“Instituciones legales y políticas de Estados Unidos”, Temas de la historia de la Iglesia
“Instituciones legales y políticas de Estados Unidos”
Intentos de extradición a Misuri
Tras el conflicto armado entre los mormones y algunos ciudadanos de Misuri en el otoño de 1838, varios líderes de la Iglesia, entre ellos José Smith, fueron arrestados y encarcelados bajo diversos cargos. Sin embargo, por las atrocidades cometidas contra los santos, no se hizo ningún juicio. José y los demás Santos de los Últimos Días creían que las acusaciones hechas en su contra eran una forma de persecución legal con el propósito de perjudicarlos mientras se expulsaba del estado al cuerpo principal de santos.
En abril de 1839, un gran jurado de Misuri acusó formalmente a José Smith y otros por causar disturbios, incurrir en traición y latrocinio, aceptar bienes robados y provocar incendios —todos estos crímenes se habían cometido supuestamente el año anterior durante la guerra entre Misuri y los mormones. En esa audiencia, el juez que presidía la causa dictaminó un cambio de jurisdicción y ordenó que se trasladase a los prisioneros a Columbia, al condado de Boone, para la audiencia final. Cuando se les llevaba a someterse a juicio, José y sus compañeros escaparon con la ayuda de uno de los guardias, y huyeron hacia Illinois, donde el grupo principal de los santos había hallado refugio1. Entre 1840 y 1843, los oficiales del estado de Misuri se esforzaron por lograr la extradición de José (forzarlo legalmente a volver a Misuri) para enjuiciarlo. José argumentaba que los oficiales de ese estado no se habían apegado al debido proceso legal y creía que sus enemigos estaban intentando valerse del proceso legal para orquestar su ejecución2.
Un año después de que José Smith escapara hacia Illinois, el gobernador de Misuri, Lilburn W. Boggs envió una solicitud formal al gobernador de Illinois, Thomas Carlin, exigiendo la extradición de José a Misuri para someterlo a juicio. Carlin expidió entonces una orden de arresto, y un alguacil buscó dar con José en Nauvoo pero no tuvo éxito. Carlin volvió a expedir la orden en junio de 1841, y otro alguacil arrestó a José. El juez Stephen A. Douglas liberó de los cargos a José, al considerar que la orden estaba viciada3.
Se intensificaron los intentos para extraditar a José en 1842, luego que un asaltante desconocido disparara contra Boggs y lo hiriera en Independence, Misuri, cuando este ya no era gobernador. John C. Bennett, quien había sido excomulgado de la Iglesia y se había convertido en enemigo de la Iglesia, afirmó que José había enviado a Porter Rockwell para asesinar a Boggs4. El Profeta rechazó vehemente tal acusación. No obstante, el nuevo gobernador de Misuri, Thomas Reynolds, solicitó a Illinois la extradición de José, y el gobernador Carlin nuevamente expidió una orden de arresto. La Corte Municipal de Nauvoo cuestionó la legalidad del arresto, y emitió un escrito de habeas corpus, que es una protección legal que hace que un prisionero comparezca inmediatamente ante un juez para que este dictamine si su arresto y detención son legales5. En el transcurso de los dos días que le tomó al alguacil confirmar la legalidad de la orden, José pasó a la clandestinidad6.
Emma Smith y las mujeres de la Sociedad de Socorro Femenina de Nauvoo se erigieron en defensa del Profeta. Las mujeres firmaron una petición dirigida al gobernador Carlin instándole a dar fin al proceso de extradición. Emma escribió otras cartas a Carlin, argumentando que si incluso José hubiera tramado de alguna forma el intento de asesinato desde Illinois, como se alegaba, la extradición no era el procedimiento legal adecuado, toda vez que Misuri no tiene poder alguno para enjuiciar a una persona por un crimen que supuestamente ocurrió fuera de sus fronteras7. En enero de 1843, José compareció ante el tribunal de distrito de los Estados Unidos en Springfield, Illinois, donde su abogado, Justin Butterfield, presentó una argumentación similar. “No considero que se deba entregar a mi defendido, bajo ninguna circunstancia, a Misuri”, dijo Butterfield. “La historia nos demuestra que él y su gente han sido asesinados y expulsados de ese estado”, agregó, y concluyó afirmando que “él es un hombre inocente, que no ha cometido ofensa”. El tribunal estuvo de acuerdo con Butterfield y liberó a José8.
John C. Bennett continuó creando agitación para lograr el arresto de José Smith y, en junio de 1843, una corte de Misuri expidió un nuevo auto de acusación por el cargo de 1839 de traición9. El gobernador Reynolds envió una petición al nuevo gobernador electo de Illinois, Thomas Ford, y José fue arrestado por órdenes de Ford. Nuevamente, el tribunal municipal de Nauvoo concedió un habeas corpus a José y el 1 de julio recibió testimonio no solo acerca de la legalidad de la extradición, sino también de los crímenes cometidos en 1838 en contra de los mormones en Misuri. El tribunal dictaminó liberarlo de la orden de extradición10. Esto dio fin a los intentos que emprendió el estado de Misuri para extraditar a José a fin de someterlo a juicio en el estado. No obstante, José mantenía la preocupación de que sus enemigos en Misuri intentaran de nuevo forzarlo a ir a un lugar para comparecer ante tribunales parcializados y, quizás así, quitarle la vida11.