo tiene.

    • ¿Qué desean nuestro Padre Celestial y Jesucristo que ustedes hagan?

Explique que cuando hacemos lo que nuestro Padre Celestial y Jesucristo desean, estamos escogiendo lo justo.

Si el tiempo lo permite, podría mostrar la lámina del profeta actual y pedir a los niños que digan algunas de las cosas que él nos ha pedido que hagamos. Analicen en qué forma el cumplir con esos mandamientos puede traernos bendiciones.

Resumen

Vuelva a mostrar el escudo y el anillo HLJ y recuerde a los niños que escojan siempre hacer lo justo. Cuando lo hagan, estarán obedeciendo al Señor. Cuando obedezcan, estarán demostrando a nuestro Padre Celestial y Jesucristo que tienen fe en ellos.

Pida a un niño que ofrezca la última oración.

Actividades complementarias

Elija algunas de las siguientes actividades que se ajusten mejor a sus niños. Puede realizarlas durante la lección o como repaso o resumen. Para ayuda adicional, vea “Período de clases”, en “Ayudas para el maestro”.

  1. Pida a un miembro del barrio o rama que diga de qué forma se benefició por haber sido obediente. Sería una buena idea invitar a un misionero que haya vuelto recientemente del campo misional, un nuevo converso o alguien que hace poco fue al templo. Antes de extender la invitación, obtenga el consentimiento de la presidenta de la Primaria y del líder del sacerdocio correspondiente.

  2. Junte varios artículos que ofrezcan protección, tales como zapatos, un sombrero, un paraguas, etc. Cerciórese de que sean suficientes a fin de dar a todos los niños la oportunidad de participar. Pida a los niños, uno a la vez, que escojan un objeto y digan qué clase de protección ofrece (por ejemplo, los zapatos protegen los pies, etc.) Dígales que el obedecer a nuestros padres y líderes es para nosotros una protección. Hablen de algunas reglas y analicen en qué forma pueden protegernos.

  3. Levante las manos en alto y muestre a los niños que puede mover los dedos. Explíqueles que usted puede mover sus propios dedos y manos pero que no puede mover los de otra persona. Luego pídales que levanten las manos, que muevan los dedos y que abran y cierren las manos. Haga comprender a los niños que cuando ellos les indican a sus manos que escojan lo justo, son obedientes.

  4. Vean si pueden determinar cuántas formas de hacer lo justo figuran en el Artículo de Fe 13. Pida a los niños que participen en esta actividad. Anime a los niños que puedan hacerlo a memorizar una frase o dos que sea(n) importante(s) para ellos.