Capítulo 13 2:5Zeniff Zeniff y un grupo de nefitas dejaron sus hogares en Zarahemla y viajaron a la tierra de Nefi, donde en un tiempo habían vivido otros nefitas. Omni 1:27; Mosíah 9:1. Encontraron a los lamanitas viviendo allí. Zeniff y cuatro de sus hombres fueron a la ciudad para hablar con el rey. Le preguntaron al rey Lamán si podían vivir en su tierra. Mosíah 9:1, 5. El rey Lamán dijo que podían quedarse con dos de sus ciudades. Él quería que vivieran en su tierra para poder hacerlos sus esclavos. Mosíah 9:6, 10, 12. El pueblo de Zeniff construyó casas y reparó los muros de las ciudades. Sembraron muchas clases de granos y de frutas; también tenían rebaños de animales. Mosíah 9:8–9, 12. El rey Lamán dijo a los de su pueblo que los nefitas se estaban volviendo demasiado poderosos. Poco después, los lamanitas atacaron a los nefitas y les robaron sus rebaños y cosechas. Mosíah 9:11, 13–14. Los nefitas huyeron a la ciudad de Nefi; allí, Zeniff los armó con arcos y flechas, espadas, mazas y hondas, y fueron a luchar en contra de los lamanitas. Mosíah 9:15–16. Antes de luchar, los nefitas oraron para pedir a Dios que les ayudara. Dios bendijo a los nefitas con más fuerza y pudieron derrotar a los lamanitas. Mosíah 9:17–18. Después de la batalla, Zeniff puso guardias alrededor de las ciudades nefitas. Él quería proteger de los lamanitas a su pueblo y a los animales. Mosíah 10:2. Los nefitas vivieron en paz durante muchos años. Los hombres cultivaban la tierra y las mujeres hilaban y confeccionaban la ropa. Mosíah 10:4–5. El rey Lamán murió y su hijo se convirtió en rey. El nuevo rey envió a su ejército a luchar contra los nefitas. Mosíah 10:6, 8–9. Una vez más los nefitas recibieron fortaleza del Señor; mataron a muchos lamanitas, y el resto huyó. Mosíah 10:10, 19–20.