El recibir un llamamiento de Dios significa recibir un nombramiento o invitación de Él, o de los líderes debidamente autorizados de Su Iglesia, para servirle de una manera particular.
Yo os elegí a vosotros, Juan 15:16 .
Pablo fue llamado a ser apóstol, Rom. 1:1 .
Nadie toma para sí esta honra, sino el que es llamado por Dios, Heb. 5:4 .
Jesús fue declarado por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec, Heb. 5:10 .
He sido llamado para predicar la palabra de Dios de acuerdo con el espíritu de revelación y profecía, Alma 8:24 .
Esos sacerdotes fueron llamados y preparados desde la fundación del mundo, Alma 13:3 .
Si tenéis deseos de servir a Dios, sois llamados, DyC 4:3 .
Consérvate firme en la obra a la cual te he llamado, DyC 9:14 .
No vayas a suponer que eres llamado a predicar sino hasta que se te llame, DyC 11:15 .
Los élderes son llamados para efectuar el recogimiento de los escogidos, DyC 29:7 .
Ninguno predicará mi evangelio ni edificará mi iglesia a menos que sea ordenado, DyC 42:11 .
Muchos son los llamados, y pocos los escogidos, DyC 121:34 .