Unidad 21: Día 3
Doctrina y Convenios 101:1–16
Introducción
Entre el 16 y el 17 de diciembre de 1833, el profeta José Smith recibió una revelación concerniente a las aflicciones que estaban sufriendo los santos en Misuri. Esa revelación, registrada en Doctrina y Convenios 101, se estudiará en tres lecciones. La primera incluye la explicación del Señor de por qué permitió que los santos fueran afligidos. Incluye también Sus palabras de consejo y consuelo a los santos afligidos.
Doctrina y Convenios 101:1–8
El Señor explica por qué permite que Su pueblo experimente pruebas
De lo que aprendiste en tu estudio de Doctrina y Convenios 98, indica cuáles de las siguientes dificultades vivieron los santos en el condado de Jackson, Misuri, en julio de 1833. Puedes consultar la lección del día 1 para ayudarte a recordar.
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La imprenta de los santos fue destruida. | |
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La tienda de Sidney Gilbert fue demolida y robaron los víveres. | |
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Muchas de las casas y los cultivos de los santos fueron quemados. | |
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Dos de los santos, Edward Partridge y Charles Allen, fueron embadurnados de brea y cubiertos de plumas en una plaza pública. |
Debido a la violencia del populacho en el condado de Jackson, Misuri, en julio de 1833, los líderes de la Iglesia accedieron a abandonar el condado. Sin embargo, en agosto de 1833, el profeta José Smith aconsejó a los santos que no vendieran ninguna de sus tierras allí. Los líderes de la Iglesia hicieron peticiones al Gobierno y emplearon las vías legales para conservar sus tierras en Misuri y buscar que se aplicara la justicia a los responsables de los actos violentos. Al enterarse de esas acciones, y creyendo que los santos no planeaban salir de allí, como esperaban, los residentes antimormones del lugar atacaron a los santos nuevamente. La noche del 31 de octubre de 1833, un populacho de unos cincuenta hombres a caballo asaltaron el asentamiento Whitmer, al oeste de Independence. Derribaron el techo de 13 viviendas y azotaron a varios hombres, hasta casi asesinarlos. Los ataques continuaron por dos noches más en Independence y en otros lugares en los que vivían los santos. Golpeaban a los hombres y aterrorizaban a las mujeres y a los niños. Más de un millar de santos fueron expulsados de sus hogares en el condado de Jackson.
¿Qué piensas que se preguntaban los santos en Misuri en ese momento? ¿Te has preguntado alguna vez por qué el Señor permite que les sucedan cosas malas a ti y a otras personas que conoces?
Lee la introducción de Doctrina y Convenios 101 para averiguar cuándo se dio esa revelación y enterarte de otras dificultades que enfrentaban los santos de Misuri en esa época.
Mientras los santos en Misuri padecían esas dificultades, el Señor reveló verdades acerca del porqué Él permite que Su pueblo experimente aflicciones. Lee Doctrina y Convenios 101:1–2 y busca una razón por la que el Señor permitió que los santos del condado de Jackson sufrieran persecución y aflicciones.
En el versículo 2 aprendemos que cuando transgredimos los mandamientos, Dios permite que suframos.
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Responde la pregunta siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras: ¿Por qué te parece importante comprender esta verdad?
Aunque muchos de los santos de Misuri eran fieles y obedientes, ellos también sufrieron persecución. Lee Doctrina y Convenios 101:3–5 y busca una razón por la que el Señor permite que aun los santos fieles sean afligidos. Observa que la palabra disciplinar significa corregir o reprender; que la palabra probar significa poner a prueba; y que la palabra santificar significa hacer que algo o alguien sea puro y santo.
Consulta el versículo 5 para completar la siguiente declaración de verdad: Si no soportamos la disciplina, no podemos ser .
El élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó que el ser disciplinados y probados nos ayuda a ser santificados: “Además de impulsarnos al arrepentimiento, la experiencia misma de sobrellevar bien la disciplina puede perfeccionarnos y prepararnos para mayores privilegios espirituales” (“Yo reprendo y disciplino a todos los que amo”, Liahona, mayo de 2011, pág. 98).
