Ardeth G. Kapp
Ardeth Greene Kapp sirvió como novena Presidenta General de la organización de las Mujeres Jóvenes de la Iglesia entre 1984 y 1992. Durante su presidencia, encabezó iniciativas para mejorar los programas y las actividades de la organización, así como las experiencias de las mujeres jóvenes en un entorno cada vez más internacional.
Ardeth nació en 1931 en una unida comunidad de Glenwood, Alberta, Canadá, donde su familia estaba a cargo de una granja y un almacén. Cuando ella era niña, sus padres, Edwin y Julia Greene, no tenían muchos bienes materiales, pero mostraban una gran generosidad. Aunque Ardeth sentía que no se había destacado mucho como estudiante cuando era joven, desarrolló una pasión por la educación. A los dieciséis años se sometió a una importante cirugía en el oído que interfirió en su formación académica. Edwin y Julia la ayudaron a mudarse a Provo, Utah, donde se inscribió en la escuela secundaria Brigham Young High School. Antes de graduarse, comenzó a salir con Heber Kapp, a quien había conocido cuando él era misionero e iba de forma ocasional a cenar con su familia. Ardeth y Heber se casaron en 1950.
Ardeth Kapp trabajó profesionalmente en recursos humanos y educación hasta que amplió sus estudios en Educación Primaria y Planificación de Cursos de Estudio. Se graduó con una licenciatura de la Universidad de Utah en 1964 y una maestría de la Universidad Brigham Young en 1971. Entre 1972 y 1978 prestó servicio como Segunda Consejera de Ruth Hardy Funk, Presidenta General de las Mujeres Jóvenes. En ese tiempo, la organización experimentó muchos cambios significativos. Las organizaciones de jóvenes de la Iglesia, que incluían las de las mujeres jóvenes, pasaron a estar bajo la supervisión directa del sacerdocio con una nueva unidad que no duró mucho tiempo y que se llamó Asociación de Mejoramiento Mutuo del Sacerdocio Aarónico. Cinco años más tarde, Kapp ayudó a Funk en la preparación e introducción de un nuevo programa de logros llamado Mi Progreso Personal.
En 1984, Kapp fue llamada como Presidenta General de las Mujeres Jóvenes. Las investigaciones de aquel entonces indicaban que la asistencia de las mujeres jóvenes a la Iglesia había ido disminuyendo. Por esa razón, Kapp y sus consejeras se unieron desde el primer momento en oración para buscar inspiración en cuanto al modo de ayudar a las mujeres jóvenes a desarrollar un sólido sentido de identidad personal como hijas de Dios y a prepararse para prestar servicio en el Reino de Dios. Kapp animó a las líderes a que ampliaran las actividades y los programas para incluir a las mujeres jóvenes de todas las procedencias. Basándose en su experiencia profesional con la gestión basada en valores, Kapp presentó a sus consejeras una idea sobre la creación de un conjunto de valores para las mujeres jóvenes. La presidencia esperaba que esos valores sirvieran para consolidar la percepción que cada joven tenía de sí misma como hija de Dios, con una naturaleza divina, y para ayudarlas a prepararse para las oportunidades sagradas de hacer convenios en el templo.
Kapp también recurrió a la tecnología para organizar eventos multimedia memorables y experiencias interactivas para las mujeres jóvenes de todo el mundo. El 10 de noviembre de 1985, su presidencia organizó la primera transmisión vía satélite de la Iglesia para las mujeres jóvenes, la cual contó con representantes de distintos países que presentaron los valores y el lema de la organización. Kapp esperaba que, junto con el programa actualizado del Progreso Personal, el compañerismo dentro de la organización pudiera ayudar a las mujeres jóvenes a prepararse para entrar en el templo y llevar vidas enriquecidas por los convenios. Su presidencia procuró fortalecer la hermandad en todo el mundo por medio de una celebración mundial llamada “La nueva generación”. El 11 de octubre de 1986, miles de mujeres jóvenes de todo el mundo ataron sus testimonios escritos a los hilos de globos inflados con helio que más tarde soltaron al cielo. Otros cambios durante la presidencia de la hermana Kapp fueron la creación de una nueva máxima: “Defendamos la verdad y la rectitud”, y un nuevo emblema para la organización que consistía en el perfil de una mujer joven en la forma de una antorcha encendida como símbolo de la luz de Cristo. Kapp también tuvo un papel fundamental en la actualización del folleto Para la fortaleza de la juventud en 1990 y en la publicación del nuevo manual de campamento en 1992.
La presidencia de Ardeth Kapp fue la última que tuvo una duración de más de cinco años. Los cambios que ella y sus consejeras introdujeron constituyeron el programa básico de la organización para las mujeres jóvenes durante las tres décadas siguientes y dejaron un legado del que se beneficiaron millones de mujeres jóvenes en todo el mundo. Ardeth Kapp falleció en marzo de 2024 a los 93 años.
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