Oseas 6
Dios desea que el arrepentimiento sea sincero
A veces, las personas piensan que pueden pecar y luego realizar algunos actos visibles como pedir disculpas, orar un poco, pagar el diezmo y asistir a todas las reuniones de la Iglesia para compensar por sus pecados. A pesar de que esas acciones son importantes, el arrepentimiento es un proceso mucho más profundo; es un corazón quebrantado y un espíritu contrito que provocan un intenso pesar por los pecados cometidos (véase 3 Nefi 9:20). Si nos arrepentimos de esa manera, sinceramente, y renovamos nuestros convenios con el Señor, el Espíritu nos purificará, nos traerá paz de conciencia, nos ayudará a perder el deseo de pecar, nos enseñará cómo continuar acercándonos al Señor y nos dará la fortaleza para guardar los convenios que hemos hecho.
Parece que Oseas 6:1–3 fueran palabras de los hijos de Israel expresando cuán rápidamente pensaban arrepentirse. El resto de ese corto capítulo da la respuesta del Señor en la que expresa decepción ante esa actitud. El versículo 6 señala que Él desea más la rectitud interior de Sus hijos que las demostraciones visibles de fidelidad religiosa.