Ajustes a la organización del sacerdocio
A lo largo de la historia de la Iglesia, los presidentes de la Iglesia han abordado las necesidades y oportunidades de la Iglesia en crecimiento haciendo ajustes a la organización del sacerdocio. Cuando una modificación importante de los cuórums del sacerdocio entró en vigor en 1877 bajo la presidencia de Brigham Young, el apóstol Orson Pratt aseguró a los Santos de los Últimos Días que la adaptación era una parte esencial del orden del sacerdocio. “Esta organización ha de seguir adelante, paso a paso”, enseñó él, “y de un grado a otro, así como las personas crecen y aumentan su conocimiento de los principios y leyes del reino de Dios, y hasta donde sus confines se extiendan”1. Bien sea que se originen en las revelaciones en Doctrina y Convenios o provengan de las instrucciones inspiradas de los líderes de la Iglesia y comunicadas por medio de mensajes en la conferencia general o en los manuales, los ajustes continuos a la estructura eclesiástica de la Iglesia han reflejado la vitalidad del sacerdocio.
Los primeros oficios y cuórums
Para la recién organizada Iglesia de Cristo en 1830, los Artículos y Convenios (que posteriormente se expandió para conformar Doctrina y Convenios 20) eran la base de la organización del sacerdocio. El documento describía las ordenanzas (como el bautismo), los diferentes oficios (como el de presbítero y élder) y un sistema para dirigir los asuntos de la Iglesia (como las conferencias trimestrales). A medida que la membresía de la Iglesia crecía y sus necesidades cambiaban, revelaciones posteriores introdujeron ordenanzas, oficios y sistemas de organización adicionales. Los términos y conceptos sobre el sacerdocio fluctuaron en los primeros cinco años de la Iglesia2.
Cambios importantes ocurrieron en Kirtland, Ohio, y en Nauvoo, Illinois, a medida que José Smith actuaba bajo la revelación que lo condujo a restaurar el sacerdocio en su plenitud. En 1835, mientras se preparaba para la dedicación del Templo de Kirtland, José instituyó los cuórums y los procedimientos de cuórum de acuerdo con la revelación y el consejo. Él expresó con satisfacción que había “completado la organización de la Iglesia” siguiendo las revelaciones que había recibido, y que los cuórums del sacerdocio podrían continuar edificando el reino de Dios3. En 1842, él propuso la organización de la Sociedad de Socorro Femenina de Nauvoo “de acuerdo con el modelo u orden del sacerdocio” e introdujo ordenanzas del templo adicionales.
En 1835 y 1836, los púlpitos en el Templo de Kirtland se correspondían con los diferentes oficios del sacerdocio.
Simplificación de los cuórums, los barrios y las estacas
Después de José Smith, algunas de las reformas más intensas a la organización del sacerdocio ocurrieron bajo la dirección de Brigham Young, a fines de la década de 1870, y de Joseph F. Smith, a inicios de la década de 1900. Entre 1876 y 1877, Brigham Young abordó las irregularidades locales en los barrios y las estacas con un plan para estandarizar el modelo y la denominación de las estacas, los barrios, los cuórums y los oficios del sacerdocio. Se descontinuó el estatus de “estaca central”, declarando a todas las estacas efectivamente iguales4. Nuevos criterios definirían la manera de organizar una estaca o un cuórum. Los apóstoles ya no servirían en las presidencias locales y los obispos presidirían en los barrios, no los presidentes de barrio. Una línea de responsabilidad más vertical fluiría a través de los presidentes de estaca y los obispos, aportando uniformidad a los barrios y a las estacas y dirigiendo a los cuórums a través de líneas de autoridad definidas. Las reuniones de cuórum se convocaban en intervalos estandarizados5.
Alrededor de 1906, Joseph F. Smith puso énfasis en que se ordenase a los hombres jóvenes al Sacerdocio Aarónico y recomendó grupos de edades para la ordenación a cada oficio, a semejanza de la división en clases según la edad, que las líderes de las Mujeres Jóvenes habían establecido anteriormente. Él emprendió un estudio ordenado del gobierno de la Iglesia buscando establecer una coherencia doctrinal en la manera en que los oficiales del sacerdocio desempeñaban sus deberes. Él enfatizó que la autoridad para presidir un cuórum o una organización necesitaba una autorización especial para ejercer “las llaves del sacerdocio”.
