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Lección de estudio individual supervisado: Lucas 10:38–17:37 (Unidad 11)


Lección de estudio individual supervisado

Lucas 10:38–17:37 (Unidad 11)

Material de preparación para el maestro del curso de estudio individual supervisado

Resumen de lecciones diarias de estudio individual supervisado

El siguiente resumen de los acontecimientos, las doctrinas y los principios que los alumnos aprendieron al estudiar Lucas 10:38–17:37 (Unidad 11) no se ha creado con la intención de que se enseñe como parte de la lección. La lección que usted va a enseñar se centra en sólo algunas de esas doctrinas y principios. Siga las impresiones del Espíritu Santo conforme considera las necesidades de sus alumnos.

Día 1 (Lucas 10:38–12:59)

De las palabras del Salvador a Marta, los alumnos aprendieron que si elegimos dedicarnos a los asuntos espirituales por encima de las cuestiones temporales, recibiremos bendiciones eternas. Jesús enseñó también que si oramos y buscamos constantemente las bendiciones del Padre Celestial en épocas de necesidad, entonces Él, en Su propio tiempo y a Su propia manera, contestará nuestras oraciones. Otras verdades que los alumnos aprendieron son: El Señor nos manda que no codiciemos las posesiones de este mundo. Si procuramos sacar a luz el reino de Dios y Su justicia, Él nos ayudará a proveer para nuestras necesidades y preparará un lugar para nosotros en Su reino.

Día 2 (Lucas 13–15)

En esos capítulos, los alumnos aprendieron los siguientes principios: Si tratamos de ayudar a las personas que son menos afortunadas que nosotros, el Señor nos recompensará en la Resurrección. Si ponemos otras prioridades por encima del Señor y Su evangelio, perderemos las bendiciones del Evangelio que podríamos haber recibido. Los discípulos de Jesucristo deben estar dispuestos a sacrificarlo todo para seguirlo a Él. Cuando ayudamos a otras personas a sentir el deseo de arrepentirse, sentimos gozo, y los cielos se regocijan.

Día 3 (Lucas 16)

De las parábolas del Salvador en Lucas 16:1–12 aprendemos que si nos preparamos sabiamente para nuestro futuro eterno y utilizamos con rectitud las riquezas de la tierra, podemos ser bendecidos con las riquezas eternas. También aprendieron los siguientes principios: Si somos avaros y no utilizamos con rectitud nuestras riquezas terrenales, finalmente sentiremos pesar y remordimiento. La conversión llega por creer y prestar atención a las palabras de los profetas, no por presenciar milagros o ver ángeles.

Día 4 (Lucas 17)

En Lucas 17, los apóstoles le piden a Jesús que les aumente la fe. Los alumnos aprendieron que nuestra fe aumentará a medida que nos esforcemos por hacer todo lo que el Padre Celestial manda y recordemos que siempre estamos en deuda con Él. Los alumnos aprendieron también que recibimos las bendiciones del Señor cuando hacemos lo que Él nos manda, y que es importante expresar gratitud por las bendiciones que recibimos.

Introducción

El Salvador respondió a las quejas de los fariseos sobre Su asociación con los publicanos y pecadores al narrar la parábola de la oveja perdida, la de la moneda perdida y la del hijo pródigo.

Sugerencias para la enseñanza

Lucas 15

Jesús enseña la parábola de la oveja perdida, la de la moneda perdida y la del hijo pródigo.

Para comenzar la lección, pregunte a los alumnos si alguna vez han perdido algo que para ellos era de gran valor.

  • ¿Qué estuvieron dispuestos a hacer para encontrarlo? ¿Por qué?

  • ¿Qué creen que significa para alguien estar espiritualmente “perdido”? (Ayude a los alumnos a entender que se puede referir a los que aún no han recibido el evangelio restaurado de Jesucristo, o actualmente no están viviendo conforme a las enseñanzas del Evangelio.

Invite a los miembros de la clase a pensar en alguien a quien conozcan que pudiera estar espiritualmente perdido, y pídales que reflexionen sobre cómo se sienten en cuanto a esa persona.

