Seminario
Lección 97: 2 Reyes 1–4


Lección 97

2 Reyes 1–4

Introducción

Elías el Profeta profetizó la muerte de Ocozías. Elías el Profeta fue trasladado y Eliseo tomó sobre sí el manto profético. Dado que los reyes de Israel y Judá procuraron y obedecieron el consejo de Eliseo, prevalecieron sobre el rey de Moab en la batalla. Jehová también bendijo a una viuda cuando ésta fue a Eliseo en busca de ayuda.

Sugerencias para la enseñanza

2 Reyes 1–2

Elías el Profeta es trasladado y Eliseo toma sobre sí el manto profético

Pida a los alumnos que piensen en una ocasión en que un(a) líder de la Iglesia al (a la) que ellos admiran fue relevado(a) de su llamamiento.

  • ¿Cómo se sintieron cuando esa persona fue relevada?

  • ¿Por qué a veces puede ser difícil que líderes a los que admiramos sean relevados de sus llamamientos?

  • ¿En ocasiones, qué desafíos puede suponer para nosotros aceptar a un nuevo líder?

Al estudiar 2 Reyes 1–2, invite a los alumnos a buscar verdades que puedan ayudarnos cuando los líderes de la Iglesia sean relevados.

Para resumir 2 Reyes 1, explique que el rey Acab murió y su hijo Ocozías siguió las inicuas sendas de su padre. Tras resultar herido a causa de una caída, Ocozías buscó el consejo de un dios falso. En respuesta, Jehová envió a Elías el Profeta a decirle a Ocozías que no se recuperaría de sus heridas y que moriría. Esto sucedió cerca del final del ministerio de Elías el Profeta.

Explique que Eliseo, quien había servido junto Elías el Profeta, admiraba a su líder. Agrupe a los alumnos de dos en dos, e invite a cada compañerismo a leer 2 Reyes 2:1–6 en voz alta. Pida a un alumno de cada compañerismo que busque lo que Elías el Profeta le pedía a Eliseo cada vez que Jehová mandaba a Elías que viajara a otro lugar. Pida al otro alumno de cada grupo de dos que busque cuáles fueron las respuestas de Eliseo. Cuando haya transcurrido suficiente tiempo, haga las siguientes preguntas a la clase:

  • ¿Qué le pidió Elías el Profeta a Eliseo en tres ocasiones?

  • ¿Qué le dijo Eliseo a Elías el Profeta en tres ocasiones?

  • ¿Qué nos enseñan las respuestas de Eliseo acerca de seguir al profeta?

Invite a algunos alumnos a tomar turnos para leer en voz alta 2 Reyes 2:7–10, y a la clase a seguir la lectura en silencio para saber lo que Elías el Profeta le pidió a Eliseo después de cruzar el río Jordán. (Tal vez sea necesario explicar que los “hijos de los profetas” eran grupos de discípulos que se reunían para adorar a Jehová y recibir instrucción bajo la dirección de los profetas [véase Bible Dictionary, “Schools of the Prophets”]. Si es necesario, explique que un manto es una capa.)

  • ¿Qué le pidió Elías el Profeta a Eliseo después de cruzar el río Jordán?

  • ¿Qué deseó Eliseo de Elías el Profeta? (Explique que el pedir una doble porción del espíritu de Elías el Profeta respondía, en esencia, al deseo de heredar los dones espirituales que ayudarían a Eliseo a continuar con el ministerio profético.)

  • ¿Cómo dijo Elías el Profeta a Eliseo que sabría si su petición había sido concedida?

Invite a algunos alumnos a tomar turnos para leer en voz alta 2 Reyes 2:11–14, y a la clase a seguir la lectura en silencio para descubrir lo que sucedió a continuación.

  • ¿Qué le sucedió a Elías el Profeta? (Tal vez sea necesario explicar que Elías fue llevado de esta Tierra como un ser trasladado.)

  • ¿Qué hizo Eliseo que lo ayudó a cruzar el río Jordán? (Eliseo pidió a Dios partir las aguas del mismo modo en que Elías el profeta lo había hecho anteriormente.)

  • ¿Qué creen que simbolizaba el traspaso del manto de Elías el Profeta a Eliseo? (La autoridad y el poder de un líder que pasan a otro líder. Explique que, en la actualidad, en la Iglesia a veces nos referimos al llamamiento, autoridad y responsabilidades de un líder como su “manto”.)

  • ¿Qué verdad aprendemos de estos versículos acerca de lo que el Señor hará cuando llame a una persona a servirlo? (Los alumnos tal vez utilicen otras palabras, pero asegúrese de que reconozcan un principio similar al siguiente: El Señor da autoridad y poder a aquellos a quienes llama.)

Invite a varios alumnos a tomar turnos para leer en voz alta 2 Reyes 2:15–18, y a la clase a seguir la lectura en silencio para determinar cómo reaccionaron los hijos de los profetas al nuevo papel de Eliseo como profeta.

  • Aun cuando los hijos de los profetas reconocieron que el manto profético había caído sobre Eliseo, ¿qué quisieron hacer ellos?

  • ¿Cómo podría la reacción de los hijos de los profetas mostrar su falta de entendimiento acerca de la nueva función de Eliseo?

  • El entender la verdad que han aprendido en 2 Reyes 2:11–14, ¿cómo puede ayudarnos cuando los líderes de la Iglesia sean relevados y se llame a nuevos líderes?

Pida a los alumnos que expliquen cómo usarían ellos la verdad que aprendieron para ayudar a una persona que tenga dificultades para seguir a un nuevo líder de la Iglesia. Si lo desea, invite a los alumnos a compartir una ocasión en que ellos supieron que Dios había dado autoridad y poder a un nuevo líder.

Para resumir 2 Reyes 2:19–22, explique que Eliseo se enteró de que el agua en Jericó no se podía usar. Sanó las aguas para el pueblo, y lo salvó de la muerte y el hambre.

Explique que, según 2 Reyes 2:23–25,, algunos jóvenes (“no niños pequeños” [2 Reyes 2:23, nota a al pie de página]) se burlaron de Eliseo como representante de Jehová. Invite a un alumno a leer 2 Reyes 2:24 para saber lo que les pasó a esos jóvenes que se burlaron del profeta de Jehová.

2 Reyes 3

Los reyes de Israel y Judá se unen contra Moab

Invite a un alumno a leer en voz alta el siguiente resumen de 2 Reyes 3:1–10:

Después de la muerte de Ocozías, su hermano Joram se convirtió en rey de Israel. Los moabitas, que habían estado pagando tributo a Israel, se rebelaron contra Joram, quien entonces buscó la ayuda de Josafat, rey de Judá. Estos dos reyes, junto con el rey de Edom, se unieron para frenar la rebelión de los moabitas. Después de viajar juntos durante siete días, les faltó agua para los soldados y los animales.

Invite a un alumno a leer 2 Reyes 3:11–12 en voz alta, y a la clase a seguir la lectura en silencio para averiguar a quién se volvieron los reyes en busca de guía.

  • ¿A quién se volvieron los reyes en busca de guía?

Para resumir 2 Reyes 3:13–15, explique que Eliseo ayudó a los reyes.

Invite a los alumnos a leer 2 Reyes 3:16–20 en silencio para saber lo que dijo Eliseo que haría Jehová por el ejército.

  • ¿Qué dijo Eliseo que haría Jehová?

  • ¿Qué tenía que hacer el ejército?

Para resumir 2 Reyes 3:21–27, explique que, dado que el sol brillaba esa mañana en el valle sobre el agua, a los moabitas les pareció que se trataba de sangre. Los moabitas creyeron que los tres ejércitos de los reyes se habían vuelto unos contra otros y ahora estaban debilitados o habían sido destruidos. Entraron en el campamento de Israel para tomar cualquier objeto de valor que los ejércitos hubieran dejado atrás, pero en su lugar cayeron en una emboscada y fueron derrotados.

  • ¿Qué principio aprendemos de este relato acerca de lo que podemos hacer cuando necesitemos la ayuda del Señor? (Los alumnos deben mencionar un principio similar al siguiente: Si procuramos la guía de los profetas del Señor, podemos recibir Su protección de aquellas influencias que nos harían daño.)

  • ¿Cuándo han seguido ustedes las palabras de los profetas del Señor y han recibido la ayuda del Señor como resultado?

Aliente a los alumnos a estudiar las palabras de los profetas con regularidad a fin de poder invitar y recibir la ayuda del Señor en su vida.

2 Reyes 4:1–7

Eliseo multiplica el aceite de una viuda para ayudar a redimir a los hijos de ella

Entregue a cada alumno una pequeña taza y dígales que entenderán el propósito de las tazas al estudiar 2 Reyes 4.

Explique que una viuda fue a Eliseo en busca de ayuda para resolver un grave problema. Invite a un alumno a leer en voz alta 2 Reyes 4:1, y a la clase a seguir la lectura en silencio para saber cuál era la ayuda que necesitaba.

  • ¿Para qué necesitaba esta viuda la ayuda de Eliseo? (Necesitaba ayuda para salvar a sus hijos de la esclavitud como pago de una deuda.)

  • ¿Qué emociones piensan que tendría esa madre en ese momento?

  • ¿Cómo mostró ella su fe en Jehová?

Invite a un alumno a leer 2 Reyes 4:2–4 en voz alta, y a la clase a seguir la lectura en silencio para conocer las instrucciones que dio Eliseo a la viuda.

