Alma 56–58

Introducción

Helamán y el capitán Moroni pelearon contra los lamanitas en diferentes partes del territorio. Helamán le envió una epístola a Moroni describiéndole sus batallas con los lamanitas y expresando su confianza en la fe de los 2.060 jóvenes guerreros que se habían unido a su ejército. Helamán también describió lo que su ejército hizo para salir victorioso en batalla y recibir esperanza y fortaleza durante sus aflicciones.

Sugerencias para la enseñanza

Alma 56

Los ejércitos de Antipus y de Helamán salieron victoriosos contra el ejército más poderoso de los lamanitas

Pregunte a los alumnos si alguna vez recibieron una carta o mensaje que los haya fortalecido para soportar una dificultad en particular. Explique que Alma 56–58 comprende el contenido de una epístola o carta que Helamán escribió al capitán Moroni durante un momento difícil de la guerra. Invite a los alumnos a leer en silencio Alma 59:1–2 para saber cómo contestó a esa carta el capitán Moroni. Aliente a los alumnos a estudiar la carta y a determinar las razones por las cuales el capitán Moroni podía regocijarse a pesar de las circunstancias difíciles en que se encontraba.

Resuma Alma 56:2–17; para eso, explique que Helamán dirigió a un pequeño ejército que consistía de 2.000 de los hijos de los anti-nefi-lehitas, o el pueblo de Ammón. A esos soldados se les llama muchas veces los 2.000 jóvenes guerreros . Los padres de estos jóvenes habían hecho convenio de no tomar las armas nuevamente, pero los jóvenes, que no estaban ligados por el mismo convenio, se ofrecieron voluntariamente para defender a sus padres y demás nefitas cuando fueran amenazados por el ejército lamanita.

Explique que Helamán guió a los 2.000 jóvenes guerreros a la ciudad de Judea para ayudar al ejército nefita guiado por Antipus. Los lamanitas habían capturado varias ciudades nefitas y habían reducido en gran forma al ejército de Antipus, quien se regocijó cuando Helamán y sus soldados llegaron para ayudarlo.

Invite a los alumnos a leer en voz baja Alma 53:17–21 y buscar las palabras o frases que describan la fortaleza espiritual que esos jóvenes aportaron al ejército. A medida que ellos lean, copie el siguiente diagrama en la pizarra. Invite a varios alumnos a acercarse a la pizarra y a escribir bajo “Antes de la batalla” las palabras y las frases que hayan encontrado.

¿Qué piensan que Helamán quiso decir cuando describió a los 2.000 jóvenes guerreros como “hombres verídicos y serios”? (Quizás desee explicar que la palabra serio significa también calmado y con autocontrol.)
¿De qué modo las cualidades anotadas en la pizarra nos ayudan a afrontar las batallas espirituales y otras dificultades?

Resuma brevemente el comienzo de la primera batalla de los jóvenes guerreros que se encuentra en Alma 56:29–43. Antipus utilizó a Helamán y a sus 2.000 guerreros como señuelos para sacar al ejército más poderoso de los lamanitas fuera de la ciudad de Antipara. La mayoría del ejército lamanita dejó Antipara para ir detrás del ejército de Helamán, dándole así la oportunidad al ejército de Antipus de seguirlos y atacarlos por detrás. Cuando el ejército de Antipus alcanzó al de los lamanitas, los atacaron de acuerdo con el plan. Cuando el ejército lamanita hizo un alto en su persecución del ejército de Helamán, éste no sabía si los lamanitas estaban tratando de llevar a sus guerreros a una trampa o si Antipus los había alcanzado y estaba peleando contra ellos por la retaguardia. Helamán y sus jóvenes soldados tuvieron que decidir si seguir huyendo o atacar a los lamanitas.

Invite a los alumnos a leer en silencio Alma 56:44–48. Pídales que busquen palabras o frases que demuestren evidencias de cómo esos jóvenes actuaron con fe. Invite a algunos alumnos a escribir lo que hayan encontrado en la pizarra, bajo el título “Durante la batalla”.

¿Qué fue lo que esos jóvenes no dudaron? (Qué Dios los libraría.)
¿Por qué ellos no tenían ninguna duda de que Dios los libraría?
¿De qué modo esas cualidades que cultivaron con antelación los ayudaron durante la batalla?

