Capítulo adicional 2. Redoblemos nuestra diligencia: Anabella Haight, Rachel Whittaker, Elizabeth Liston, hermana Morris y Alice Randle
“Capítulo adicional 2. Redoblemos nuestra diligencia: Anabella Haight, Rachel Whittaker, Elizabeth Liston, hermana Morris y Alice Randle”, En el púlpito: 185 años de discursos de mujeres Santos de los Últimos Días, 2017
“Capítulo adicional 2. Anabella Haight, Rachel Whittaker, Elizabeth Liston, hermana Morris y Alice Randle”, En el púlpito
Capítulo adicional 2
Redoblemos nuestra diligencia
Anabella Haight, Rachel Whittaker, Elizabeth Liston, hermana Morris y Alice Randle
Sociedad Caritativa de Cedar City
Tabernáculo, Cedar City, Utah
8 de enero de 1857
Reunidos después del aplazamiento del 8 de enero de 1857. Jueves. Preside el presidente John M. Higbee15. Canto. Oración por el presidente Higbee. Canto. Se leen y se aceptan las actas. Luego el presidente Higbee se puso de pie e hizo algunos comentarios muy acertados, y dio buenos consejos a las hermanas; dijo “que una gran responsabilidad recae sobre las hermanas. Son ustedes las que dan forma a las mentes jóvenes y tiernas; el ejemplo es mejor que el precepto. Enséñenles mientras son jóvenes, y las llamarán bienaventuradas. Podemos decir lo que queramos, pero lo que aprendan provendrá del ejemplo, etc.”. Dijo que cualquiera que hablara o fuera en contra de la pluralidad, se hallaba en tinieblas16. No quiero acaparar su tiempo, hermanas; deseo dejar la reunión en sus manos. Se cantó “Oh mi Padre”17. La hermana Anabella Haight dijo que sentía que sobre ella recaía una gran responsabilidad ahora que se había formado la Sociedad de Socorro, y les dio a las hermanas algunos consejos muy buenos; dijo que en este lugar habían visitado a muchos pobres en lo que concierne a las cosas del mundo, pero no pobres en espíritu, y que esas personas generalmente manifestaban un buen espíritu. Esperaba que las hermanas cumplieran con su deber y expresaran sus sentimientos. La hermana R. Whittaker dijo que era la primera reunión en este nuevo año, y que ella tenía la intención de redoblar su diligencia, y que daría testimonio de lo que había dicho la hermana Haight, y que ella habló de los principios del nuevo y sempiterno convenio allá donde fue, con pocas excepciones, y que no sabían de ninguno de los miembros que pusiera en duda “el principio”18. La hermana Liston dijo que sentía que esta sociedad era de Dios, y que se deleitaba grandemente en ella, etc.19. La hermana Morris dio su testimonio de la obra20. La hermana Randle dijo que la tesorería estaba disminuyendo bastante; hacía falta algo de ropa e hilo con el que zurcir medias, etc. Presentado y secundado que las siguientes hermanas sean miembros de esta sociedad: Mary A. Savage, Sarah M. Willis, Susannah Perry y Naomi Howles. Sostenido con unanimidad21. El presidente Higbee dijo que se espera que las donaciones se lleven a la tesorería22. No tienen idea de la cantidad de bien que están haciendo. Ustedes han dado con generosidad, y Dios las bendecirá cien veces más. Luego preguntó si había algún asunto concreto que hubiera que tratar, estando la hermana Hopkins ausente debido a un caso de enfermedad. La hermana Haight respondió y dijo que no sabía de ningún asunto en particular, solo le gustaría mencionar el caso del anciano papá Chatterley, que tenía que dormir en el suelo porque su cama se había incendiado23. Ella pensaba que era nuestro deber encontrarle una. La hermana Hannah Fife dijo que ella buscaría un jergón, y la hermana Mary McConnell una almohada de plumas24. Algunas hermanas más compartieron sus testimonios, y luego el hermano Higbee dijo que no creía que fuera prudente alargar más la reunión, ya que el día estaba muy frío.