Moroni 4–5

Introducción

Moroni registró las instrucciones del Salvador a los nefitas con respecto a la administración de la Santa Cena, incluso las oraciones que los poseedores del sacerdocio debían usar en la bendición del pan y del vino.

Sugerencias para la enseñanza

Moroni 4–5

Moroni explica cómo se debe administrar la Santa Cena

Si es posible, muestre una bandeja del pan sacramental y una bandeja del agua sacramental. (Aunque pueda ser apropiado mostrar estos artículos, no debe intentar duplicar de ninguna manera la ordenanza de la Santa Cena.) Proporcione a los alumnos un trozo de papel y pídales que escriban de memoria, tanto como puedan, una de las oraciones de la Santa Cena. Después que los alumnos hayan tenido el suficiente tiempo, explique que, como parte de su registro, Moroni incluyó estas oraciones, según las dio el Señor, para la administración de la Santa Cena. Pídales que lean Moroni 4:3 o Moroni 5:2 y verifiquen sus respuestas. Después pregunte:

Si un amigo de otra religión decidiera asistir a una reunión sacramental con ustedes, ¿cómo explicarían el significado de la Santa Cena y la importancia que tiene para ustedes?

Para ayudar a los alumnos a entender uno de los objetivos de la Santa Cena, invite a un alumno a leer Moroni 4:1–3 y a otro Moroni 5:1–2, ambos en voz alta. Invite a los alumnos a identificar las frases en Moroni 4:3 y Moroni 5:2 que explican lo que representan el agua y el pan sacramental. (Tal vez desee sugerir que los alumnos marquen estas frases en sus ejemplares de las Escrituras. Quizás desee recordar a la clase que actualmente la Iglesia usa agua en la Santa Cena en lugar de vino, según autorización mediante una revelación dada a José Smith [véase D. y C. 27:2].)

¿Qué representa el pan? (El cuerpo de Jesucristo. Véase Mateo 26:26; 3 Nefi 18:6–7.)
¿Qué representa el agua? (La sangre de Jesucristo. Véase Mateo 26:27–28; 3 Nefi 18:8–11.)
¿Por qué son importantes el cuerpo y la sangre del Salvador para nosotros? (Cuando los alumnos respondan esta pregunta, deben mencionar el sufrimiento físico y la muerte del Salvador en la cruz. Deben mencionar Su Resurrección, cuando Su cuerpo se volvió a reunir con Su espíritu tres días después de que tomó la muerte sobre Sí mismo. También deben mencionar Sus intensos sufrimiento espiritual y angustia cuando tomó nuestros pecados sobre Sí mismo, causándole que sangrara por cada poro. Debido a que Él tomó la muerte física sobre sí, todas las personas serán resucitadas. Debido a que sufrió por nuestros pecados, podemos ser perdonados cuando nos arrepentimos.)

Escriba la siguiente frase incompleta en la pizarra: Los emblemas de la Santa Cena nos ayudan a recordar… Pregunte a los alumnos cómo resumirían este importante propósito de la Santa Cena. Luego complete la verdad en la pizarra como sigue a continuación: Los emblemas de la Santa Cena nos ayudan a recordar la expiación de Jesucristo.

Invite a los alumnos a meditar sobre la siguiente pregunta que hizo el élder David B. Haight, del Quórum de los Doce Apóstoles:

“¿En qué condiciones estamos, como miembros de la Iglesia, en cuanto a recordar a nuestro Señor y Salvador, Su sacrificio y nuestra deuda hacia Él?” (“Remembering the Savior’s Atonement”, Ensign, abril de 1988, pág. 7).

¿Qué podemos hacer para centrarnos en recordar la Expiación durante la Santa Cena?
¿Qué han sentido cuando sinceramente reflexionaron sobre la expiación del Salvador durante la Santa Cena?

Después que los alumnos compartan sus pensamientos, invítelos a escribir en sus cuadernos o diarios de estudio de las Escrituras una manera en que puedan centrar sus pensamientos en la Expiación la próxima vez que tengan la oportunidad de participar en la Santa Cena. (Quizá desee pedir a unos cuantos alumnos que compartan con la clase lo que hayan escrito.)

Para ayudar a los alumnos a entender los objetivos adicionales de la Santa Cena, dibuje el siguiente cuadro en la pizarra antes de la clase, sin poner las respuestas entre paréntesis. Invite a los alumnos a copiar el cuadro en el cuaderno o diario de estudio de las Escrituras.

Lo que hago convenio de hacer	Lo que creo que significa cumplir con esta parte de mi convenio	Lo que puedo hacer para cumplir con mi parte del convenio
(Estar dispuesto a tomar sobre mí el nombre del Señor)
(Recordarle siempre)
(Guardar Sus mandamientos)

Recuerde a los alumnos que cuando participamos de la Santa Cena, hacemos convenios o acuerdos sagrados con Dios. Pida a los alumnos que repasen Moroni 4:3 en silencio. En la primera columna del cuadro haga que escriban las tres promesas que hacen cuando participan de la Santa Cena. Pídales que verifiquen sus respuestas con alguien que se encuentre cerca de ellos. Luego invítelos a que llenen la segunda columna individualmente. Después de haberles dado suficiente tiempo, pida a unos cuantos alumnos que compartan lo que hayan escrito. A medida que los alumnos compartan lo que han escrito, use algunos o todos de los siguientes materiales para ayudarlos a profundizar su entendimiento de cada porción del convenio.

Para ayudar a los alumnos a entender mejor lo que significa tomar sobre sí el nombre de Jesucristo, invítelos a leer la siguiente declaración del presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia:

“Prometemos tomar Su nombre sobre nosotros, lo cual significa que debemos considerarnos Suyos; que le daremos a Él el primer lugar en nuestra vida; y que querremos lo que Él quiera en vez de lo que nosotros deseemos o lo que el mundo nos enseña a desear” (véase “Seamos uno”, Liahona, septiembre de 2008, pág. 5).

Explique que cuando declaramos nuestro deseo de tomar sobre nosotros el nombre de Jesucristo, nos comprometemos a vivir como Sus discípulos. Prometemos que no traeremos vergüenza o culpa sobre Su nombre. Nos comprometemos a servirlo a Él y a nuestros semejantes. También demostramos que deseamos que se nos identifique con Él y con Su Iglesia.

¿Cómo han intentado mostrar su deseo de tomar sobre sí el nombre del Señor sobre ustedes? ¿Qué efecto ha tenido eso en su vida?

Invite a los alumnos a comparar la oración del pan en Moroni 4:3 con la oración del vino en Moroni 5:2. Pregúnteles qué diferencias y similitudes reconocen. Señale que la promesa de “recordarle siempre” aparece en ambas oraciones.

¿Qué creen que significa “recordarle siempre”?

Invite a un alumno que lea la siguiente declaración del élder D. Todd Christofferson, del Quórum de los Doce Apóstoles. Pida a la clase que escuche e identifique lo que podemos hacer para ayudarnos a recordar siempre al Salvador.

“Primero debemos ubicar las cosas que hacen posible que siempre lo recordemos: la oración y el estudio de las Escrituras de forma frecuente, el estudio concienzudo de las enseñanzas apostólicas, la preparación durante la semana para participar dignamente de la Santa Cena, la adoración dominical, y el dejar registrado y recordar lo que el Espíritu y la experiencia nos enseñan acerca del discipulado.

“Quizá se les ocurran otras cosas que sean especialmente apropiadas para la etapa de la vida en la que ustedes se encuentren…

“Puedo atestiguar que, con el tiempo, nuestro deseo y nuestra capacidad de siempre recordar y seguir al Salvador aumentarán. Debemos esforzarnos con paciencia para lograr ese fin y orar siempre por el discernimiento y la ayuda divina que necesitemos” (véase “Recordarle siempre”, Liahona, abril de 2011, pág. 20).

¿Qué han hecho para “recordarle siempre”?
¿En qué forma el recordar siempre al Salvador nos ayuda a mantener las otras partes de nuestro convenio?
¿Por qué creen que es importante para nosotros participar de la Santa Cena semanalmente?

Para hacer hincapié en nuestra promesa de guardar los mandamientos, invite a un alumno a leer las siguientes declaraciones de Para la Fortaleza de la Juventud:

“El Padre Celestial te ha dado el albedrío, la habilidad de elegir entre el bien y el mal, y de actuar por ti mismo. Después de la dádiva de la vida misma, el derecho de dirigirla es uno de los dones más grandes que Dios te ha dado. Mientras estés en la tierra, se te probará para ver si utilizarás tu albedrío para demostrar tu amor por Dios al guardar Sus mandamientos” (Para la Fortaleza de la Juventud, 2011, pág. 2).