“El sacerdocio en general es la autoridad que se da al hombre para actuar por Dios. A todo hombre que es ordenado a cualquier grado del sacerdocio se le delega esta autoridad; pero es necesario que todo acto que se efectúe bajo esta autoridad se realice […] en la debida forma y de acuerdo con el orden correcto. El poder de dirigir estas obras constituye las llaves del sacerdocio”6.
El presidente Smith hizo énfasis en que el desempeño de todos los deberes del cuórum estaba gobernado por el ejercicio de las llaves delegadas a los presidentes de cuórum bajo la dirección del Presidente de la Iglesia, quien poseía todas las llaves otorgadas por el Señor a la Iglesia7.
La correlación del sacerdocio y la Iglesia mundial
El crecimiento de la Iglesia dio pie a que se realizaran varias evaluaciones sobre la eficiencia organizativa de los barrios, las estacas y los programas en el transcurso del siglo XX. En 1923, el presidente Heber J. Grant organizó una estaca en Los Ángeles, California, una ciudad donde los santos eran una pequeña minoría8. Esto cambió el modelo convencional que existía en el siglo XIX de crear estacas solo en comunidades donde había una mayoría de Santos de los Últimos Días. El presidente Grant también estableció un nuevo cargo, Ayudante de los Doce, para aliviar las crecientes demandas sobre el Cuórum de los Doce Apóstoles. Entre 1941 y 1976, treinta y ocho hombres sirvieron como Ayudantes de los Doce, hasta que el presidente Spencer W. Kimball los llamó al Primer Cuórum de los Setenta y retiró el cargo.
La Primera Presidencia y el Cuórum de los Doce Apóstoles continuaron simplificando las organizaciones auxiliares de la Iglesia dentro de un sistema de administración de la Iglesia llamado inicialmente “correlación” y, posteriormente, Correlación del sacerdocio. Este proceso asumió diversas formas en tiempos diferentes: desde los esfuerzos de David O. McKay, como Apóstol, por consolidar el curso de estudio de la Iglesia en la década de 1910, hasta una reorganización de las organizaciones auxiliares por comités dirigidos por el sacerdocio durante las presidencias de David O. McKay, Joseph Fielding Smith y Harold B. Lee.
Los ajustes prosiguieron con regularidad, sin embargo, muchos de ellos tuvieron efectos radicales tanto a nivel general como local. El presidente Spencer W. Kimball organizó un cuórum de Setentas Autoridades Generales, retiró el llamamiento de Patriarca General de la Iglesia y recibió la revelación para extender la ordenación del sacerdocio a los hombres de ascendencia africana negra por primera vez desde la década de 18409. En 1986, el presidente Ezra Taft Benson anunció que se daría fin a los cuórums de Setentas de estaca10. Al final de la década de 1990, el presidente Gordon B. Hinckley instituyó las Autoridades de Área (quienes finalmente fueron catalogados como Setentas de Área) para satisfacer mejor las necesidades de una Iglesia mundial en crecimiento11.
Se produjeron otros ajustes a la organización del sacerdocio a principios del siglo XXI. En 2018, se descontinuaron los grupos de sumos sacerdotes en los barrios, indicando que todos los poseedores del Sacerdocio de Melquisedec pertenecen al cuórum de élderes. Sin embargo, permanecieron vigentes los cuórums de sumos sacerdotes de estaca (aunque referidos únicamente a aquellos con llamamientos activos como patriarcas de estaca, la presidencia de estaca, el sumo consejo y los obispados). En 2019, la Primera Presidencia anunció que los hombres jóvenes pueden ser ordenados al Sacerdocio Aarónico al inicio del año calendario en el que cumplen 12 años de edad en lugar de esperar la fecha de cumpleaños, como se acostumbraba anteriormente12.
Temas relacionados: Restauración del Sacerdocio Aarónico, Restauración del Sacerdocio de Melquisedec, Sociedad de Socorro Femenina de Nauvoo