Seminario
Lección 106: Ester


Lección 106

Ester

Introducción

Tras destituir a la reina Vasti, el rey Asuero de Persia eligió a una joven judía llamada Ester para ser su nueva reina. Mardoqueo, el primo y guardián de Ester, ofendió a Amán, un líder en el reino Persa, al no inclinarse ante él. Amán recibió permiso del rey para destruir a todos los judíos que se encontraban en el reino. Después de haber ayunado junto con los judíos, Ester, arriesgando su vida, se acercó al rey para intervenir a favor de ellos. Ella expuso la traición de Amán y salvó a los judíos de sus enemigos.

Sugerencias para la enseñanza

Ester 1–5

Ester se convierte en reina de Persia y Amán conspira para destruir a los judíos

Antes de la clase, escriba las siguientes preguntas en la pizarra: Si hubieran podido vivir en cualquier otro periodo de la historia, ¿cuándo habría sido y por qué? Si hubieran podido nacer en cualquier otro lugar en el presente, ¿dónde habría sido y por qué?

Divida la clase en grupos de dos. Invite a un alumno de cada par a responder a la primera pregunta que se encuentra en la pizarra y al otro alumno que conteste la segunda. Invite a algunos alumnos a compartir sus respuestas con la clase. Después, escriba la siguiente pregunta en la pizarra: ¿Por qué me ha enviado el Señor a la Tierra en este tiempo y me ha colocado en mis circunstancias?

Explique que el libro de Ester relata la historia de una joven que fue colocada en una situación en la que tuvo la oportunidad de desempeñar un gran acto de servicio para el pueblo de Jehová.

Para ayudar a los alumnos a visualizar cuándo y dónde sucedieron los acontecimientos del libro de Ester, invítelos a buscar el Mapa Bíblico, Nº 7, “El Imperio Persa”, en el apéndice de la edición SUD de la Biblia, Versión Reina–Valera. Explique que Ester nació cuando los judíos estaban cautivos y exiliados. En los días de Ester, el Imperio Persa controlaba una gran parte del Medio Oriente. Ester vivía en Susa, que era la capital del Imperio Persa.

video iconConsidere mostrar a los alumnos el video “Para esta hora” (13:44) en lugar de parte de la lección. Si decide mostrar el video, posiblemente quiera iniciar después de explicar que “Ester vivía en Susa, que era la capital del Imperio Persa”. Después del video, vuelva a las sugerencias para la enseñanza, iniciando con la pregunta: “¿Por qué le preocupaba a Ester la sugerencia que Mardoqueo le hizo de ir ante el rey?” Este video está disponible en DVDs de Recursos Visuales del Antiguo Testamento y en LDS.org.

Para resumir Ester 1, explique que Asuero, el rey de Persia, se disgustó con su reina, Vasti, y decidió reemplazarla. En Ester 2 leemos que el rey buscó una nueva reina entre las hermosas jóvenes del reino.

Asigne a los alumnos a trabajar en grupos de dos y leer juntos en los siguientes versículos, Ester 2:5–11, 16–17, la historia de cómo Ester llegó a ser la reina de Persia. Invite a uno de los grupos a resumir lo que leyeron y después pregunte:

  • De acuerdo con el versículo 10, ¿por qué no sabía el rey que Ester era judía? (Ester mantuvo su identidad judía en secreto. Mardoqueo, el primo de Ester y el hombre que la crió, le había dado instrucciones de no revelar que era judía).

Para resumir Ester 2:21–23, explique que después de que Ester llegó a ser reina, Mardoqueo descubrió una conspiración para asesinar al rey y se lo contó a Ester. Como resultado, se capturó y se dio muerte a los que planeaban el asesinato.

Invite a varios alumnos a turnarse para leer en voz alta Ester 3:1–2, 5–6, 8–13, y pida a los alumnos que sigan la lectura en silencio para encontrar el problema que afrontaban Ester, Mardoqueo y los judíos.

  • ¿Qué fue lo que Amán convenció al rey Asuero que aprobara?

  • Si ustedes hubieran sido judíos en esa época y hubieran recibieran esas noticias, ¿qué piensan que habrían hecho en respuesta?