  • ¿Qué le dijo Eliseo que hiciera? ¿Cuánto aceite tenía la viuda? ¿Cuántas vasijas más le dijo Eliseo que reuniese?

Invite a un alumno a leer en voz alta 2 Reyes 4:5, y a la clase a buscar lo que hizo la viuda a continuación. Invítelos a compartir lo que encuentren.

Para ayudar a los alumnos a visualizar los acontecimientos que se encuentran en 2 Reyes 4:5–6, pida a dos alumnos que representen a los hijos de la viuda y recojan las tazas de cada miembro de la clase. Invítelos a colocar las tazas sobre la mesa, al frente del salón de clases. Sujete una taza más grande o una jarra de agua (asegúrese de que contenga menos agua de la que puede llenar las tazas que hay al frente del aula), y pregunte a la clase cuántas de esas tazas pequeñas creen ellos que se pueden llenar con el agua que hay en la jarra. Después de que los alumnos respondan, comience a llenar de agua las tazas pequeñas. Cuando se quede sin agua, pida a los alumnos que lean 2 Reyes 6:6 en silencio para determinar en qué se diferencia la demostración con el agua y las tazas de lo que pasó con el aceite de la viuda.

  • ¿Qué sucedió cuando la viuda echó todo el aceite de su único jarro en las vasijas vacías que había recogido? (De manera milagrosa, pudo llenarlas todas.)

Invite a un alumno a leer 2 Reyes 4:7 en voz alta, y a la clase a seguir la lectura en silencio para saber lo que Eliseo le dijo a la mujer después de este hecho.

  • ¿Qué dijo Eliseo que se hiciera con el aceite con el cual Jehová la había bendecido?

  • ¿Por qué creen que la viuda y sus hijos recibieron más aceite del que necesitaban para pagar sus deudas?

  • ¿Qué principio aprendemos de este relato acerca de lo que puede pasar cuando nos volvemos al Señor con fe? (Es posible que los alumnos utilicen otras palabras, pero asegúrese de que reconozcan el siguiente principio: Cuando nos volvemos al Señor con fe, Él puede bendecirnos conforme a nuestras necesidades y deseos justos.)

Pida a los alumnos que piensen en alguna ocasión en que se esforzaron por volverse al Señor cuando lo necesitaron y el Señor, en respuesta, los bendijo con lo que necesitaban o deseaban. Pida a varios alumnos que compartan sus experiencias con el resto de la clase, si no son demasiado personales o sagradas.

2 Reyes 4:8–44

Eliseo realiza milagros por el poder de Dios

Para resumir 2 Reyes 4:8–44, explique que mientras Eliseo viajaba, prometió a una mujer que tendría un hijo. Cuando más tarde ese hijo murió, Eliseo lo levantó de entre los muertos. Eliseo también purificó una olla de potaje envenenada y multiplicó los alimentos para que la gente comiera.

Testifique de las verdades que han analizado e invite a los alumnos a poner en práctica esas verdades.

Comentarios e información de contexto

2 Reyes 2:12–18. Cómo obtener un testimonio de un líder de la Iglesia recién llamado

El presidente Harold B. Lee enseñó que cuando los miembros de la Iglesia están convertidos, obtendrán un testimonio personal del llamamiento divino de los líderes de la Iglesia:

“La medida de su verdadera conversión… reside en si viven o no de manera que ven el poder de Dios sobre los líderes de esta Iglesia y ese testimonio penetra su corazón como un fuego” (The Teachings of Harold B. Lee, ed. Clyde J. Williams, 1996, pág. 520).

2 Reyes 2:23–24. Lo más probable es que los que se burlaron del profeta Eliseo fueron heridos, no matados

En 2 Reyes 2:23, nota a al pie de página, aprendemos que las personas que se burlaron de Eliseo eran “muchachos (no niños pequeños)”. Esos muchachos probablemente eran jóvenes suficientemente mayores para ir a la batalla. La frase “¡Sube, calvo!”, ponía de manifiesto el desprecio de los muchachos hacia el profeta escogido por Dios, al ser intencionalmente socarrona, desdeñosa y burlona.

Además, los osos probablemente no mataron a los muchachos: “Cuando [Eliseo] ‘los maldijo en el nombre de Jehová’ [2 Reyes 2:24], él pidió al Señor que los castigara (compárese con la maldición que aparece en Judas 1:9); es lo opuesto a bendecir a alguien en el nombre de Jehová. Los osos no mataron a los ofensores, tal y como algunos comentaristas dan por sentado, sino que los ‘despedazaron’, o sea, laceraron” (Ellis T. Rasmussen, A Latter-day Saint Commentary on the Old Testament, 1993, pág. 301).