Unidad 9: Día 4
En Ohio
Introducción
A finales de enero de 1831, el profeta José Smith y su esposa Emma, Sidney Rigdon y Edward Partridge partieron del estado de Nueva York rumbo a Ohio. La mayor parte de los miembros de la Iglesia del estado de Nueva York los siguieron en los cinco meses subsiguientes.
Esos santos que se congregaron en Ohio fueron bendecidos grandemente. Las continuas revelaciones que recibieron a través del profeta José Smith ampliaron su comprensión del evangelio de Jesucristo. Recibieron, además, las bendiciones que vienen de construir un templo y de predicar el Evangelio. En tanto que la cantidad de miembros de la Iglesia crecía y estos se fortalecían espiritualmente en Ohio, también aumentó la oposición en contra de la Iglesia y de sus líderes. Finalmente, en enero de 1838, muchos miembros de la Iglesia tuvieron que huir de Ohio y juntarse con los santos que vivían en Misuri. Esta lección te dará una visión general de las experiencias de los santos en Ohio. En otras lecciones más adelante aprenderás más detalles acerca de estos acontecimientos y enseñanzas.
El Señor manda a los santos que se congreguen en Ohio para recibir las bendiciones prometidas
¿Alguna vez te has mudado o se ha mudado alguien de tu familia a una nueva casa? ¿Qué tipo de dificultades tuvieron al mudarse? ¿Qué bendiciones recibieron como resultado del cambio?
Los motivos para mudarse pueden ser muchos, pero las personas usualmente hacen el sacrificio de mudarse a otro lugar porque esperan que la vida sea mejor en el nuevo sitio.
Recuerda lo que estudiaste en Doctrina y Convenios 37–38 acerca de los acontecimientos relacionados con el mandamiento del Señor a los santos de salir del estado de Nueva York y trasladarse a Ohio. Cuando el Señor les mandó congregarse en Ohio, les prometió que allí recibirían bendiciones específicas.
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Copia el siguiente cuadro en tu diario de estudio de las Escrituras.
Promesas
a.
b.
c.
d.
e.
f.
Lee Doctrina y Convenios 38:31–32, y anota en la columna “Promesas”, junto a los incisos a al d, las cuatro bendiciones que el Señor dijo que los santos recibirían cuando llegaran a Ohio.
Lee Doctrina y Convenios 38:33, y anota como respuesta al inciso e en la tabla, a dónde dijo el Señor que enviaría misioneros.
Poco después de llegar José Smith a Ohio, recibió la revelación que se encuentra en Doctrina y Convenios 42. Echa un vistazo a Doctrina y Convenios 42:61, y busca la promesa adicional que dio el Señor. Escribe “recibirás revelación tras revelación” como respuesta junto al inciso f en la tabla.
En las cuatro secciones siguientes de esta lección, aprenderás más acerca de la manera en que el Señor cumplió esas promesas mientras Su pueblo se congregaba en Ohio entre 1831 y 1838.
“Os daré mi ley” (D. y C. 38:32)
El Señor prometió que cuando los santos se congregaran en Ohio, Él les daría Su ley. ¿Por qué son importantes las leyes? ¿Por qué crees que las leyes son importantes en la Iglesia del Señor?
Lee la introducción a Doctrina y Convenios 42. Después que los santos llegaron a Ohio en 1831, el Señor cumplió Su promesa y dio una revelación que se designa como la ley de la Iglesia. Esta ley abarca mandamientos e instrucciones para dirigir las funciones de la Iglesia.
Lee el resumen de Doctrina y Convenios 42, y busca algunas de las leyes y mandamientos que el Señor dio a los santos. (El resumen de la sección está ubicado antes del primer versículo. Indica los números de los versículos y da un breve resumen de esos versículos). Conforme vayas leyendo, podrías marcar la frase “Se indican las leyes que rigen la consagración de bienes”.
En esta revelación, el Señor dio la ley de consagración. Esta ley “es un principio divino por el cual hombres y mujeres dedican voluntariamente su tiempo, su talento o habilidades y sus bienes materiales al establecimiento y la edificación del Reino de Dios” (véase Guía para el Estudio de las Escrituras, “Consagrar, Ley de Consagración”, escrituras.lds.org). Se mandó a los líderes de la Iglesia establecer la Firma Unida (también llamada Orden Unida) para administrar los asuntos temporales o los intereses comerciales, para asistir a los pobres y ayudar a eliminar la codicia entre los santos. Esto fue una bendición para los santos en ese entonces, ya que muchos de los santos que venían de Nueva York se vieron obligados a abandonar su hogar y sus propiedades. La Firma Unida también aportó fondos para financiar varias operaciones de la Iglesia, tales como la obra misional y la publicación de las revelaciones. En próximas lecciones, aprenderás más acerca de la ley de consagración y su efecto sobre los santos.
“Seréis investidos con poder de lo alto” (D. y C. 38:32)
El Señor prometió también investir a los santos “con poder de lo alto” cuando llegaran a Ohio (D. y C. 38:32). La investidura es un don. Lee Doctrina y Convenios 88:119 y busca el mandamiento que el Señor dio a los santos en Ohio. La “casa” a la que se hace referencia en este versículo era un templo. El Templo de Kirtland, en Kirtland, Ohio, fue el primer templo que se construyó en esta dispensación. Lee Doctrina y Convenios 95:8 y busca con qué dijo el Señor que los iba a investir en el templo.