Pida a un alumno que lea Ester 4:1–3 en voz alta, e invite a los alumnos a seguir la lectura en silencio para averiguar la reacción de los judíos a ese decreto.

  • ¿Cómo respondieron los judíos al decreto?

  • ¿Cuál creen que podría ser una posible solución a ese problema?

Explique que Ester le envió un mensajero a Mardoqueo para averiguar cuál era su preocupación. Por medio de ese representante, Mardoqueo le envió un mensaje a Ester. Invite a los alumnos a leer en silencio Ester 4:8 para conocer lo que Mardoqueo le pidió a Ester que hiciera.

  • ¿Qué fue lo que Mardoqueo le pidió a Ester que hiciera?

Explique que mientras la sugerencia de Mardoqueo para Ester podría parecer fácil de seguir, ésta le presentó un problema. Invite a un alumno a leer Ester 4:11 en voz alta, y pida a los alumnos que sigan la lectura en silencio para conocer lo que le preocupaba a Ester.

  • ¿Por qué le preocupaba a Ester la sugerencia de Mardoqueo de ir ante el rey?

Explique que en aquella época, los reyes estaban frecuentemente en peligro de ser asesinados, así que se rodeaban de guardias e imponían castigos severos para cualquier persona que se acercara sin ser invitada a alguna habitación en la que ellos se encontraran. Ester estaría arriesgando su vida al ir ante el rey sin haber sido llamada. Le perdonarían la vida únicamente si él le extendía su cetro de oro.

  • Si ustedes hubieran sido Ester, ¿qué podrían haber concluido del hecho de que el rey no había pedido verles por treinta días?

Explique que cuando Mardoqueo recibió la respuesta de Ester que describía su preocupación, él le envió otro mensaje. Invite a un alumno a leer Ester 4:13–14 en voz alta, y pida a los alumnos que sigan la lectura en silencio para determinar lo que Mardoqueo le dijo.

  • ¿A qué crees que se refería Mardoqueo cuando le dijo a Ester que posiblemente ella había llegado al reino “para esta hora” (versículo 14)?

  • ¿Qué verdades aprendemos de la sugerencia de Mardoqueo acerca de la posible razón por la que Ester llegó a ser reina? (Es posible que los alumnos reconozcan una variedad de principios, pero asegúrese de que quede claro que el Señor nos puede colocar en ciertas circunstancias para que ayudemos a otras personas).

Invite a los alumnos a meditar brevemente en la tercera pregunta que usted escribió en la pizarra al comenzar la clase.

Explique que como Ester, tenemos una responsabilidad de ayudar a otras personas en las diversas circunstancias y situaciones en las que nos encontremos, incluso cuando nos sintamos renuentes a hacerlo.

Invite a un alumno a leer en voz alta las siguientes palabras del presidente Dieter F. Uchtdorf, y pida a los demás alumnos que presten atención a lo que el Señor espera de nosotros:

President Dieter F. Uchtdorf

“…el Señor les dio esas responsabilidades por una razón. Es posible que haya personas y corazones a los cuales sólo ustedes puedan llegar y conmover, y que nadie más pueda hacerlo de la misma manera” (“Impulsen desde donde estén”, Liahona, noviembre de 2008, pág. 56).

  • De acuerdo con las palabras del presidente Uchtdorf, ¿qué es lo que cada uno de nosotros puede hacer de manera única?

Escriba las siguientes preguntas en la pizarra, e invite a los alumnos a responderlas en su cuaderno de apuntes o en su diario de estudio de las Escrituras:

¿En qué ocasiones han visto a alguien usar su posición o circunstancias para bendecir a los demás?

En las circunstancias específicas en las que el Señor los ha colocado, ¿cómo pueden bendecir a otras personas?

Invite a algunos alumnos a compartir sus ideas con la clase.

Pida a los alumnos que mediten si alguna vez se han preocupado por no ser lo suficientemente fuertes para hacer algo que Dios quiere que hagan.

Explique que Ester envió otra respuesta a Mardoqueo por medio de los mensajeros del palacio. Invite a un alumno a leer Ester 4:15–17 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para conocer su decisión.

  • ¿Por qué fue valiente la decisión de Ester?

  • ¿Por qué creen que Ester les pidió a todos los judíos de la ciudad que ayunaran por tres días antes de que ella fuera a ver al rey?

  • ¿Qué principio aprendemos de Ester acerca de prepararnos para hacer cosas difíciles? (Es posible que los alumnos usen otras palabras, pero asegúrese de que reconozcan el siguiente principio: Si ayunamos y oramos para recibir la ayuda del Señor, Él puede bendecirnos con fortaleza espiritual para hacer cosas difíciles).

Aliente a los alumnos a ayunar y orar para obtener mayor fortaleza espiritual y valor para hacer cosas difíciles en su vida. Posiblemente quiera sugerir que los alumnos también consideren pedir a sus seres queridos que se unan a ellos en sus ayunos y oraciones.

Ester 5–10

Ester revela el complot de Amán y los judíos prevalecen contra sus enemigos

Pida a los alumnos que lean en silencio Ester 5:1 y que traten de imaginarse lo que debe haber sentido Ester al entrar al patio interior del palacio del rey. Invite a los alumnos a compartir sus pensamientos con la clase.

  • ¿Por qué crees que Ester estaba dispuesta a arriesgar su vida?

Invite a un alumno a leer Ester 5:2–3 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para conocer lo que sucedió cuando el rey vio a Ester. Pida a los alumnos que den un informe de lo que encuentren.

Explique que para los capítulos que faltan de Ester, los alumnos leerán el relato de Ester en voz alta de manera parecida a como se lee en la festividad judía de Purim (véase Bible Dictionary, “Feasts”). Como parte de esa celebración, se les lee a los niños en voz alta la historia de Ester. Cuando se lee el nombre de Mardoqueo, todos aclaman o vitorean. Por el contrario, cuando se lee el nombre de Amán, todos abuchean o muestran desagrado.

Escriba los siguientes pasajes de las Escrituras en la pizarra: Ester 5:9, 12–14 y Ester 7:1–6, 9–10. Invite a dos alumnos a leer esos pasajes en voz alta en el momento apropiado en el siguiente guión, y pida a la clase que siga la lectura en silencio a medida que los alumnos lean en voz alta. Usted puede leer la parte del narrador.

Narrador: Después de que el rey le preguntó a Ester lo que ella deseaba de él, ella preguntó si él y Amán podían asistir a un banquete que ella prepararía para ellos. El rey y Amán aceptaron gustosamente la invitación.

Alumno 1: Ester 5:9, 12–14

Narrador: El rey no pudo dormir la noche previa al banquete. Pidió que se le leyeran algunos informes oficiales y descubrió que Mardoqueo le había salvado la vida al detener el intento de asesinato. Por ello, hizo que Amán le concediera grandes honores a Mardoqueo, lo que avivó el odio de Amán por Mardoqueo y los judíos.

Alumno 2: Ester 7:1–6, 9–10

Narrador: Después de que Amán murió, el rey Asuero dio un segundo decreto de preservar a los judíos y les dio poder para destruir a sus enemigos dentro del reino. La festividad de Purim se instituyó para ayudar a los judíos a recordar su liberación de Amán. Mardoqueo fue elevado a segundo en mando en el reino.

Después de esa actividad, pregunte:

  • ¿Cuáles fueron las consecuencias de que Ester actuara con valentía para salvar a los judíos? ¿Qué principios aprendemos del ejemplo de la reina Ester? (Es posible que los alumnos reconozcan una variedad de principios, pero asegúrese de recalcar que si actuamos con valentía para hacer lo correcto, entonces nuestros esfuerzos pueden bendecir a muchas personas).

  • ¿En qué ocasión ustedes o alguien que conozcan han actuado con valentía para hacer lo correcto? ¿Cómo se bendijo a otras personas a causa de esa valiente acción?

Para concluir la lección, pida a los alumnos que testifiquen acerca de las verdades que han aprendido del relato de Ester. Invítelos a actuar con valentía y elegir lo correcto en situaciones difíciles y a encontrar maneras de servir a los demás, y de esa forma seguir el ejemplo de Ester.

Comentarios e información de contexto

Ester 4:14. “¿…quién sabe si para esta hora tú has llegado al reino?”

El presidente James E. Faust, de la Primera Presidencia, alentó a las mujeres jóvenes a cultivar cualidades que les ayudarán a ejercer una poderosa influencia de rectitud al servir a los demás en el nombre de Dios:

“Estos son tiempos difíciles. Creo que tal vez sus espíritus fueron reservados para estos últimos días; que ustedes, como Ester, han venido a la tierra ‘para esta hora’. Es posible que sus logros más trascendentales e imperecederos sean la recta influencia que ejerzan en los demás; que su belleza interna e intuición femenina y divina encuentren expresión en su sosegada fortaleza, dulzura, dignidad, encanto, gracia, creatividad, sensibilidad, resplandor y espiritualidad. Realcen estos sublimes dones femeninos” (“Las virtudes de las hijas rectas de Dios”, Liahona, mayo de 2003, pág. 111).

El élder D. Todd Christofferson, del Quórum de los Doce Apóstoles, de igual manera enseñó acerca de las cualidades divinas y la poderosa influencia moral de las mujeres rectas:

“Una ex Presidenta General de las Mujeres Jóvenes, Margaret D. Nadauld, enseñó: ‘El mundo tiene suficientes mujeres duras; necesitamos mujeres delicadas. Hay suficientes mujeres groseras; necesitamos mujeres amables. Hay suficientes mujeres rudas; necesitamos mujeres refinadas. Hay suficientes mujeres que tienen fama y dinero; necesitamos más mujeres que tengan fe. Hay suficiente codicia; necesitamos más abnegación. Hay suficiente vanidad; necesitamos más virtud. Hay suficiente popularidad; necesitamos más pureza’ [Margaret D. Nadauld, “El regocijo del ser mujer”, Liahona, enero de 2001, pág. 18]…

“La súplica que les hago hoy a las mujeres y a las jovencitas es que protejan y cultiven la fuerza moral que llevan en su interior; preserven esa virtud innata y dones únicos que traen a este mundo. Su instinto es hacer lo bueno y ser buenas, y al seguir al Santo Espíritu, su autoridad moral y su influencia aumentarán. A las jovencitas les digo: no pierdan esa fuerza moral, incluso antes de tenerla en toda su medida. Asegúrense, en particular, de que su lenguaje sea limpio, no soez; que su modo de vestir refleje la modestia, no la vanidad; que su conducta manifieste la pureza, no la promiscuidad. No pueden elevar a los demás a la virtud por un lado si por el otro viven de forma inmoral” (“La fuerza moral de la mujer”, Liahona, noviembre de 2013, págs. 31–32).

El presidente Spencer W. Kimball enseñó que el Señor ha colocado dentro de nuestra esfera de influencia a personas específicas a quienes podemos ayudar a salvar:

“Pienso que el Señor ha puesto, de una forma muy natural, entre nuestros amigos y conocidos a muchas personas que están listas para entrar en Su Iglesia. Les pedimos que oren para reconocer a esas personas y luego soliciten la ayuda del Señor para presentarles el mensaje del Evangelio” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Spencer W. Kimball, 2006, pág. 288).

Ester 4:16. “…si perezco, que perezca”

El presidente Thomas S. Monson enseñó lo siguiente acerca de la valentía:

“Todos sentiremos temor, seremos ridiculizados y afrontaremos oposición. Tengamos todos nosotros el valor de desafiar la opinión popular, la valentía de defender nuestros principios. El tener valor, no el transigir, es lo que trae la aprobación de Dios. La valentía se convierte en una virtud viva y atractiva cuando se considera no sólo como la voluntad de morir con dignidad, sino como la determinación de vivir honorablemente. A medida que sigamos adelante, procurando vivir como debemos, con toda seguridad recibiremos la ayuda del Señor y encontraremos consuelo en Sus palabras” (“Esfuércense y sean valientes”, Liahona, mayo de 2014, pág. 69).