En Doctrina y Convenios 101:4, el Señor mencionó a Abraham como un ejemplo de alguien que fue disciplinado y probado. Cuando el Señor mandó a Abraham ofrecer a su hijo Isaac como sacrificio, Abraham demostró su fidelidad y probó estar preparado para recibir grandes bendiciones espirituales (véase Génesis 22:1–18).
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De acuerdo con el versículo 7, ¿cuál es la consecuencia de ser “lentos en escuchar la voz del Señor”?
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De acuerdo con el versículo 8, ¿qué es lo que empiezan a hacer algunas personas en tiempos de dificultades? ¿Qué crees que signifique “allegarse” al Señor?
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Medita en alguna experiencia en la que te hayas sentido disciplinado y hayas buscado al Señor.
Doctrina y Convenios 101:9–16
El Señor aconseja y consuela a los santos
Cuando leas Doctrina y Convenios 101:9, busca un mensaje de esperanza que el Señor dio a los santos que estaban sufriendo en Misuri. Podrías marcar las palabras y frases que enseñan la siguiente doctrina: Aun cuando hayamos pecado, el Señor tendrá compasión de nosotros.
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En Doctrina y Convenios 101:10–11, aprendemos que aunque el Señor permitió que los santos fuesen perseguidos, Él dijo que castigaría a las personas que los oprimieron.
A medida que leas los párrafos siguientes, marca las descripciones de sufrimiento que te hubieran resultado especialmente difíciles de presenciar o sobrellevar:
El populacho en el condado de Jackson continuó atormentando a los santos hasta que todos los miembros de la Iglesia fueron expulsados del condado. Lyman Wight relató: “¡Yo vi cómo arrearon a ciento noventa mujeres y niños unos 48 km a través de la pradera, acompañados solo por tres hombres ancianos, en el mes de noviembre, y con el terreno cubierto por una delgada escarcha; y pude seguirlos con facilidad debido al rastro que dejaba la sangre que brotaba de sus lacerados pies en el rastrojo de la pradera incendiada!” (en History of the Church, tomo III, pág. 439).
La mayor parte de los santos huyó hacia el norte, donde tuvieron que cruzar el río Misuri. En ambas márgenes del río, cerca del ferry (lancha para transbordar), había filas de refugiados. Algunos tuvieron la fortuna de escapar con artículos domésticos, pero muchos lo perdieron todo. Parley P. Pratt escribió: “Hacia donde mirases, podías ver a centenares de personas, algunas en tiendas y otras a la intemperie alrededor de fogatas, mientras la lluvia descendía en torrentes. Los esposos preguntaban por su esposa, las esposas por su marido; padres por sus hijos e hijos por sus padres… La escena era indescriptible, y estoy seguro de que hubiera compungido el corazón de cualquier pueblo sobre la tierra, salvo el de nuestros siniestros opresores y el de esta comunidad ciega e ignorante” (Autobiography of Parley P. Pratt, editado por Parley P. Pratt Jr., 1938, pág. 102).
¿Cómo crees que reaccionarías si experimentaras tales aflicciones?
Lee Doctrina y Convenios 101:12–16 y fíjate en las promesas que el Señor dio a los santos justos. (Es bueno que sepas que la frase en el versículo 12, “todo mi Israel”, se refiere a las personas fieles al convenio del Evangelio).
Podrías escribir el siguiente principio en tus Escrituras junto a Doctrina y Convenios 101:16: Cuando vivimos en rectitud, podemos hallar consuelo en el conocimiento de que todas las personas están en las manos del Señor.
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En Doctrina y Convenios 101:16, ¿qué piensas que signifique el mandamiento: “quedaos tranquilos y sabed que yo soy Dios”?
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¿Cuándo has sido bendecido con paz en tiempos de dificultades?
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¿De qué forma el estar tranquilo te permite recibir consuelo del Señor?
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He estudiado Doctrina y Convenios 101:1–16 y he terminado esta lección el (fecha).
Preguntas adicionales, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con mi maestro: