Alma 49–51

Introducción

Los preparativos de defensa de Moroni eran vitales para proteger a los nefitas de sus enemigos. Los nefitas tuvieron éxito en defenderse de los lamanitas hasta que la rebelión y la iniquidad entre su propio pueblo comenzó a debilitarlos. Moriantón y los realistas trataron de crear divisiones y crearon contención entre el pueblo. Moroni trató de eliminar la división y la contención y de establecer la paz.

Sugerencias para la enseñanza

Alma 49; 50:1–24

Los nefitas preparan fortificaciones, prosperan y preservan sus libertades

Lea la siguiente situación a la clase y haga las preguntas (o cree su propia situación y preguntas):

Un joven se sentía cansado pero no quería acostarse, así que empezó a hacer búsquedas en internet. Se sintió tentado a visitar sitios que contenían imágenes pornográficas.

¿Qué preparativos podría haber hecho el joven para evitar esa tentación?
¿Qué podría hacer para evitar la tentación en el futuro?

Explique a los alumnos que al estudiar Alma 49–51, pueden estar atentos a la forma en que los preparativos que hizo el capitán Moroni contra los lamanitas se pueden comparar con los que debemos hacer contra las tentaciones de Satanás hoy.

Explique que mientras Amalickíah formaba al ejército lamanita para ir a la guerra, el capitán Moroni fortificaba las ciudades de los nefitas. Pida a los alumnos que lean Alma 49:1, 6–7 en silencio. Dígales que consideren la forma en que los preparativos del capitán Moroni para resistir a los lamanitas se pueden comparar con nuestra necesidad de prepararnos para los ataques de Satanás. Pida a los alumnos que lean Alma 49:2–4; 50:1–6 en silencio para averiguar cómo se prepararon los nefitas para los futuros ataques de los lamanitas.

Si ustedes hubieran sido soldados lamanitas, ¿cómo se hubieran sentido al ver esas fortificaciones por primera vez?

Pida a algunos alumnos, por turno, que lean en voz alta Alma 49:8–12. Diga a la clase que siga la lectura en silencio y que averigüe cómo respondieron los lamanitas a los preparativos de los nefitas.

¿Qué hicieron los lamanitas cuando vieron que se había fortificado la ciudad de Ammoníah? (Se retiraron.)

Pida a un alumno que lea las siguientes palabras del presidente James E. Faust, de la Primera Presidencia:

“Satanás es nuestro mayor enemigo y trabaja noche y día para destruirnos. Sin embargo, el temor al poder de Satanás no tiene por qué paralizarnos, puesto que no puede tener poder sobre nosotros a menos que se lo permitamos. En realidad él es un cobarde y si nos mantenemos firmes, se retirará” (“No temáis”, Liahona, octubre de 2002, pág. 4).

Pida a algunos alumnos, por turno, que lean en voz alta Alma 49:18–20, 23. Pida a los miembros de la clase que sigan la lectura en silencio y que consideren cómo podríamos usar los preparativos nefitas para la batalla como modelo para ayudarnos a prepararnos para las batallas espirituales contra Satanás.

El capitán Moroni trabajó incansablemente para proteger a los nefitas de los lamanitas. ¿Cómo trabajan nuestros líderes para protegernos y defendernos contra el adversario?
¿Qué podemos hacer para edificar altos muros espirituales contra las tentaciones de Satanás? (Entre las respuestas se podrían mencionar la significativa oración diaria, el estudio diario de las Escrituras, la asistencia regular a las reuniones de la Iglesia, el servicio a los demás y el ayuno.)

Considere invitar a los alumnos a responder a las siguientes preguntas en su cuaderno o en su diario de estudio de las Escrituras. (Si lo desea, puede escribir estas preguntas en la pizarra antes de la clase.)

¿Cómo describirían sus esfuerzos diarios por fortalecer sus muros espirituales de protección?
Elijan una cosa que estén haciendo para fortalecerse espiritualmente y una que no estén haciendo. ¿Qué podrían hacer para aumentar la eficacia de esa actividad para fortalecerse contra el mal?