Escriba el siguiente concepto en la pizarra: Cuando actuamos por medio de la fe recibimos fortaleza de Dios. Invite a los alumnos a buscar evidencia de esa veracidad o concepto a medida que estudien Alma 56.

Con el fin de resumir Alma 56:49–53 explique que el ejército de Helamán encontró al de Antipus en una situación sumamente difícil. Antipus y muchos de los demás líderes del ejército habían muerto y los nefitas, fatigados y confusos, estaban por darse por vencidos.

Pida a un alumno que lea Alma 56:54–56 en voz alta. Pida a la clase que siga la lectura para saber cómo bendijo Dios a los guerreros de Helamán debido a la fe que ellos poseían.

¿Por qué creen que los atributos espirituales anotados en la pizarra contribuyeron a los acontecimientos registrados en Alma 56:56?
Ustedes o alguien que conocen, ¿han actuado con fe y recibido entonces la fortaleza de Dios en alguna situación difícil?

Alma 57

Helamán y sus jóvenes guerreros recuperaron la ciudad de Cumeni y fueron protegidos durante la batalla

Explique que Alma 57 es una continuación de la carta que Helamán le escribió al capitán Moroni, la que comienza con un relato de la recaptura por los nefitas de dos ciudades que habían tomado los lamanitas. Durante esa época, Helamán recibió 6.000 hombres para reforzar su ejército, junto con 60 hijos más del pueblo de Ammón. Los lamanitas también recibieron refuerzos y siguieron fortificando las ciudades que habían capturado.

Explíqueles que durante una batalla, los lamanitas estuvieron a punto de vencer a los nefitas (véase Alma 57:18). Invite a los alumnos a leer en silencio Alma 57:19–22 y a buscar las razones por las cuales los nefitas pudieron salir victoriosos.

¿Por qué los nefitas pudieron vencer a los lamanitas?
Helamán dijo que sus guerreros “obedecieron y procuraron cumplir con exactitud toda orden” (Alma 57:21). ¿Qué creen que significa eso? ¿Por qué esa obediencia fue una expresión de su fe?

Para complementar las respuestas de los alumnos a esas preguntas, lea la siguiente cita del élder Russell M. Nelson, del Quórum de los Doce Apóstoles:

“Se encontrarán con personas que escogerán cuáles mandamientos guardarán y que ignorarán otros que han escogido desobedecer. A ese enfoque, lo llamo el ‘buffet de la obediencia’. Esa práctica de seleccionar y escoger cuáles obedecer no funcionará; los conducirá al sufrimiento. Al prepararse para comparecer ante Dios, uno guarda todos Sus mandamientos. Requiere fe el obedecerlos, y el guardar Sus mandamientos fortalecerá esa fe” (“Afrontar el futuro con fe”, Liahona, mayo de 2011, pág. 34).

Pida a un alumno que lea Alma 57:23–27 en voz alta. Pida a la clase que se fije en cómo preservó el Señor a los jóvenes soldados de Helamán y por qué lo hizo. Para ayudarlos a analizar lo que hayan encontrado, formule las siguientes preguntas de seguimiento:

De sus guerreros, Helamán dijo: “sus mentes son firmes”. ¿Qué creen que significa eso? ¿Por qué debemos mantener nuestra mente firme al afrontar dificultades?
¿Cómo demostraron los soldados de Helamán que ellos ponían “su confianza en Dios continuamente”?

Sería útil que les explicara que en algunas ocasiones, los justos deben sufrir o morir, como pasó con el sufrimiento de los jóvenes guerreros y la muerte de algunos del ejército nefita. Sin embargo, Dios siempre honrará a quienes le honran a Él, y los justos que mueren serán bendecidos.

¿Qué semejanzas ven entre las batallas de los jóvenes guerreros con sus enemigos y nuestras batallas con el adversario?

Pida a uno de los alumnos que lea la siguiente declaración del élder M. Russell Ballard, del Quórum de los Doce Apóstoles:

“En la actualidad estamos peleando una batalla que en muchos aspectos es más… peligrosa que la batalla que se libró entre nefitas y lamanitas. Nuestro enemigo es astuto y hábil. Estamos peleando contra Lucifer, el padre de todas las mentiras, el enemigo de todo lo que es bueno, correcto y santo…

“…Nuestra lucha es literalmente por las almas de los hombres. El enemigo es implacable y despiadado. Está tomando prisioneros eternos a un ritmo alarmante, y no hay señales de que esté aminorando sus esfuerzos.