Explique que Lucas 15 contiene las enseñanzas del Salvador sobre los que están espiritualmente perdidos. Invite a los alumnos a buscar verdades en Lucas 15 sobre cómo se siente el Padre Celestial hacia los que están espiritualmente perdidos, y la responsabilidad que nosotros tenemos hacia ellos.

Pida a un alumno que lea Lucas 15:1–2 en voz alta, e invite a la clase a seguir la lectura en silencio para averiguar de qué se quejaban los fariseos

  • ¿De qué se quejaban los fariseos y los escribas?

  • ¿Qué revela esa queja acerca de los fariseos y los escribas?

Explique que para responder, el Salvador narró tres parábolas: una sobre una oveja perdida, otra sobre una moneda perdida y otra sobre un hijo perdido. Pídales que presten atención a por qué se perdió el sujeto de cada parábola, y cómo fue encontrado.

Explique que en la parábola de la oveja perdida y la moneda perdida, el Salvador describió cómo el pastor y la mujer que perdió la moneda buscaron con gran diligencia hasta que encontraron lo que se había perdido.

Invite a un alumno a leer en voz alta Lucas 15:4–6, 8–9 y pida a la clase que siga la lectura en silencio para saber cómo se sintieron el pastor y la mujer cuando encontraron la oveja y la moneda.

  • ¿Cuál es la diferencia en la manera en que se perdieron la oveja y la moneda? (La oveja se perdió al seguir el curso natural de la vida, y sin ninguna culpa por su parte, mientras que la moneda se perdió por causa de la negligencia o el descuido de su dueña [véase David O. McKay, en Conference Report, abril de 1945, págs. 120–122]).

  • ¿Qué palabra se utiliza para describir cómo se sintieron el pastor y la mujer?

Invite a los alumnos a leer Lucas 15:7, 10 en silencio para averiguar con qué comparó el Salvador el gozo del pastor y el de la mujer. (El regocijo en los cielos por un pecador que se arrepiente).

Explique que la tercera parábola de Lucas 15 es la historia de un hijo pródigo (que significa una persona derrochadora o imprudentemente extravagante), su hermano mayor y el padre de ambos.

handout iconPodría separar a los alumnos en grupos de tres y entregue a cada grupo una copia del siguiente volante. Invítelos a leer Lucas 15:11–32 en voz alta en sus grupos y pida a un alumno que considere la parábola desde la perspectiva del hijo pródigo, al segundo alumno que lo haga desde la perspectiva del padre, y al tercero desde la perspectiva del hermano mayor.

Cuando los alumnos terminen de leer, pídales que analicen con su grupo las preguntas que aparecen en el volante.

video icon En lugar de pedir a los alumnos que lean y analicen la parábola, podría mostrar el video “El Hijo Pródigo” (5:35), en La Vida de Jesucristo – Videos de la Biblia. Proporcione a cada alumno una copia del siguiente volante, y pida a los alumnos que busquen las respuestas a las preguntas a medida que ven el video. Ese video está disponible en LDS.org.

5:34
handout, The Parable of the Prodigal Son

La parábola del hijo pródigo

Nuevo Testamento: Manual del maestro de Seminario—Lección de estudio individual supervisado (Unidad 11)

El hijo pródigo

  • ¿Qué te ayudó a volver en ti, o a reconocer la terrible situación en que te hallabas?

  • ¿Cómo esperabas que reaccionara tu padre cuando regresaste a casa?

  • ¿Qué pensaste y sentiste cuando tu padre te trató del modo en que lo hizo?

El padre

  • ¿Qué pensó y sintió cuando su hijo menor se marchó?

  • ¿Por qué recibió a su hijo pródigo del modo en que lo hizo?

  • Cuando su hijo mayor se sintió resentido por el modo en que trató al menor, ¿cómo lo ayudó a entender su modo de proceder?

El hermano mayor

  • ¿Qué pensaste y sentiste cuando tu hermano se marchó?

  • ¿Por qué te resultó difícil regocijarte por el regreso de tu hermano?