Pida a un alumno que lea Alma 49:28–30 en voz alta. Diga a la clase que identifique quién, además de Moroni, trabajaba duro para proteger a los nefitas contra los lamanitas. Recalque que al ayudar a los nefitas a seguir siendo rectos, Helamán y sus hermanos les ayudaban a recibir las bendiciones y la protección del Señor.

Dé tiempo a los alumnos para que estudien Alma 50:10–12. Luego pídales que analicen las siguientes situaciones con un compañero. (Si es posible, prepare un volante con las situaciones antes de la clase; si eso no es posible, léalas una por una, dando suficiente tiempo para que se analice cada una.)

Moroni “aisló todas las fortificaciones de los lamanitas”. ¿Cómo puede una jovencita “aislar” una situación de chismes cuando se junta con sus amigas en el almuerzo?
Moroni fortificó una línea o frontera entre los nefitas y los lamanitas. ¿Cómo podría un joven o una jovencita fortificar la línea entre guardar la ley de castidad y cruzar a la inmoralidad?
Los ejércitos de Moroni construyeron fortificaciones para proteger a su pueblo contra sus enemigos. Un joven reconoce que ha estado pasando demasiado tiempo usando los medios sociales (ya sea en línea o los mensajes de texto). Ese comportamiento parece disminuir su interés en su familia inmediata, y descuida sus responsabilidades en casa. ¿Qué puede hacer para fortificar y asegurar sus relaciones con la familia?

Pida a varios alumnos que resuman lo que hayan aprendido de las acciones del capitán Moroni en cuanto a la manera de defendernos de los ataques del adversario. Asegúrese de que los alumnos entiendan que si nos preparamos, podemos resistir los ataques (tentaciones) del adversario. Si lo desea, escriba ese principio en la pizarra.

Pida a un alumno que lea Alma 50:1 en voz alta. Pregunte a la clase:

En vista del éxito de los preparativos del capitán Moroni, ¿qué más podemos aprender de este versículo? (Moroni “no cesó” de hacer preparativos; continuó fortaleciendo sus defensas, aun cuando no parecía haber ninguna amenaza inmediata.)

Para ayudar a que los alumnos aprecien la necesidad de la continua fortificación espiritual, lea las siguientes palabras del presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia:

“Al aumentar en intensidad las fuerzas que nos rodean, la fortaleza espiritual que antes era suficiente, ya no lo será. Y cualquiera que sea el crecimiento en fortaleza espiritual que alguna vez era posible, habrá disponible para nosotros un crecimiento aun mayor. Tanto la necesidad de fortaleza espiritual como la oportunidad de adquirirla aumentarán tan rápidamente que, si lo subestimamos, estaremos en peligro” (“Always”, Ensign, octubre de 1999, pág. 9).

Escriba lo siguiente en la pizarra:

Para resistir la tentación haré lo siguiente:

Me mantendré firme cuando ocurra lo siguiente:

Pida a los alumnos que completen esas frases en su cuaderno o en su diario de estudio de las Escrituras. Después que hayan terminado, lea las siguientes palabras del presidente Ezra Taft Benson. (Si lo desea, sugiera que los alumnos escriban esta cita en sus Escrituras cerca de Alma 50:10–12).

“Es mejor prepararse y prevenir, que reparar y arrepentirse” (The Teachings of Ezra Taft Benson, 1988, pág. 285).

¿Por qué piensan que esas palabras son verdaderas? ¿Cuándo han visto un ejemplo del principio que nos enseña esa cita?

Explique que la preparación de los nefitas produjo varios años de gran prosperidad y paz. Señale que mientras que Amalickíah maldijo a Dios por su derrota, los nefitas dieron “gracias al Señor su Dios” (Alma 49:28).