¿Qué hacen cada día para ayudarse a ustedes mismos a guardar los mandamientos de Dios?

Después que los alumnos hayan analizado las promesas que renovamos mediante la Santa Cena cada semana, pídales que escriban en la tercera columna del cuadro una cosa que harán durante la semana para guardar mejor cada parte del convenio. Invítelos a compartir algunas de sus ideas (pero asegúrese de que entiendan que no deben compartir nada que sea muy personal o privado).

Explique que cuando guardamos los convenios que hacemos con el Señor, Él nos promete bendecirnos (véase D. y C. 82:10). Invite a los alumnos a escudriñar Moroni 4:3 y Moroni 5:2, y que busquen lo que el Señor nos promete si guardamos las promesas que renovamos cuando participamos de la Santa Cena. Escriba la siguiente declaración incompleta sobre la pizarra bajo la gráfica: Cuando fielmente guardamos los convenios de la Santa Cena… Invite a los alumnos a completar la declaración en la pizarra basándose en lo que aprendieron de Moroni 4:3 y Moroni 5:2. (Una manera de completar la declaración sería así: Cuando fielmente guardamos los convenios de la Santa Cena, podemos tener siempre el Espíritu del Señor con nosotros.)

¿Por qué vale la pena que nos esforcemos por guardar este convenio para recibir esta promesa de que el Espíritu esté siempre con nosotros?

Pida a un alumno que lea la siguiente declaración del élder David A. Bednar, del Quórum de los Doce Apóstoles. Pida a la clase que escuche para determinar lo que el Espíritu puede hacer por nosotros.

“El Espíritu del Señor será nuestra guía y nos bendecirá con dirección, instrucción y protección espiritual a la largo de nuestro trayecto terrenal” (“Para que siempre podamos tener Su Espíritu con nosotros”, Liahona, mayo de 2006, pág. 31).

¿En qué ocasiones han recibido guía, dirección, instrucción o protección debido a la compañía del Espíritu Santo? (Además de pedir a los alumnos que compartan experiencias, quizás quiera compartir una experiencia propia.)
Cada semana durante la Santa Cena, tenemos la oportunidad de considerar qué tan bien guardamos el convenio que se describe en las oraciones de la Santa Cena. ¿Cómo puede ayudarnos eso en nuestros esfuerzos por siempre tener el Espíritu con nosotros?
Al meditar sobre lo que han aprendido hoy en cuanto a tomar la Santa Cena, ¿qué parte de las oraciones sacramentales es especialmente significativa para ustedes? ¿Por qué?

Aliente a los alumnos a meditar sobre la expiación del Salvador cuando tomen la Santa Cena. Invítelos a repasar sus cuadros y a poner en práctica sus ideas para guardar los convenios de la Santa Cena más plenamente. Recuerde a los alumnos lo que el Señor nos promete cuando guardamos este convenio: siempre tendremos Su Espíritu con nosotros. Testifique de las bendiciones que vendrán a nuestra vida al recordar y guardar los convenios que hacemos cada semana cuando participamos de la Santa Cena.

Repaso del dominio de las Escrituras

Quizás desee programar un examen final de dominio de las Escrituras o una actividad de repaso para ayudar a los alumnos a consolidar el dominio de los pasajes seleccionados del Libro de Mormón. Decida cómo le gustaría comprobar su conocimiento y planee una actividad que cumpla con ese objetivo. Podría crear un examen de concordancia o de llenar espacios con referencias y palabras clave o situaciones, o podría evaluar a los alumnos sobre qué tan bien han memorizado ciertos pasajes. Otra opción sería asignar a cada alumno que enseñe una lección breve o que dé un discurso usando los pasajes de dominio de las Escrituras como la fuente principal. Cualquiera sea la forma en que decida terminar la experiencia del dominio de las Escrituras, proporcione a los alumnos tiempo para estudiar y prepararse. La duración de la lección de hoy podría proporcionar tiempo para comenzar con esa preparación.