  • ¿Qué bendiciones has recibido por ser fiel a tu padre?

  • ¿Por qué se perdió el hijo pródigo? (A diferencia de la oveja y la moneda, el hijo pródigo se perdió debido a su propia rebeldía).

  • Al comprender que el padre de esa parábola representa al Padre Celestial, ¿qué aprendemos en cuanto al modo en que el Padre Celestial reacciona ante aquellos que se vuelven a Él por medio del arrepentimiento? (Los alumnos deben reconocer un principio similar al siguiente: Si nos volvemos al Padre Celestial por medio del arrepentimiento y buscamos Su perdón, Él se regocijará y nos recibirá de nuevo con los brazos abiertos. Anote ese principio en la pizarra).

  • ¿Cómo puede ese principio ayudar a los que se sienten espiritualmente perdidos?

Recuerde a los alumnos el hermano mayor de la parábola.

  • ¿Por qué creen que el hermano mayor estaba enojado?

Invite a un alumno a leer en voz alta la siguiente declaración del élder Jeffrey R. Holland, del Cuórum de los Doce Apóstoles, y pida a los miembros de la clase que presten atención a la información de por qué el hermano mayor estaba enojado:

Elder Jeffrey R. Holland

“Pensando que no le valoran a él y sintiendo quizás más que un poco de compasión por sí mismo, ese hijo obediente —y es sumamente obediente— olvida por un momento que él nunca ha tenido que conocer la inmundicia ni la desesperación, ni el temor ni el aborrecimiento de sí mismo. Olvida por un momento que todo becerro de su padre ya es suyo, lo mismo que toda la ropa y todos los anillos de su progenitor. Olvida por un momento que su fidelidad siempre ha sido y siempre será recompensada.

“… a él, que tiene prácticamente todo y que, con su diligencia y particular obediencia lo ha ganado, le falta una cosa que podría hacerle el hombre completo del Señor que casi es. Él todavía tiene que llegar a tener la compasión, la misericordia y la caritativa amplitud de visión para ver que no es un rival el que regresa, sino su hermano…

“Sin duda, ese hermano menor había estado prisionero, vale decir, prisionero del pecado, de la estupidez y del chiquero. Pero el hermano mayor también vive en una especie de prisión, pues hasta ahora no ha podido salir de la cárcel de sus dañinos conceptos; está obsesionado por los celos. Piensa que su padre no sabe valorarle y que su hermano le ha privado de sus derechos cuando en realidad no es así” (véase “El otro hijo pródigo”, Liahona, julio de 2002, pág. 70).

  • Según el élder Holland, ¿por qué estaba enojado el hermano mayor? ¿En qué sentido estaba perdido el hermano mayor también?

  • ¿Qué debemos recordar cuando vemos a Dios ser misericordioso y bendecir a aquellos que se arrepienten y se vuelven a Él?

  • ¿Qué principio podemos aprender de esa parábola en cuanto a llegar a parecernos más a nuestro Padre Celestial? (Los alumnos deben reconocer un principio similar al siguiente: Podemos llegar a ser más como nuestro Padre Celestial al reaccionar con compasión y gozo cuando otras personas se arrepienten).

Recuerde a los alumnos la persona en que pensaron al comienzo de esta lección que podría estar espiritualmente perdida, e ínstelos a considerar, con espíritu de oración, cómo podrían ayudar a esa persona a arrepentirse y acercarse más al Padre Celestial. Invítelos también a pensar en qué sentido podrían ellos mismos estar perdidos y necesitar arrepentirse y volverse al Salvador.

Siguiente unidad (Lucas 18Juan 1)

Invite a los alumnos a reflexionar en alguna ocasión en que alguien los trató mal, y en cómo se sintieron. Explique que, al estudiar la siguiente unidad, aprenderán cómo eligió reaccionar el Salvador ante aquellos que lo trataron mal. Pídales que se fijen en otros detalles del relato que hace Lucas del sufrimiento de Jesucristo en Getsemaní, y en lo que comió Jesús después de Su resurrección.