Diga a los alumnos que se imaginen que tienen un amigo que vive en una región donde hay mucha guerra. Él siente que es imposible hallar la paz y la felicidad por el caos que le rodea. Escriba en la pizarra la siguiente referencia de las Escrituras: Alma 50:18–23. Pida a los alumnos que lean este pasaje y que elaboren una respuesta que pudieran darle a su amigo. Pida a algunos de ellos que compartan lo que dirían. Una verdad que podrían incluir en sus respuestas es que la fidelidad a Dios produce felicidad, aun en medio del tumulto. (Tal vez desee anotar este principio en la pizarra.) Ayude a los alumnos a entender que esta verdad no sólo se aplica a la guerra, sino también a los desafíos personales como reveses financieros, pérdida de empleo, la muerte de un ser querido, relaciones difíciles con los miembros de la familia y los desastres naturales.

Según Alma 50:18–23, ¿por qué vivían los nefitas un periodo de felicidad?
¿Cuándo han sentido que el Señor ha extendido Su poder y Sus bendiciones hacia ustedes por ser obedientes y por fortificarse contra la tentación?
¿Cuándo les ha bendecido el Señor a ustedes o a algún conocido con prosperidad, paz y felicidad en medio de tiempos difíciles? (Después que respondan los alumnos, considere compartir un ejemplo de su propia vida.)

Alma 50:25–40; 51

Se debilitan las defensas de los nefitas y Moroni hace frente a la rebelión entre su pueblo

(Nota: Ya que la lección hasta este punto es bastante larga, tal vez tenga que resumir brevemente el resto del material. Si lo hace, explique que en Alma 50:25–40 encontramos el relato de la rebelión y muerte de Moriantón y el nombramiento de Pahorán como juez superior. En Alma 51 se habla de un grupo llamado los realistas que trataron de cambiar la ley para permitir que un rey gobernara a los nefitas, pero fracasaron en su intento. En su ira por su fracaso, los realistas rehusaron tomar las armas cuando llegaron Amalickíah y los lamanitas a hacer la guerra contra los nefitas. De acuerdo con la ley, Moroni requería que tomaran las armas o que fueran castigados. El ejército de Amalickíah capturó muchas ciudades nefitas y mató a muchos nefitas. Cuando Amalickíah trató de capturar la tierra de Abundancia, se encontró con Teáncum y su ejército. Teáncum mató a Amalickíah y evitó que avanzara el ejército de los lamanitas.)

Escriba la siguiente frase en la pizarra: Unidos vencemos; divididos caemos.

Pida a los alumnos que lean Alma 50:25–26 en silencio y que busquen la palabra en cada versículo que describe la razón de la división entre los nefitas.

¿Qué causó la división entre la gente?

Haga un resumen del resto de Alma 50; para ello, explique que Moriantón y su pueblo trataron de apartarse de los nefitas y escapar a las tierras del norte. Moroni temía que esa división causara una pérdida de libertad para los nefitas. Envió un ejército, dirigido por un hombre llamado Teáncum, para detener al pueblo de Moriantón. El ejército de Teáncum evitó que el pueblo de Moriantón llegara a su destino, y Moriantón fue muerto. El resto del pueblo de Moriantón hizo “convenio de guardar la paz” (Alma 50:36). Poco después de la rebelión de Moriantón, surgió entre el pueblo de Nefi una peligrosa división en cuestión de política. Algunos de los nefitas querían destituir a Pahorán del asiento judicial y reemplazarlo con un rey. El resto del pueblo quería retener su sistema de gobierno mediante jueces.

Pida a los alumnos que escudriñen Alma 51:5–6 y que busquen los nombres de esos dos grupos antagónicos (realistas y hombres libres). Dé a los alumnos un momento para identificar en Alma 51:8 los motivos de los realistas.

Escriba en la pizarra la siguiente verdad: La división y la contención destruyen nuestra paz.

¿Cómo se demuestra ese principio en los relatos de división y contención que están registrados en Alma 50 y 51?
¿Qué podrían hacer ustedes en su familia, entre sus amigos o en su comunidad para resolver la contención?
¿Cuándo han visto que las bendiciones que se derivan de la unidad fortalezcan a una familia, a un quórum o a una clase?

Testifique de las verdades que se sienta inspirado a recalcar. Recuerde a los alumnos que en las próximas lecciones recibirán más oportunidades de identificar principios y de aprender lecciones de las guerras entre los nefitas y los lamanitas.