“Si bien estamos profundamente agradecidos por los muchos miembros de la Iglesia que hacen grandes cosas en la batalla por la verdad y el bien, debo decirles honradamente que no es suficiente. Necesitamos mucha más ayuda … Les necesitamos. Al igual que los 2.000 jóvenes guerreros de Helamán, ustedes también son hijos espirituales de Dios y pueden ser investidos con poder para edificar y defender Su reino. Necesitamos que hagan convenios sagrados, así como ellos lo hicieron. Necesitamos que sean meticulosamente obedientes y fieles, tal como ellos lo fueron”, (“La generación más grandiosa de misioneros”, Liahona, noviembre de 2002, págs. 46–47).

Escriba lo siguiente en la pizarra: Si confiamos en el Señor y lo obedecemos con exactitud…

De acuerdo con lo que han leído sobre los guerreros de Helamán, ¿cómo terminarían esa frase? (Termine la frase que se encuentra en la pizarra de acuerdo con las sugerencias de los alumnos. Por ejemplo, podría escribir la siguiente verdad: Si confiamos en el Señor y le obedecemos exactamente, Él nos ayudará en nuestras batallas.

Pida a los alumnos que piensen en alguna ocasión en que ellos o alguien que conozcan obedeció con exactitud durante una situación difícil ya sea donde estudian, en casa o en un ambiente social. Invite a algunos alumnos a compartir sus experiencias. Pregúnteles cómo los ayudó el Señor en esa situación.

Conceda tiempo a los alumnos para que escriban en sus cuadernos de apuntes o en sus diarios de estudio de las Escrituras sobre lo que hayan hecho para obedecer los mandamientos de Dios “con exactitud” (Alma 57:21) y poner “su confianza en Dios continuamente” (Alma 57:27).

Alma 58

Los soldados nefitas confiaron en que Dios los libraría de la adversidad

Explique que Alma 58 contiene el final de la epístola que Helamán le escribió a Moroni. Helamán relató cómo los ejércitos nefitas afrontaron circunstancias difíciles que complicaron las condiciones adversas que ya tenían. Invite a unos pocos alumnos a leer por turno en voz alta Alma 58:2, 6–9, y pida a la clase que determine esas circunstancias difíciles (la falta de víveres, de refuerzos, el temor de ser destruidos por sus enemigos).

Pida a los alumnos que lean Alma 58:10–12 en silencio y busquen las respuestas a las preguntas siguientes. (Escriba las preguntas en la pizarra antes de comenzar la clase. Lea las preguntas a la clase antes de que lean el pasaje de las Escrituras y después repásenlas después de haber leído. Eso ayudará a que los alumnos se concentren en cómo el ejército de Helamán reaccionó ante esa difícil situación.)

¿Qué hicieron los nefitas cuando afrontaron esa difícil situación?

¿De qué modo respondió el Señor ante ese pedido y oración?

¿Como la seguridad que les brindó el Señor ayudó a Helamán y a su ejército?

Invite a los alumnos a resumir un principio que hayan aprendido en Alma 58:10–12. (Aun cuando los alumnos utilicen palabras diferentes, asegúrese de que indiquen el siguiente principio: Si buscamos la ayuda de Dios en tiempos de dificultad, podemos recibir la seguridad divina que fortalecerá nuestra fe y nos brindará esperanza.)

¿Cuándo los ha bendecido el Señor con paz y seguridad durante una experiencia difícil?

Explique que el resto de Alma 58 relata el éxito del ejército nefita por haber recuperado las ciudades que los lamanitas les habían quitado (véase Alma 58:31). Pida a un alumno que lea Alma 58:39–40 en voz alta.

¿De qué modo demostraron los jóvenes guerreros de Helamán su fe en Dios, a pesar de haber recibido “muchas heridas”?
Al afrontar tribulaciones, ¿cómo se pueden beneficiar de los siguientes ejemplos de los hijos de Helamán?

Para terminar, dé su testimonio de los principios que enseñó durante esta lección.