El Templo de Kirtland se construyó en unos tres años. Tras su dedicación en 1836, el Señor comenzó a cumplir Su promesa de investir a los santos con poder, y estos recibieron maravillosas bendiciones espirituales. Por ejemplo, el Señor envió a tres mensajeros celestiales al Templo de Kirtland —Moisés, Elías y Elías el profeta— para restaurar llaves esenciales del sacerdocio a la tierra. Mediante esas llaves se confería a los santos la autoridad para efectuar las ordenanzas del templo y sellar por la eternidad a las familias tanto de vivos como de muertos. También se restauraron en esa ocasión “las llaves del recogimiento de Israel” (D. y C. 110:11). Mediante esas llaves se confiere poder a los misioneros para enseñar el Evangelio por toda la tierra.
“Irán a todas las naciones” (D. y C. 38:33)
Una vez que se dedicó el Templo de Kirtland y se restauraron las llaves del recogimiento de Israel, empezó a predicarse el evangelio de Jesucristo en más lugares. Consulta el Mapa 10, “Parte de los estados de Nueva York y de Ohio, EE. UU.”, que se halla al final de la combinación triple, en la sección de mapas. Repara en el hecho de que Kirtland, Ohio, estaba situada en una ubicación ideal para comenzar a enviar misioneros por todo el mundo para enseñar el Evangelio “a todas las naciones” (D. y C. 38:33). Kirtland quedaba cerca de varias rutas principales de transporte de los Estados Unidos. Desde Kirtland, los misioneros solo tenían que viajar cortas distancias para abordar barcos de vapor que navegaban por los principales ríos de EE. UU. y por el lago Erie. También tenían acceso a una red nacional de caminos hacia el sur y al sistema de canales al norte. A causa de esto, Kirtland fue el punto de partida hacia misiones en Canadá, otras regiones de los Estados Unidos y Gran Bretaña.
Gracias a la obra misional de ese período, hubo miles de nuevos miembros de la Iglesia en el mundo. En 1837, los élderes Heber C. Kimball y Orson Hyde, junto con otros cinco hermanos, fueron llamados a una misión en Gran Bretaña, donde bautizaron a alrededor de 2000 personas. En 1838, cuando los santos abandonaron Kirtland por causa de la persecución, había unos 2000 miembros de la Iglesia viviendo en Kirtland de los casi 18 000 miembros en todo el mundo.
“Recibirás revelación tras revelación” (D. y C. 42:61)
Consulta la tabla cronológica del contenido de Doctrina y Convenios (ubicada después de la Introducción) y fíjate en el lugar donde se recibió la mayor parte de las revelaciones.
Como podrás observar, se recibieron más revelaciones en Ohio que en ningún otro lugar. Se cumplió la promesa del Señor de que los santos recibirían revelación tras revelación cuando se congregaran en Ohio.
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Mientras los santos vivían en Ohio, el Señor también instruyó al profeta José Smith que organizara el liderazgo de la Iglesia. En ese período se organizaron oficialmente la Primera Presidencia, el Cuórum de los Doce Apóstoles y el Cuórum de los Setenta. Además, en esa misma época, José Smith continuó su trabajo con la traducción de la Biblia.
La oposición y la apostasía afligen a los fieles en Ohio
En tanto el Señor bendecía a los santos en Ohio, también crecía la oposición en contra de la Iglesia. Tan pronto llegaron los santos a Kirtland, opositores antimormones comenzaron a atacar a la Iglesia. Muchos de los ataques constaban de artículos y relatos difamatorios en los periódicos.
El profeta José Smith dijo lo siguiente sobre esas publicaciones: “Se publicaron en los periódicos muchos informes falsos, mentiras e historias disparatadas, que circularon en todas las direcciones con el fin de evitar que las personas investigasen la obra y abrazaran la fe” (en History of the Church, tomo I, pág. 158).
A pesar de esas y otras dificultades, continuó el recogimiento de los santos en Kirtland, particularmente entre 1836 y 1838. En 1836, José Smith sintió el peso de la deuda debido a los costos de construcción del Templo de Kirtland. Aunque la Iglesia poseía una cantidad considerable de tierras, también necesitaba dinero en efectivo para cancelar las obligaciones pendientes. Debido a las necesidades financieras de la Iglesia y al crecimiento de la población en Kirtland, los líderes de la Iglesia planearon establecer un banco local. Su solicitud fue denegada por los órganos legislativos del estado de Ohio. En lugar de establecer un banco, los santos formaron una compañía llamada la Sociedad de Seguridad de Kirtland, que funcionaba como un banco.
En 1837, cundió un pánico económico por todos los Estados Unidos. En todo el país se sintió el efecto del pánico y varios bancos quebraron. Además, algunos de los que administraban la Sociedad de Seguridad de Kirtland no fueron honestos en sus tratos, y esta se vio obligada a cerrar; cientos de personas que habían invertido en ella perdieron casi todo el capital que habían aportado. Las pérdidas de José Smith fueron mayores que las de todos los demás. Muchos santos acusaron al Profeta de ser responsable de los problemas financieros y se presentaron varias demandas legales. Los líderes de la Iglesia que ayudaron a crear la Sociedad de Seguridad de Kirtland se habían equivocado al creer que las personas tenían el derecho legal de organizar una compañía privada que pudiera participar en la actividad bancaria, y se falló en su contra con una multa de $1000 por haber violado las leyes bancarias de Ohio.
Esas difíciles circunstancias llevaron a varios miembros de la Iglesia a apostatar. La persecución se hizo tan intensa en el invierno de 1837 y en la primavera de 1838, que la mayoría de los santos se vieron forzados a salir de Ohio. Algunos líderes de la Iglesia, entre ellos José Smith, Sidney Rigdon y Brigham Young, tuvieron que huir de Kirtland para preservar su vida.
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He estudiado la lección “En Ohio” y la he terminado el (fecha).
Preguntas adicionales, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con mi maestro: